Ha muerto Mbuyi Kabunda Badi. ¡Viva Mbuyi Kabunda Badi!

Los movimientos africanistas, y en general, los movimientos nacidos contra la injusticia y el racismo, han perdido a un gran hombre. Se trata del congoleño Mbuyi Kabunda Badi. Su obra y palabra estuvo siempre presta a acompañar a la negritud y a su continente originario.

Este hombre nacido en el Congo, dedicó su vida al estudio de los Estados africanos, sus avances y fracasos, sus regímenes políticos, ecologías y sociologías. Ha dejado un prolífico trabajo dedicado, no solo a aportar elementos para la comprensión de las lógicas diversas y la historia africana atravesada por la violencia en todos sus sentidos, sino que también dejó hojas de ruta para proseguir en la construcción de la libertad.

Kabunda Badi también fue un destacado profesor en la Universidad Complutense de Madrid. Desde esa trinchera, enseñó y aprendió del mundo diverso que lo rodeaba.

En España, además de amigos, encontró compañeros de lucha con los que materializó proyectos como Sodepaz.

Hizo importantes esfuerzos por construir redes tejidas al corazón y a las necesidades de los pueblos africanos, teniendo siempre como objetivo coadyuvar en los procesos de liberación tanto territoriales, como los constreñidos en los cuerpos y sentimentalidades de un continente, el africano, considerado por él mismo como femenino.

La centralidad de sus últimas obras estuvo revestida por los derechos humanos, que en sus propias palabras es “una de las asignaturas pendientes de África en este inicio del siglo XXI. Son constantemente violados por los gobiernos en nombre de la tradición, el islam, la construcción nacional y el desarrollo, y por los señores de la guerra o los islamistas, para acceder al poder o a las fuentes de las materias primas”.

Su obra

Para Kabunda Badi, la construcción artificial y bestial del continente africano, convirtió a muchos de los regímenes políticos en contradictorios y alejados de sus ciudadanías.

Estos mandatarios nacidos de la forja de esa contradicción, pretendían seguir dominando como las antiguas excolonias, pero a nombre de la ideología de la negritud.

Sus estudios también hablan sobre rupturas y dialécticas de legitimidades en constante choque, y ante esto, la impostergable búsqueda de su superación.

Mbuyi Kabunda Badi deja un vacío por llenar con tan solo 66 años. Sin embargo, las líneas de trabajo son claras: migración, negritud, derechos humanos, asuntos internacionales y África. Siempre África.

Todo el legado está servido para continuar mirando hacia el futuro, partiendo de lo esencial y humano, pero sobre todo de la posibilidad infinita de seguir mas allá de los pretendidos dominadores.