The news is by your side.

5 preguntas de un guayaquileño al vicepresidente de Ecuador

Este 2020, Guayaquil cumple 200 años de independencia del Reino de España. “Su gente la conmemorará como mejor sabe: trabajando, será un tiempo de alcance de retos que fueron preparados y meticulosamente desarrollados para conseguirse”, ensalzaba diario EXPRESO en una nota del 1 de enero.

Así nos preparábamos los “guayacos” para este gran año. Era una fiesta a la que estaba invitado todo el Ecuador, como lo señalaba Juan J. Paz y Miño Cepeda, historiador ecuatoriano: “valorando el proceso independentista, todo el país debe congratularse y enorgullecerse por conmemorar un nuevo aniversario de la Revolución de Octubre en Guayaquil y, desde ahora, prepararse a celebrar, en 2020, el Bicentenario de esa gesta independentista”.

>>Viktor dio positivo<<

En un abrir y cerrar de ojos, la Fuerza de Tarea Conjunta creada para la emergencia por Covid-19, ha informado que en los primeros 15 días de abril existe un desfase de 5700 fallecidos en la provincia del Guayas, cuya capital es Guayaquil. Muchos de ellos asociados a problemas respiratorios.

De prepararnos para festejar el bicentenario de la independencia de la ciudad, hemos pasado a luchar por sobrevivir y obtener un entierro digno para quienes han fallecido. Nuestro año de festejo, se convirtió, sin que estuviésemos preparados, en el año que más se ha llorado en Guayaquil.

Pruebas

El primer caso con Covid-19 fue diagnosticado el viernes 28 de febrero del 2020, la paciente contagiada llegó a Guayaquil el 14 de febrero, proveniente de España. Y desde entonces, en las redes sociales hemos visto cómo gente sin tener formación en medicina, pretende explicar (de mala fe) lo que pasa con la salud en nuestra ciudad, difundiendo información que no está conectada con evidencia científica.

Como el ministro de Defensa Oswaldo Jarrín cuando dijo a los medios de comunicación que el problema radicaba en que los guayaquileños no respetamos las leyes. O el viceministro de salud Ernesto Carrasco asegurando que los doctores aquí pretenden estar vestidos como “astronautas, menospreciando la necesidad que ellos tienen de trajes de bioseguridad para combatir la enfermedad, no solo mascarillas y guantes.

>>La necropolítica como régimen de gobierno en Ecuador<<

En realidad, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha explicado que la forma más eficaz de salvar vidas es romper la cadena de transmisión del virus, para eso es necesario hacer pruebas, cuarentena, y por supuesto aislar. Hazlo todo”, ha dicho la OMS en sus publicaciones.

Esto nos lleva a una primera cuestión: El ministro de Salud Juan Carlos Zevallos, reconoció que no encontró ningún proceso para la compra de dos millones de pruebas de COVID-19, algo que había anunciado al país la Dra. Catalina Andramuño cuando ella era ministra de Salud.

Vicepresidente Otto Sonnenholzner, contéstenos sinceramente, ¿Por qué el Ministerio de Salud le mintió al país?

Hospitales de campaña

Con ayuda internacional de Rusia se instaló un hospital de campaña con 142 camas en Bérgamo. Madrid atiende a pacientes con dificultades respiratorias en un hospital de campaña de 500 camas ubicado en la feria de Madrid. Nueva York ha montado varios hospitales de campaña y el barco médico militar más grande del mundo llegó al río Hudson. Londres abrió un hospital de campaña con capacidad para 4.000 camas en un centro de conferencias.

Pero regresemos a nuestra realidad en Guayaquil, donde las autoridades no han instalado ni un hospital de campaña. Los hospitales de la ciudad están sobre saturados, y como no hay donde atender de manera provisional a los enfermos respiratorios, mucha gente fallece en sus casas o mueren en la calle ahogados sin recibir oxígeno o un respirador.

Esto contrasta con lo certificado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en el 2017, cuando aseguraba que el Ministerio de Salud de Ecuador tiene hospitales móviles que también pueden responder a emergencias de tipo epidemiológico. Sin embargo, si se encuentran operativos, estos no están en Guayaquil que es el epicentro de la pandemia.

>>Ecuador: ¿confinamiento o hambre?<<

Hasta ahora solo se ha anunciado que funcionará (tiempo futuro) en Guayaquil una Unidad Móvil de Emergencia (UME) donada por la Cruz Roja. Y en un vídeo de la Vicepresidencia aparece una clínica móvil supuestamente habilitada para COVID-19, pero no se explica qué capacidad tiene, qué porcentaje de cobertura representa respecto de las camas que le faltan al sistema hospitalario, cuántas camas de UCI (cuidados intensivos), etcétera.

Otto, es necesario preguntarle, ¿Se instalará algún hospital de campaña en Guayaquil? ¿De cuántas camas?

Túneles de desinfección

El doctor Pablo Araujo, docente investigador de la Universidad Central ha dicho categóricamente que estos túneles no sirven para nada.

Más específicamente, el doctor Esteban Ortiz, quien asesora (ad-honorem) a las autoridades que conforman el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional, ha señalado: Los túneles de desinfección no son eficaces, son poco o nada costo efectivos, y el hipoclorito de sodio (sustancia para hacer la desinfección) tiene efectos adversos (una concentración de hipoclorito superior al 10% es corrosiva, pueden dañar todas las capas de los ojos, etc.). Hay que entender que la trasmisión (del virus) se hace por vía respiratoria o contacto directo. La ropa tiene muy poco potencial de contagio”.

El doctor Ortiz también es lapidario sobre el costo y beneficio de los túneles: es mejor pagar por jabón y alcohol gratis para la población. A pesar de la posición adversa del citado salubrista, igual se instalaron túneles de desinfección en hospitales públicos y mercados de Guayaquil. Son en total 55 para la provincia de Guayas, informó la Gobernación.

La pregunta que me surge para Otto es, ¿en qué medida se toman en cuenta las recomendaciones de los salubristas que asesoran al COE?

Ayuda humanitaria

En días pasados el ministro de Defensa Oswaldo Jarrín, recibió en el aeropuerto de Quito a un avión de las Fuerzas Armadas (el Hércules) que arribó, desde Estados Unidos, con 16 mil libras (siete toneladas) de insumos médicos donados por Charity Everywhere.

Veintitrés horas de vuelo le tomó al Hércules traer siete toneladas de ayuda médica desde USA; el mismo día que llegó a Venezuela el cuarto avión directamente desde China con noventa toneladas de ayuda.

Luego de revisar las publicaciones del Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre, pude percatarme que además del vuelo del Hércules que arribó a Ecuador con 7 toneladas de insumos médicos, se registra un vuelo de carga de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) que llegó con 2 toneladas de ayuda, un vuelo de KLM Cargo, y otro de Avianca Cargo. No se especifican cuántas toneladas de reactivos e insumos llegaron en las dos últimas aeronaves mencionadas.

>>Ecuador: Lenín Moreno en la Mascarada COVID-19<<

Toda ayuda es buena, sin embargo, lo recibido son gotas comparado con lo que gestionan otros países de la región. Al respecto, la Asamblea Nacional esta semana aprobó una resolución que pide al gobierno nacional solicitar asistencia sanitaria internacional que apoye con brigadas de profesionales, insumos médicos, reactivos y equipamientos. Algo que hasta el momento no ha sucedido.

Concretamente señor vicepresidente, ¿cuánta ayuda humanitaria ha llegado al país?

Bono deuda

Este asunto es tal vez el más comentado y el que más intriga a los ciudadanos. El 24 de marzo del 2020, en plena emergencia sanitaria, Ecuador pagó $324 millones por concepto de los Bonos Global 2020, justo un día después el FMI y el Banco Mundial instaron a los acreedores bilaterales a ofrecer un alivio inmediato a los países más pobres, que enfrentan graves consecuencias por la rápida propagación del coronavirus.

Poco importó además, que el presidente de la Asamblea Nacional y los jefes de bancada emitieran un comunicado pidiendo al Gobierno que suspenda el pago de la deuda a los acreedores de estos bonos, para que se puedan destinar los recursos necesarios al sector de la salud (duramente golpeado con esta crisis), y adquirir reactivos, insumos médicos y equipos de protección individual EPI.

El ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez pagó $324 millones del bono soberano para (según sus palabras recogidas en todos los medios) tener acceso de manera inmediata a financiamiento por $2.000 millones. Y según la información disponible del Banco Central, hasta el momento los Depósitos del Tesoro Nacional no han recibido ingresos sustanciales netos.

Otto, díganos sinceramente, ¿cuándo exactamente van a llegar los $2.000 millones de financiamiento que ofreció el ministro de Economía?

A Otto le han reprochado tomarse muchas fotos durante la crisis, “como si estuviera en campaña electoral”, “no es ético”, dicen sus críticos. Yo, particularmente no veo que aquello sea lo más relevante en este momento. Lo que realmente importa es el indicador de la gestión durante la emergencia, es decir, el número de muertes evitadas. Sobre eso, más adelante deberán rendir cuentas todas las autoridades.

Mientras tanto he dejado planteadas varias preguntas (no son las únicas de la ciudadanía), desde mi posición de ciudadano guayaquileño y preocupado por la difícil situación que atraviesa el país y Guayaquil en su año del bicentenario de la independencia.

Deseo éxito al vicepresidente, por supuesto, y que Dios ilumine sus decisiones.

elestado.net no tiene por qué compartir la totalidad del contenido de los artículos que se publican en su sección de opinión.