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¿A quién beneficia el fallecimiento del militar venezolano Rafael Acosta?

Rafael Acosta Arévalo era un militar venezolano retirado hace diez años. Fungió como Capitán de Corbeta. Desconocido hasta que ha saltado a la agenda mediática por haber fallecido durante su detención, por participar en un frustrado plan golpista que preparaba el asesinato del presidente Nicolás Maduro, y del presidente de la Asamblea Nacional Constituyente Diosdado Cabello.

Las pruebas que justificaron su detención las mostró el vicepresidente de comunicación y cultura, Jorge Rodríguez, en forma de vídeo en el que Rafael Acosta comenta los detalles del plan. Él se encargaría de tomar el parque de armas y la bóveda del Banco Central de Venezuela, para hacerse con los camiones blindados y fusiles con los que dirigirse al Palacio presidencial de Miraflores con el objetivo de asesinar a Nicolás Maduro.

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Apresado el pasado 26 de junio tras una investigación de catorce meses por parte de la inteligencia venezolana, Rafael Acosta murió tres días después, el 29 de julio, por razones que aún se desconocen. La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) ha publicado un comunicado en el que explican lo sucedido, ya que el fallecimiento se produjo bajo su custodia. Según la institución castrense, Rafael Acosta se desmayó al ser presentado ante el juez militar en Fuerte Tiuna (Caracas), tras lo cual fue trasladado de manera inmediata al Hospital Militar Dr. Vicente Salias. Allí llegó vivo pero los médicos no pudieron hacer nada para evitar su muerte.

Nada más enterarse, el presidente Nicolás Maduro pidió el inicio de una investigación exhaustiva para determinar los hechos. El motivo del interés del líder del ejecutivo venezolano es que Rafael Acosta ya no podrá declarar nada sobre el golpe de estado, ni los posibles vínculos con los impulsores, ni de dónde venía el dinero para llevar a cabo la operación, ni otras cuestiones que podrían ayudar a desvelar la trama golpista al completo.

Es por este motivo, que el fiscal venezolano, Tarek William Saab ya ha empezado a trabajar en el caso para esclarecer los hechos de una situación que conviene a la oposición liderada por Juan Guaidó, ya que los detalles que podrían salpicarla directamente, y también a sus aliados internacionales, han acompañado a la tumba al capitán de corbeta retirado.