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La ultraderecha colombiana cerca de vencer en las presidenciales

A falta de dos domingos para que se celebre en Colombia la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, la ultraderecha se ha vuelto a disparar en las encuestas. Iván Duque, un uribista que rechaza por la derecha el gobierno conservador de Juan Manuel Santos por considerarlo moderado, obtiene un insuperable 57,2% de los apoyos en el último estudio de Invamer.

Los colombianos están en un momento de pleno rechazo al Régimen de 1991, por lo que están siendo más proclives a apoyar posiciones rupturistas. Al principio de la campaña electoral esas posiciones las representaba Gustavo Petro, por lo que se ubicó en el primer lugar de casi todas las encuestas.

Tras pasar a segunda vuelta, el candidato de izquierda ha moderado su discurso con el objetivo de conquistar al centro político de Colombia, sin embargo las encuestas muestran que, a solo nueve días de que los votos sean depositados en las urnas, Gustavo Petro esté a unos casi insalvables 20 puntos de su contrincante.

Gustavo Petro, candidato de Colombia Humana, ha intentado variar esta tendencia retando a Iván Duque a un debate, un formato en el que el de izquierdas se desenvuelve a la perfección, mientras que el ultraderechista no cuenta ni con la cultura ni con la oratoria necesarias para enfrentarse a Petro.

Debido a ello, Iván Duque ha rechazado la propuesta, sabiendo que, pese a recibir críticas por ello, perdería más en el cara a cara con Gustavo Petro, quién se encuentra en una posición peliaguda, ya que si da marcha atrás al discurso moderado no solo perderá votantes de centroizquierda, sino que su credibilidad política quedará muy tocada por dar tantos bandazos ideológicos en un pequeño lapso de tiempo.

La tendencia favorable al uribista Duque parece asentada y no hay en el horizonte de Colombia ningún obstáculo que pueda revertir una tendencia favorable de 20 puntos porcentuales en nueve días. Gustavo Petro cuenta con un 37,3% de apoyo, lo que bien gestionado podría suponer su victoria en las siguientes elecciones. Dependerá de su actuación en la oposición, por primera vez en décadas lideradas por la izquierda, hasta ahora eterna comparsa de los liberales y los verdes.