El referéndum para elegir entre monarquía o república llega a la Autónoma de Barcelona
Las universidades de todo el Estado español, su estudiantado, profesorado y trabajadores, llevan trayendo estos meses los nuevos vientos de una vieja España, de aquella que se olvidó -o quisieron que olvidáramos-, de la república: La Tercera República española.
Durante largo tiempo han estado trabajando en urnas, papeletas, octavillas, carteles, consignas, asambleas, conferencias… En la democracia. El periódico digital ElEstado.Net ha tenido la fortuna de asistir a uno de esos momentos en los que, por las palabras que se dicen, o se dan a entender, puede oírse el rumor de un pueblo enterrado.
Ha sido en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), el lugar elegido para dar comienzo oficial a esta empresa, bajo el nombre de Plataforma del referéndum sobre la monarquía en la UAB, donde hemos podido escuchar a los representantes del movimiento local (Paula Bueno, Jordi Sorolla y Sergio Escalona), al público y a las preguntas y respuestas de cada uno, también a las propias.
Ayer, día 13 de marzo, se celebró la rueda de prensa para anunciar la jornada clave, día en el que se producirá el referéndum sobre la monarquía, y la lectura del manifiesto que le precede. A pesar de su naturaleza (local y no vinculante), esta serie de sucesos, más o menos coordinados y más o menos espontáneos, que llevan dándose en nuestras universidades, incluso con cierta resistencia, merecen atención y curiosidad. Pues a veces los vientos se convierten en tornados, y transforman el mundo que les rodea antes de perderse.
No vamos a negar ante el lector que no hemos hecho las preguntas que quisiéramos, pues el simbolismo del acto y la rueda de prensa no eran un espacio de debate. Sin embargo, sí hemos podido conocer ciertos detalles técnicos, como de qué forma se han enfrentado a la dualidad existente en Cataluña entorno a la república española y la república catalana, o su derecho a la autodeterminación.
Los compañeros, dirigentes locales por la democracia, han sabido encauzar debidamente la problemática; ya que el pueblo catalán no olvidará, ni debe hacerlo, su condición como nación oprimida. En las papeletas devendrán, tras las opciones “república” o “monarquía”, las cualidades que, en el caso de desear una república, ésta debiera llevar impresas en su genoma, ADN, Carta Magna, o razón de existir: la apertura de procesos constituyentes para su propia organización.
De igual forma, se han aclarado otros aspectos logísticos, como la producción de papeletas (12.500), y la cantidad de urnas (6). Así como la necesidad de voluntarios que actúen como propagandistas, cartelistas, apuntadores…
El referéndum “monarquía o república” será el próximo día 20 de marzo de 2019 en la Universidad Autónoma de Barcelona, todas las fuerzas locales-estudiantiles están convocadas a reforzar, defender y participar en la votación.
Pronunciamiento de los estudiantes, profesores y trabajadores de la UAB
En Castellano
El 29 de noviembre de 2018 empezó una gran ola democrática alrededor de muchas universidades españolas. Las compañeras de la UAM impulsaron el primer referéndum sobre la monarquía que después se repitió a lo largo de toda la geografía española y catalana donde han participado, hasta el momento, mas de 100.000 personas.
En concreto, dentro del territorio catalán las compañeras de L`UB, UPC y L´UPF ya han votado, demostrando que la población y, sobre todo las estudiantes, queremos decidirlo todo.
En el caso concreto de la UAB, diferentes estudiantes , profesores y trabajadores nos hemos organizado para sumarnos a la oleada democrática de referendos que se están organizando en diferentes universidades del Estado español para manifestar la voluntad popular en relación a la forma de estado.
Queremos seguir fomentando un derecho fundamental como la libertad de expresión desde la educación pública. Entendemos que la universidad ha de ser un espacio que esté al servicio de toda transformación social, promoviendo un espíritu crítico que fomente la convivencia, haciendo del campus un espacio más democrático.
Pretendemos poner en el centro de la agenda política un debate que está mas vivo que nunca en la actualidad.
Tenemos mucho que ganar, pensemos como pensemos, queremos el modelo que queramos y votemos lo que votemos.
En la organización de esta consulta participamos gente de múltiples sensibilidades y concepciones nacionales, hecho que condiciona el acuerdo, que nos hace enfocar la propuesta con la máxima amplitud de miras posible.
Entendiendo la especialidad del caso catalán, donde se hizo un referéndum el 1 de octubre, donde gran parte de la población catalana demostró su propósito de querer ejercer su derecho a decidir, proponemos este referéndum como una reafirmación del mismo, porque tal y como los acusados están diciendo día tras día en el juicio del procés: lo volveríamos hacer y lo volveremos hacer. Este referéndum es la evidencia de que tienen razón y dicen la verdad, porque la voluntad que tiene el pueblo de decidir nadie la puede parar.
El 1 y 3 de octubre marcaron un antes y un después en la historia de esta nación y en la historia de las diferentes naciones que conviven conjuntamente dentro de la península ibérica y, en medio de un juicio que será histórico por el desenlace que tenga y de unas elecciones generales seguidas de unas municipales, queda más que claro que es un debate que cabe enriquecer mucho más, y que el pueblo lo tiene que liderar y no se ha de supeditar frente a una institución medieval y machista como es la monarquía.
El 3 de octubre, uno de los pilares que sostenía el Régimen del 78 cayó: el rey Felipe VI dejó de ser un árbitro imparcial y simbólico en política. Se posicionó de forma abierta y eso tuvo consecuencias, avivando el conflicto y no dando una salida democrática al conflicto político que se vive en Cataluña.
Posicionándose a favor de la represión y no del diálogo y la democracia. Hace unos días dijo que la ley que ampara su inviolabilidad está por encima de la democracia, volviéndose a posicionar de manera abierta e intentando imponer los roles dictatoriales que son innatos a una institución como es la monarquía.
Durante la transición siempre se aceptó de facto la monarquía porque fue una transición dirigida y, hoy, comprobamos las consecuencias. El Estado que queramos lo tienen que decidir los ciudadanos en cada punto del territorio y no es democrático heredar una institución que fue impuesta por el franquismo.
Tenemos la voluntad de decidirlo todo, poniendo el acuerdo por encima de las discrepancias, poniendo la democracia en los centros universitarios, institución y actor de relevancia y uno de los principales protagonistas de las movilizaciones sociales, laborales y políticas que se han ido sucediendo a lo largo de la geografía mundial.
La preparación está siendo difícil, pero queremos hacer del 20 de marzo del 2019 un día histórico en esta universidad y no queremos que nadie se quede fuera de poder participar en los días que quedan y en el día de la votación.
Monárquicos españoles, republicanos independentistas catalanes, republicanos federales y confederales españoles y podemos seguir desglosando variedades: todo el mundo tiene que sentirse interpelado a decidirlo todo. Dada esta composición tan compleja de la sociedad catalana y reconociéndolos a todos como parte de la cuestión, enfocamos la segunda pregunta hacía los procesos constituyentes que, en caso de ganar la opción republicana, tendrían que abrirse en cada nación de la península ibérica si así el pueblo lo decidiera.
El progreso democrático se consigue ejerciéndolo siempre que se presenta la ocasión. Ninguna institución es incuestionable y toda fase política tiene un inicio, un desarrollo y un final. La historia es el mayor ejemplo.
En catalán
El 29 de novembre de 2018 va començar una gran onada democràtica arreu de moltes universitats espanyoles. Les companyes de la UAM van impulsar el primer referèndum sobre la monarquia que després es van repetir al llarg de tota la geografia espanyola i catalana on han participat, fins als moment, més de 100.000 persones.
En concret, dins del territori català, les companyes de l’UB, UPC i l’UPF ja han votat, demostrant que la població i, sobretot les estudiants, que volem decidir-ho tot.
En el cas concret de la UAB, diferents estudiants, professors i treballadors ens hem organitzat per tal de sumar-nos a l’onada democràtica de referèndums que s’estan organitzant a diferents universitats de l’Estat espanyol per manifestar la voluntat popular en relació a la forma d’Estat.
Volem seguir fomentant un dret fonamental com la llibertat d’expressió des de l’educació pública. Entenem que la universitat ha de ser un espai que estigui al servei de tota transformació social, promovent un esperit crític que fomenti la convivència, fent del campus un espai més democràtic.
Pretenem posar al centre de l’agenda política un debat que és més viu que mai en l’actualitat.
Tenim molt a guanyar, pensem com pensem, vulguem el model que vulguem i votem qui votem.
En l’organització d’aquesta consulta participem gent de múltiples sensibilitats i concepcions nacionals, fet que condiciona l’acord que hem pres en enfocar la proposta amb la màxima amplitud de mires possible.
Entenent l’especialitat del cas català, on es va fer un Referèndum l’1 d’octubre, on gran part de la població catalan va demostrar el seu propòsit de voler exercir el dret a decidir, proposem aquest Referèndum com una reafirmació del mateix, perquè tal i com els acusats estan dient dia rere dia en el Judici del Procés: ho tornaríem a fer i ho tornarem a fer. Aquest referèndum és l’evidència de que tenen raó i diuen la veritat, perquè la voluntat que té el poble de decidir ningú la pot aturar.
L’1 i el 3 d’octubre van marcar un abans i un després en la història d’aquesta nació i en la història de les diferents nacions que conviuen conjuntament dins la península Ibèrica i, en mig d’un judici que serà històric pel desenllaç que tingui i d’unes eleccions generals seguides d’unes municipals, queda més que clar que és un debat que cal enriquir encara més i que el poble ho ha de liderar i no s’ha de supeditar front una institució medieval i masclista com és la monarquia.
El 3 d’octubre, un dels pilars que sostenia el Règim del 78 va caure: el rei Felipe VI va deixar de ser un àrbitre imparcial i simbòlic en política. Es va posicionar de forma oberta i això va tenir conseqüències, avivant el conflicte i no donant una sortida democràtica al conflicte polític que es viu a Catalunya. Posicionant-se a favor de la repressió i no del diàleg i la democràcia. Fa uns dies va dir que la llei que empara la seva inviolabilitat està per sobre de la democràcia, tornant-se a posicionar de forma oberta i intentant imposar els rols dictatorials que són innats a una institució com és la monarquia.
Durant la transició sempre es va acceptar de facto la monarquia perquè va ser una transició dirigida i, avui, comprovem les conseqüències. L’Estat que vulguem l’han de decidir els ciutadans a cada punt del territori i no és democràtic heretar una institució que fou imposada pel franquisme.
Tenim la voluntat de decidir-ho tot, posant l’acord per sobre de les discrepàncies, posant la democràcia als centres universitaris, institució i actor de rellevància i un dels principals protagonistes de les mobilitzacions socials, laborals i polítiques que s’han succeït al llarg de la geografia mundial.
La preparació està sent difícil, però volem fer del 20 de març del 2019 un dia històric en aquesta universitat i no volem que ningú es quedi fora de poder participar en els dies que queden i en el dia de la votació.
Monàrquics espanyols, republicans independentistes catalans, republicans federals i confederals espanyols i podem seguir desglossant varietats: tothom s’ha de sentir interpel·lat a decidir-ho tot. Donat aquesta composició tan complexa de la societat catalana i reconeixent-los a tots com a part de la qüestió, enfoquem la segona pregunta cap als processos constituents que, en cas de guanyar l’opció republicana, haurien d’obrir-se en cada nació de la península ibèrica si així el poble ho decidís.
El progrés democràtic s’aconsegueix exercint-lo sempre que es presenta l’ocasió. Cap institució és inqüestionable i tota fase política té un inici, un desenvolupament i un final. La història és el major exemple.