Esta pasada noche se ha retransmitido por Televisión Española el primer debate electoral a cuatro entre los candidatos a presidente Pedro Sánchez, Pablo Casado, Pablo Iglesias y Albert Rivera.
Ha sido uno de los diferentes debates que se han programado en distintas cadenas de cara a las elecciones estatales del próximo domingo 28 de abril.
El debate moderado por el periodista Xabier Fortes ha empezado con una pequeña intervención inicial de cada uno de los candidatos. Tanto Sánchez como Casado y Rivera han empezado atacando a sus contrincantes de manera clara. Pablo Iglesias se ha desmarcado desde el principio mostrando una actitud mucho menos beligerante que el resto.
A continuación se han tratado cuatro grandes bloques temáticos:
- Política económica, fiscal y empleo.
- Política social, estado del bienestar, pensiones e igualdad.
- Política territorial.
- Regeneración democrática y pactos postelectorales.
Como era de esperar, el conflicto con Cataluña y los pactos postelectorales han sido los temas estrella. Albert Rivera ha tratado el tema de la unidad de España como lo más prioritario, y ha tendido la mano en diferentes ocasiones a Pablo Casado a la hora de pactar en contra de los “golpistas” como Gabriel Rufián, Arnaldo Otegi ysobretodo Quim Torra.
Incluso durante la mayor parte del debate ha tenido encima de su atril una fotografía de Pedro Sánchez con el President de la Generalitat. Pablo Casado también ha cargado contra los independentistas y contra Sánchez y el PSOE. Tanto el líder del PP como el de C’s han querido dejar claro que una victoria de Sánchez sería facilitar las cosas a los “golpistas”.
Pedro Sánchez por su parte también ha sido crítico con PP y C’s. No tanto quizás con Unidas Podemos, a quienes incluso ha querido dar las gracias en un momento del debate consciente que si el 28 de abril él es el más votado necesitará apoyo por parte del partido de Iglesias.
Por otro lado, a Sánchez le viene muy bien todo aquello que propone Unidas Podemos. Se ha dejado ver en el debate que el actual Presidente del gobierno se ha adjudicado diferentes medidas que en realidad fueron propuestas por la coalición liderada por Pablo Iglesias.
Durante todo el debate se ha podido ver la lucha de unos para ver quien se situaba más a la derecha y de otros a la izquierda. Aunque en algunas ocasiones tanto PSOE como C’s parecía que se disputaban el lugar de centro, no sabiendo muy bien hacia donde tirar cuando se hablaban de según qué temas, como por ejemplo defendiendo las familias LGTBI.
Hemos visto tanto a Pedro Sánchez como a Rivera un poco perdidos intentando contentar a unos y a otros. Pablo Iglesias sin embargo, ha sido quién ha mantenido sus ideas claras y se ha situado claramente a la izquierda de un Pedro Sánchez perdido que ha querido sonar como un revolucionario del 15-M sin llegar a conseguirlo.
El líder de Unidas Podemos ha sido sincero y realista en todo momento y ha sido el único que se ha centrado en medidas concretas como por ejemplo la reducción del IVA en algunos productos de primera necesidad o la obligación de los bancos de pagar el impuesto de sociedades. El resto de los candidatos han presentado medidas más bien electoralistas, algo que se ha dejado notar sobretodo cuando se ha hablado de feminismo.
Todos los candidatos han defendido propuestas feministas cuya puesta en marcha han obstaculizado continuamente en la realidad. Otro clásico como la creación de empleo no podía faltar. También se ha hablado mucho acerca de los autónomos aunque solo Pablo Iglesias ha puesto encima de la mesa la gran problemática sobre los falsos autónomos.
En general, hemos visto un debate que no ha llegado a sorprender ya que todos conocíamos las estrategias de cada candidato. El discurso final ha sido previsible y se ha mantenido el tono de todo el debate. Casado y Rivera usando su discurso del odio, atacando a PSOE y creando el falso relato del peligro de que se rompa España. Sin duda disputándose el primer puesto de la derecha e intentando convencer a indecisos y posibles votantes de VOX.
La estrategia de Pedro Sánchez ha sido sin lugar a dudas convencer a los votantes de Unidas Podemos, intentando parecer más progresista que Pablo Iglesias y dejando caer el fantasma de la derecha para provocar el voto útil.
Si ha habido un ganador ha sido Pablo Iglesias. Como hemos comentado anteriormente, ha formulado propuestas realistas acerca de los problemas reales de la ciudadanía. Ha sido el único que no ha caído en bajezas ni provocaciones de sus oponentes, manteniéndose neutral y sabiendo dejar en evidencia a los demás citando artículos de la Constitución Española de la que tanto hablan.
Iglesias se ha mantenido firme, fuerte y con mucha confianza. El siguiente y último debate a cuatro es el de Atresmedia en unas horas. Veremos si se produce algún cambio que pueda ser decisivo para el resultado del domingo.