Joaquín Agrasot: Exposición del Museo de bellas Artes de Castellón

Joaquín Agrasot fue un pintor español, encuadrado en el género realista y costumbrista.

Por Pablo Álvarez Actualizado por última vez Sep 23, 2021

Este es el título de la memorable exposición con que nos ha deleitado el Museo de bellas Artes de Castellón (que por si solo merece un par de artículos que desde ahora les prometo).

Y resalta lo de internacional, porque para la Enciclopedia Británica, a comienzos del XX, no existía pintores cercanos mas importantes que sobre todo Fortuny (lastima su muerte treintañera, si no, estaríamos hablando de uno de los grandes), y precisamente, Agrasot. A cierta distancia, y con alguna esperanza, los eruditos elaboradores del mamotreto señalaban a los jóvenes innovadores Sorolla y Zuloaga.

El devenir posterior confirmó sobre todo a Sorolla (nadie ha pintado sus blancos igual, ¡hasta en la piel mojada!), y relego al olvido del gran público a este magnífico pintor, que fue amigo de Fortuny, quizás porque en el siglo loco que entonces empezaba y en la que todo se cuestionaba (las ideas políticas, el orden social, los derechos de los trabajadores, la liberación de la mujer, el psicoanálisis, la Relatividad), y todo cambiaba (la electricidad, la radio, la aviación, el automóvil), como también en el mundo del arte (Impresionismo, Expresionismo, Cubismo, las distintas vanguardias), a Joaquin Agrasot, tal vez le faltó precisamente eso, un poco mas de originalidad, un atisbo de estilo que le hiciese ser un poco diferente.

En cualquier caso, un grandísimo pintor, que aunque encuadrado en las corrientes imperantes en la época, costumbristas y regionalistas, su vibrante paleta, el empleo de la luz y una pincelada muy particular, le otorgan una merecida relevancia en el centenario de su defunción, como podéis ver:

Autorretratos

El artista se retrata en diversos momentos de su vida, creo que recoge perfectamente su arrogancia juvenil, su firmeza madura, su tremenda seguridad ya de triunfador, y la tranquilidad y la paz que emana de su última figura.

Mirad ahora esta pequeña maravilla: