El trasfondo comercial de la migración venezolana: (parte I)
Análisis, datos y testimonios de la migración venezolana, un fenómeno que le llena los bolsillos a grandes mafias bajo la aprobación de Washington.
La migración venezolana se ha convertido en una industria que, literalmente, genera miles de millones de dólares a sus beneficiarios.
Solo el Plan Regional de Respuesta para los Refugiados y Migrantes Venezolanos, constituido en 2019, ha recolectado 4.290 millones de dólares entre 2020 y 2021; Washington, a través de la USAID y el Departamento de Estado, ha destinado más de 1400 millones de dólares, entre 2017 y 2021, para financiar operaciones contra Venezuela.
El dinero pasa por grupos políticos, ONG´s, agencias multilaterales, contratistas, extremistas, narcotraficantes, paramilitares, instituciones, mafias fronterizas, agentes migratorios, líneas aéreas, moteles, taxistas, gobernantes, alcabalas, bancos, medios de comunicación, cárceles, agentes de seguridad, aeropuertos, carteles de la droga, en definitiva, una lucrativa industria.
la trampa del coyote
“Todos salen beneficiados”, dijo Luis –nombre ficticio-, un venezolano que entrevistamos tras cruzar la frontera méxico-estadounidense en abril de este año.
Luis pasó por Matamoros, una ciudad controlada por carteles de la droga ubicada al noreste del estado de Tamaulipas. 1.200 dólares pagó para ser traspasado a territorio estadounidense.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos ha reportado que, entre octubre de 2020 y junio de 2021, han capturado a 26 mil 861 venezolanos en puntos fronterizos. La cifra es casi 6 veces superior, a la cantidad de venezolanos atrapados entre octubre 2019 y junio 2020.
En términos porcentuales, precisamos un incremento de 600% entre el año fiscal 2020 y el 2021. Luis fue uno de esos apresados. Su historia nos mostrará, por dentro, a la industria de la migración venezolana.
Millonaria Industria
El comercio con seres humanos es una de las industrias criminales más poderosas del planeta.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) estima que esta industria genera, globalmente, más de Diez mil millones de dólares anuales. Tomando en cuenta solo los migrantes que van de América Latina y el Caribe hacia los Estados Unidos, la cifra se ubica entre seis mil quinientos y siete mil millones de dólares por año, una cantidad equiparable con las actuales reservas internacionales de Costa Rica según datos del Banco Mundial.
En ese tablero de operaciones, ahora ingresa una pieza doblemente valiosa: La migración venezolana. Entre enero y junio de este año, aumentó el número de venezolanos detenidos tratando de ingresar ilegalmente a territorio estadounidense.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos contabilizó 459 detenidos en enero y 1082 apresados en febrero. Este fenómeno continuó en marzo (con 2740 detenidos), abril (6172), mayo (7663) y junio (7728).
La migración venezolana es doblemente valiosa porque genera dos tipos de ganancia, una política y otra económica. Políticamente, EEUU gana porque utiliza esa situación para sustentar su relato del Estado forajido/fallido que –según ellos- gobierna Caracas.
Económicamente, el migrante venezolano es necesario porque genera millones de dólares a una industria cada vez más poderosa que, al igual que la droga, tiene una ruta fijada por Washington.
Luis, el venezolano que fue captado por estos grupos criminales, confirmó el privilegio de tener esa nacionalidad. “Los venezolanos y los cubanos”.
Óptimo sistema de corrupción
El sistema de captación utilizado por estas mafias es casi perfecto. A Luis lo captaron en Valera. Tras vender todas sus pertenencias, reunió los 4 mil dólares que necesitó para su viaje.
La ruta fue Caracas-Cancún, teniendo que pagar una reserva de 200 dólares en un hotel que nunca utilizó al llegar a territorio mexicano. Migración México le dio ingreso. “La bajada vale 700 dólares”, dijo. La bajada es el pago que debe hacer, para ingresar a México sin ser detenido por migración.
En la Península de Yucatán se ha consolidado una mafia que capta a los migrantes, para pasarlos a través de Matamoros y otros puntos fronterizos como Ciudad Acuña. “Muchos venezolanos se vinieron a México y ahora viven de eso (de traficar seres humanos)”, explicó el informante.
Se trata de una industria que tiene el aval político de Washington y de la gran prensa para funcionar. Necesitan venezolanos cruzando los puestos fronterizos para atacar, simbólicamente, al gobierno de Nicolás Maduro.
La clandestinidad de este negocio evita que se pueda tener certeza sobre los números que deja el tráfico de seres humanos. “Son muchos”, dijo Luis.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos divulgó en junio que, durante el año fiscal 2021, han capturado en los puestos fronterizos a más de 1.2 millones de personas. La cifra duplica el número de capturados en el año fiscal 2020, lo que evidencia la subida de casos y, por ende, el aumento de la ganancia.
No obstante, en contraparte a lo que divulga la prensa, el número de venezolanos atrapados en frontera fue de 26.861, lo que representa solo un 2% del número de casos totales, según cifras oficiales emitidas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU.
Una peligrosa decisión
El sistema de las mafias que trafican venezolanos hacia EEUU es tan sólido, que los coyotes tienen la posibilidad de indicarle al migrante el día, la hora y el vuelo que tiene que tomar para que un agente de migración lo espere en el aeropuerto en Cancún.
Un poco más de mil dólares es lo que pagan para obtener “el dato” y tener vía libre en el aeropuerto mexicano. Pagando esa cantidad, Luis tuvo garantizado un trato especial en la ventanilla de migración. “Todo eso lo coordina el coyote”, dijo.
Es importante aclarar que la solidez del sistema no es sinónimo de seguridad. En Tamaulipas, región por la que trafican a venezolanos, actualmente están desaparecidas más de 11 mil personas. En torno a este flagelo, se han conformados redes de búsquedas como la Unión de Colectivos de Madres Buscadoras de Tamaulipas.
Desde 2017 a la fecha, de acuerdo con la Comisión Nacional de Búsqueda, más de 500 kilogramos de restos humanos calcinados han sido hallados, solamente, en La Bartolina, un centro de exterminio ubicado a 23 kilómetros al Este de Matamoros, lugar que recorrió Luis para pasar sobre una tripa inflada, rumbo a EEUU. “No vi nada de eso”, expresó Luis. “Lo que sí te puedo decir es que me fotografiaron y me tomaron vídeos, que supongo eran para dar testimonio a sus jefes del trabajo realizado por los coyotes”, agregó el venezolano de 30 años.
A esos vídeos tuvimos acceso. Allí vimos que Luis no estaba solo. Una madre, de aproximadamente 50 años, le habló a su hija en Puerto Ordaz. Un joven hizo lo propio a su familia en Caracas. Luis le habló a sus familiares en Valera, luego de dejar botadas sus maletas y cambiarse la ropa mojada por una seca.
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