Se evidencia la división de la oposición venezolana con los rumores de diálogo con el gobierno
Nueva explosión interna en la oposición venezolana. Los rumores de una posible reunión entre gobierno y oposición en Noruega para comenzar un proceso de diálogo, han lanzado a los diferentes sectores de la oposición a una lucha encarnizada en la que las acusaciones de traición y de fracaso son punta de lanza.
Los sectores de la oposición más radicales, cercanos al fascismo de Jair Bolsonaro y Donald Trump, son los que a día de hoy llevan la iniciativa de la derecha. Juan Guaidó y Leopoldo López han llevado adelante las guarimbas y un golpe de estado que ha incluido una fallida sublevación militar, a la vez que llaman a la guerra civil y a la invasión militar estadounidense.
>>La muerte política de la oposición venezolana<<
Precisamente, que la ultraderecha venezolana sea la que lleve la voz cantante, impidió que el anterior diálogo entre las dos partes cristalizara a unos minutos de firmar los acuerdos alcanzados, en base a una llamada del gobierno norteamericano que evitó que Julio Borges cogiera el bolígrafo que ya estaba preparado sobre los documentos acordados.
Ahora, la parte de la oposición más moderada, que impuso su peso político en la Mesa de Unidad Democrática desde 2004 hasta 2014, una década en que la iniciativa golpista suponía un problema menor, ha decidido que es la hora de retomar la senda democrática para conquistar el poder mediante métodos constitucionales.
>>¿Por qué Venezuela no detuvo a Juan Guaidó ni a Leopoldo López?<<
A causa de eso, el Segundo Vicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Stalin González, participa en este diálogo por parte de la oposición junto al exdiputado Gerardo Blyde, y al exministro Fernando Martínez Mottola. Por parte del gobierno acuden Jorge Rodríguez (ministro de Comunicación) y Héctor Rodríguez (gobernador del estado Miranda).
No han trascendido los temas que se incluyen en la agenda política del diálogo, pero a juzgar por la reacción del sector de la oposición que sigue apostando por la senda de la violencia golpista y la intervención extranjera, y teniendo en cuenta el anterior diálogo, el fin de las sanciones, la recuperación de Citgo y los fondos económicos embargados y un adelanto electoral, serán cuestiones que serán tratadas con total seguridad.