El regreso del capitalismo en fase neoliberal a Ecuador, ha comenzado a expresarse en un deterioro material, que está impactando en la vida cotidiana de cada vez más sectores de la población del país suramericano. Si el año pasado se conoció que la pobreza no solo no había dejado de disminuir para mantenerse estable, sino que por primera vez desde 2007 empezaba a subir, ahora Lenín Moreno no es capaz de contener los recortes.
El actual presidente tardó apenas unos meses en romper la bajada constante de la pobreza en Ecuador, a causa de su apuesta por el regreso de un sistema económico que perjudicó a la mayoría de los ecuatorianos décadas atrás. Debido a un mal manejo del Estado, ahora las cuentas públicas no pueden cuadrar sin comenzar a hacer recortes, que por lo visto se centran en la educación pública y en la sanidad. Ya que ni que el robo de la banca a la población mediante la actuación de GEA, ni el dinero que altos cargos del gobierno de Lenín Moreno tienen en paraísos fiscales han sido objeto de persecución fiscal por parte de las autoridades públicas.
El presidente de Ecuador ha dado el visto bueno a un recorte del 10% (375 millones de dólares) del presupuesto de la educación, aseverando que la merma económica no supondrá que el derecho se vea afectado, ya que seguirá siendo gratuito, el problema según los estudiantes y los profesores es que la calidad empeorará. No solo la estrictamente adscrita a la educación (más alumnos por aula, menos y peor material escolar), sino también la referida al aspecto laboral de los profesores y otros profesionales que desempeñan sus funciones en los colegios y universidades de Ecuador.
Frente a este recorte, que ha venido acompañado de otro a la sanidad (194 millones de dólares menos), los estudiantes universitarios de Ecuador han organizado una manifestación para este mismo lunes, a la que ha precedido un incendio de Twitter con el hashtag #MoreNOteMetasConLaU. El calendario de movilizaciones continuará con los maestros y profesores, que ya han comenzado a organizar acciones para rechazar el nuevo ataque de Lenín Moreno al legado de Rafael Correa, esta vez perpetrado en dos de los derechos que más importancia tuvieron durante la Revolución Ciudadana, el acceso gratuito a una educación y a una sanidad de calidad.