Nicaragua posee uno de los principales bosques húmedos de Centroamérica conocido como Indio Maíz. El 3 de abril de 2018 se produjo una quema indiscriminada de esta importante reserva natural, siendo el escenario perfecto para perpetuar un intento de golpe de estado al gobierno constitucional de ese país.
A raíz de esto, se da inicio a las “movilizaciones ambientales” por parte de la derecha dirigidas por el Movimiento Renovador Sandinista (MRS), manifestaciones disfrazadas puesto que se generaron un sinnúmero de fake news para desprestigiar el trabajo que hacían las instituciones gubernamentales. Manipularon a los sectores más vulnerables de la población.
>>Nicaragua aumenta los impuestos a los grandes empresarios<<
El domingo 18 de abril de 2018 estos grupos fascistas se alimentan de las movilizaciones en contra de las reformas al Instituto Nicaragüense del Seguro Social (INSS), las cuales se tornaron violentas y agresivas causando llevan a cabo la destrucción de propiedades públicas y privadas, agresiones físicas y emocionales a los ciudadanos que rechazaban estos tipos de actos violentos, interrumpiendo el trabajo constitucional de la Policía Nacional. A causa de esto las reformas al INSS fueron derogadas.
El 16 de Mayo de 2018 se instala la mesa del Diálogo Nacional con la partición de la oposición y la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN). La delegación del Gobierno buscaría una solución para contrarestar la crisis económica y social, la CEN como mediadores y testigos imponían condiciones al gobierno, más que una mesa de diálogo era una mesa de negociación para poner en marcha el intento de golpe suave.
Nicaragua se encontraba secuestrada, los tranques que levantó la oposición fueron sitios de torturas, violaciones y quemas a personas, actos terroristas nunca antes visto en el país. La CEN, OEA, ONU entre otros “defensores de Derechos Humanos” callaban ante estos actos criminales, porque para estas organizaciones era la búsqueda de la “democratización” del país.
>>Nicaragua se moviliza en favor de la paz y la justicia<<
Ante el sinnúmero de abusos cometidos por la derecha golpista, la población nicaragüense comenzó a pronunciarse y a movilizarse en todo el territorio nacional, pidiendo por la paz y justicia para las víctimas del terrorismo. Las movilizaciones pacíficas las hacía el sandinismo.
La Policía Nacional que se había mantenido acuartelada a petición de la CEN, tuvo que regresar a las calles del país para ejercer su labor constitucional, puesto que se habían desatado olas de violencia por parte de la oposición y delincuentes comunes. Desmontando los tranques fue como se logró recuperar la paz.
Actualmente la oposición está fragmentada en Nicaragua. La mayor facción está dirigida por la autodenominada Alianza Cívica y Unidad Azul y Blanco (UNAB) que son grupos de serviles imperialistas han quedado reducidos a unos cuantos seguidores autollamados pacifistas. Se movilizan en algunas calles de la capital (Managua) haciendo “piquetes express” provocando rechazo en la población.
A pocos días de cumplirse un año del intento fallido de golpe de estado al Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional (FSLN) resultando 197 víctimas fallecidas y a pesar de la crisis emocional que las familias aún no superan, Nicaragua sigue avanzando en proyectos económicos, sociales e infraestructura vial en las zonas más importantes del país.
>>Diccionario Político: Daniel Ortega<<
Los programas impulsados por el gobierno en beneficio a los ciudadanos no se detienen, el país sigue en total tranquilidad y la petición de la mayoría de la población nicaragüense es la paz, y seguir contribuyendo al desarrollo creciente de la nación centroamericana.