Campo de Gibraltar I: La conquista franquista
El Estrecho de Gibraltar y la Bahía de Algeciras fueron, desde el comienzo del levantamiento militar, un punto clave para las fuerzas sublevadas. Con buena parte de sus fuerzas concentradas en el norte de África, el paso del estrecho era fundamental para desplegar sus fuerzas por la península y atacar Madrid.
Desde los fenicios hasta Tarik, el paso del Gibraltar había sido recurrentemente una necesidad para muchos pueblos en su acceso al territorio peninsular. Además, el Mediterráneo no es en vano un enclave estratégico básico desde la antigüedad, como bien sabían los emperadores romanos.
Con los refuerzos y otro gran contingente basado en las Islas Baleares, el control de toda la costa les daba un único frente, sólido y estable, para poder avanzar desde el interior.
Una parte importante de su artillería estaba en barcos y aviones, y necesitaban puertos para desplegar a sus aliados italianos y alemanes, que no podían acceder por Francia. Sin puertos en el Mediterráneo, la campaña era prácticamente imposible.
No obstante, la mayor parte de la Marina se declara opuesta al levantamiento, y Franco no consigue puertos afines para desembarcar sus tropas por el estrecho. Las fuerzas navales del gobierno legítimo cierran el estrecho con buena parte de sus fuerzas el mismo 17 de julio, conocedoras de su valor estratégico en la situación de rebelión militar. Se requiere entonces el uso de barcos y aviones para tomar las plazas necesarias.
El mismo 18 de julio de 1936, comienza la ofensiva en el estrecho, saliendo el buque Dato, sublevado de Ceuta para apresar al España V, republicano. Al mismo tiempo, la motonave Ciudad de Algeciras y el destructor Churruca salen del mismo puerto con destino a Cádiz.
Los hidroaviones resultaron especialmente prácticos, tanto para desembarcar tropas a falta de un puerto conquistado, como para bombardear barcos republicanos.
Al día siguiente comienza el desembarco en Algeciras. Junto con ella, San Fernando, San Roque y la Línea de la Concepción son las primeras poblaciones atacadas. San Fernando se trataba de un punto clave; al ser atacada con éxito se consigue una base naval, más que un simple puerto para desembarco.
Entretanto, para la eventualidad de que fallase la conquista de plazas de costa, y para cubrir rápidamente la parte sur de Andalucía en caso de éxito, el día 20 se toma el aeródromo militar de Tablada (Sevilla). La elección tampoco es casual, pues las fuerzas republicanas lo quisieron usar para bombardear las plazas militares en Marruecos durante el alzamiento. Sin embargo, y debido al sabotaje de elementos afines al levantamiento, solo un bombardero pudo despegar y bombardear Tetuán.
Gibraltar se mantuvo fiel al mandato de no intervención dictado por su gobierno insular en Reino Unido. No solo no facilitó el cierre del estrecho. Tampoco aportó ningún tipo de ayuda al bando republicano, ni siquiera inteligencia, sistemas de comunicaciones o combustible.
Este baluarte tenía unas capacidades (debido a la propia conveniencia de autodefensa) para ser clave en el control del estrecho. Pero esto no fue así: no solo tomaron las medidas mencionadas anteriormente; algunas tesis de analistas historiográficos indican que los informes del gobernador de esta ciudad en los primeros días pudieron influenciar la supuesta neutralidad.
Una vez tomada la parte occidental, con las acciones de Queipo de Llano, el resto de Andalucía se encontraba atrapada entre ésta y las zonas conquistadas por el Levante, asimismo básicas para el despliegue de las fuerzas apostadas en el Mediterráneo.
>>Gonzalo Queipo de Llano, el general de la radio<<
La historiografía franquista ha hecho creer que en esta zona no pasó prácticamente nada, y que la rendición fue prácticamente completa e instantánea. Pero no fue así, como se sabe ya. Incluso hasta mediados de agosto continuaron los bombardeos de aviación y flota. Málaga además intentó recuperar Algeciras, pero le resultó imposible.
A partir de este punto, comienza la represión…