El día ha llegado. Hoy se celebra el recurso de casación del vicepresidente constitucional de Ecuador Jorge Glas. Esto es un recurso que se usa de manera extraordinaria para anular una sentencia. La justicia de Ecuador decidirá hoy sobre si consiente que el camino hacia la ausencia de garantías (régimen autoritario) iniciado por Lenín Moreno siga avanzando, o si por el contrario, decide hacer honor a su nombre y poner en libertad al hombre que más se lo merece actualmente en el país sudamericano.
Las apruebas aportadas en exclusiva por ElEstado.Net el pasado sábado han servido para sacudir a la sociedad ecuatoriana. Lo que publicamos rompió el anterior escenario político, quebró la batalla de la hegemonía cultural, terminó con las máscaras mediáticas de la oligarquía de Ecuador. Hemos creado un nuevo escenario.
En la tarima, ahora, aparece Jorge Glas, para todos los sectores de Ecuador, como un hombre que debe ser libre. Los chats entre Antonio Alcívar y Francisco Beltrán no dan lugar a dudas. Las imágenes del dinero de trama de corrupción tampoco. Los tickets de Western Union dan credibilidad al relato. Las imágenes con miembros de la familia Bucaram sustentan nuestras acusiones en base a las pruebas presentadas: Jorge Glas está en la cárcel víctima de una farsa orquestada por la oligarquía ecuatoriana, y apoyada por el gobierno de Lenín Moreno.
>>ElEstado.Net revela las pruebas que revelan que el Caso Glas es un montaje<<
Hemos conseguido demostrar la inocencia de Jorge Glas, poniendo a la justicia de Ecuador entre la espada y la pared, presionando al Gobierno de Ecuador hasta que ha alcanzado una posición en la que haga lo que haga va a perder. La lógica procesal señala que, en base a las pruebas dadas a conocer por ElEstado.Net, Jorge Glas debe ser liberado de manera inmediata y sin condiciones.
Si esto no sucediera, en un primer momento, la credibilidad de la justicia ecuatoriana quedaría destruida y la separación de poderes que obliga la Contitución de Montecristi anulada, ya que el poder ejecutivo la estaría cooptando. Por el lado del gobierno, sus tics dictatoriales pasarían de ser puntuales a ser la base sistémica de Ecuador, en tanto mantiene preso mediante un golpe de estado a su vicepresidente constitucional, sabiendo ya toda la sociedad que lo está por motivos políticos.
Un escenario que invalidaría desde hoy mismo las opciones políticas de Lasso y Nebot porque, por distancia que puedan marcar a partir de ahora, se les reconocerá, no como aliados de Lenín Moreno, sino como sostenes del sistema que mantiene a Jorge Glas en la cárcel, con todo lo que eso implica.
Antonio Alcívar robó y manipuló pruebas. Francisco Beltrán las usó. La familia Bucaram pagó por ello. El gobierno de Lenín Moreno lo permite.