El ministro de Trabajo, Andrés Madero, nos dio a conocer sobre el “primer paquete de reformas laborales” sobresaliendo la “contratación especial para emprendimientos”. Mencionó tres temas que serán parte del paquete de reformas laborales: La contratación especial para emprendimientos, eliminación del recargo del 35% en contratos eventuales, y la distribución de la jornada laboral de cuarenta horas en distintos días.
Richard Gómez, delegado de la Central Unitaria de Trabajadores, aseveró que la “contratación para emprendimientos” se aplicará únicamente para los nuevos negocios, es decir que si el “emprendimiento (negocio) no prospera y tiene que cerrar“. El empresario no tendrá que pagar indemnización por despido sino únicamente por el “desahucio”, se encuentra estipulado en el Art.184 del Código de Trabajo, y manifiesta: “Es el aviso en el que se notifica a una persona por parte del empleador, que una persona deja su trabajo y se lo debe hacer saber dentro del plazo de veinticuatro horas”.
Dijo el ministro que, en lo referente a los “contratos eventuales”… ¡se eliminaría el recargo que se paga actualmente para que, según él, aumente este tipo de contrataciones! Rodrigo Gómez de la Torre, representante de los empresarios propone que las empresas, indistintamente sea cual fuere ésta, contratarán personal para trabajar las cuarenta horas. ¿Pero cómo se podrán cumplir, según Gómez De La Torre, estas cuarenta horas semanales? Ya no tendrán que ser distribuidas en cinco días, sino que si lo prefieren pueden éstas ser trabajadas tan solo en tres días. Es decir, prolongando jornada de hasta doce horas diarias, burlando así el pago de horas extras o suplementarias.
>¿Dónde está la trampa en las reformas laborales del Ecuador?<<
Si bien es cierto que ante la toma de medidas como la de TEMAS LABORALES, todos sabemos que estas se encuentran amparadas en la Constitución y en el Código de Trabajo. Pero tal parece que se está haciendo costumbre transgredir las mismas y resuelven a su antojo sin medir siquiera las consecuencias que afectarán directamente al “trabajador y favorecerá a los empresarios empleadores”.
¿Por qué? Explico: Al aumentar la jornada de trabajo diaria a doce horas, esto significaría que un trabajador que vive en Guayaquil y tenga que movilizarse a Durán, tendrá que salir de su casa a las 6:30 para poder llegar a su destino a las 8:00. Y de ahí ya no saldría a las 16:00, sino que saldría a las 20:00 sin remuneración de horas extras, de ahí que sumar hora y media de regreso, sería a las 21:30.
¿Eso es justo? Favorecer a los empresarios y no se conduelen en lo más mínimo de los trabajadores. ¡NO! No es justo, porque se están vulnerando sus derechos y el Estado tiene el deber y la obligación de protegerlos. Nuestra protesta enérgica ante estas medidas antipopulares de “precarización laboral” y entreguismo e imposición ante el FMI, que amenazan la economía de los hogares ecuatorianos. Porque de sus trabajos dependen familias enteras, y por ende, no son más que retrocesos en materia de derechos laborales.
Que indignación saber que los trabajadores ya no tienen estabilidad, ni garantías y están en indefensión. Todo porque Lenín Moreno les dio potestad a los empresarios y a la élite cuántica con su nuevo estudio de cambio laboral, donde ¡los despedirán con cualquier argucia, de hecho lo hacen hoy por hoy en plena época de fin de año, con el despido masivo de miles empleados públicos, quienes quedan en la calle y sus familias sin ningún sustento, desamparadas y en indefensión!