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Chavismo, utopías que recorren el sendero de la Venezuela posible

Entrevista exclusiva a Adán Chávez Frías para elestado.net

En 1992, el apelativo Chávez quedó sembrado en la memoria venezolana con el llamado a rendición del Comandante de la frustrada rebelión contra el entonces Presidente socialdemócrata Carlos Andrés Pérez.

El “Por ahora no se lograron los objetivos” se convirtió en un lema contentivo de palabras de alta carga simbólica que aún resuenan como signo vigoroso y programático en el imaginario de la Venezuela profunda. Desde el instante en que Hugo Chávez asumió la responsabilidad de aquel movimiento se convirtió en el símbolo de las luchas por la dignidad del pueblo venezolano y años más tarde, en un referente incuestionable de las luchas de la izquierda en Latinoamérica y el mundo.

Casi dos décadas después, el cuartel desde donde dirigió aquella rebelión, recibió los restos mortales de Hugo Rafael, y fue allí, junto al féretro de su hermano, donde Adán, el mayor de los hijos de Elena Frías de Chávez, proclamó a viva voz la inmensa responsabilidad de hacer todo cuanto fuera posible para hacer irreversible la Revolución Bolivariana.

Lo tomé Hugo, aquí voy con tu morral”, es la promesa que 8 años después retumba en el imaginario colectivo como recordatorio de que el chavismo fue y sigue siendo capaz de atravesar barreras espacio temporales con un impacto que la cercanía no le ha permitido a la historia venezolana descifrar por completo.

El morral, no es otra cosa que el receptáculo de la esperanza del pueblo venezolano, una mochila cargada de aspiraciones de libertad y soberanía que aún yacen allí, y que iluminan la asombrosa resistencia de un país que sufre una guerra ejecutada desde Norteamérica en su afán por controlar el hemisferio sur.

Adán Coromoto Chávez Frías es profesor universitario de la Cátedra de Física de la Universidad de Los Andes, ULA, nació en La Sabaneta de Barinas el 11 de abril de 1953. Ha ocupado diversos cargos ministeriales y ha sido miembro de la Asamblea Nacional Constituyente. Actualmente ejerce el rol de Embajador de Venezuela en Cuba y es Presidente del Instituto de Altos Estudios “Comandante Eterno Hugo Chávez Frías “, siendo antes gobernador del Estado Barinas.

Militó en el Movimiento de Izquierda Revolucionaria, MIR, y en el Partido de la Revolución Venezolana PRV, años 70, e influyó en la relación del Presidente Chávez con el universo de la izquierda de entonces, así como el historiador marxista J.E. Ruiz-Guevara, barines y fundador del PCV siendo uno de los destacados mentores ideológicos, junto a sus hijos Wladimir y Federico Ruiz Tirado lo condujeron al encuentro con el filósofo y dirigente político Alfredo Maneiro.

¿Cuánto carga hoy día el Morral que dejara con su desaparición física su hermano Hugo Chávez?

La continuidad de la obra política y social del Comandante Hugo Chávez, tiene hoy día más vigencia que nunca, más importancia y trascendencia, y sin temor a equivocarme, mayor justificación.

La gran fortaleza de la Revolución Bolivariana radica en el Pueblo, y en su lealtad al pensamiento, al legado de nuestro Comandante Eterno, tras cuya partida física se consolidó todo un movimiento que trasciende las fronteras patrias y va creciendo en cada región del mundo. Ese movimiento no es otra cosa que la continuación de su lucha.

Si hay que responder entonces en pocas líneas, qué significa Chávez para nuestro Pueblo, decimos: un sentimiento, una pasión, un torrente de amor infinito; pero también, nuestro Pueblo mayoritariamente asume que Chávez es un proyecto de libertad y soberanía. Adán Chávez.

Todo ese cúmulo de su pensamiento, de sus ideas, proyectos, enseñanzas, de su ejemplo como revolucionario universal, de sus batallas, ha sido recogido por el Pueblo, para continuar nuestra construcción socialista y seguir haciendo de Venezuela una Patria digna, soberana e independiente. Ese es el verdadero significado del Morral de Chávez, que va cargado de sueños y esperanzas que van haciéndose realidad, y que, si bien desde las emociones y los sentimientos, simbólicamente yo asumí en el momento de su vuelo, realmente hay que decir que es el Pueblo, o los Pueblos, quienes han hecho suyo ese legado, ese morral cargado de utopías, para seguir transitando el sendero de las transformaciones necesarias, con la mirada puesta en el porvenir, en un mundo más humano.

Por ejemplo, el Plan de la Patria, gran proyecto transformador para convertir a Venezuela en una Nación plenamente independiente y próspera. Las alianzas entre los Pueblos latinoamericanos y caribeños, como políticas de integración y cooperación. Las Misiones y Grandes Misiones, como estrategias para garantizar los derechos fundamentales de la población. Pero principalmente la conciencia política de nuestro Pueblo, que solo un líder de la dimensión humana y amorosa de Chávez pudo hacer posible: entregar a cada hombre y mujer de estas tierras, las luces del entendimiento, después de tantos años sumidos en las tinieblas de la ignorancia. Todos esos elementos están contenidos, hoy, con mayor vigencia en virtud de las complejidades que debemos superar, en ese legado, en ese morral, que cada habitante de esta Patria lleva y dignifica para continuar la batalla

En breves palabras, ¿cuánto significa para el Pueblo venezolano Hugo Chávez?

La respuesta a esa pregunta hay que buscarla en las calles, los barrios, las escuelas, el campo, las fábricas, las universidades, los Centros de Diagnóstico Integral, los hospitales. Es decir, en cada mujer, hombre, niña, niño; en cada joven y en cada adulto mayor de nuestra Patria. Sin embargo, como yo también soy parte de ese Pueblo y me debo a él, y lo conozco y he estado siempre en contacto con él, trataré de contestar a esta pregunta.

Lo primero, lo más inmediato que se me viene a la mente, es una imagen latente de aquellos días tristes de marzo del año 2013, cuando nuestro Comandante era despedido por las multitudes, en Caracas. Recuerdo, en medio de todo aquel dolor colectivo, una manifestación, unas voces que se arremolinaban en la noche, en una calle o avenida, y gritaban al viento: “Y ahora al Panteón, al lado de Simón”.

Se referían al Panteón Nacional, y pedían que Chávez debía estar sembrado con el Libertador. Y más allá de lo justo o no de aquella petición, lo que quiero destacar es que el amor del Pueblo hacia Hugo Chávez, es tan grande como el amor a Bolívar. Así, de esa forma, quiero comenzar mi respuesta a esta interrogante. Bajo ese principio tan cristiano y tan universal que muchas veces subestimamos, el principio de amor con amor se paga, que caracterizó la relación del Pueblo con Chávez.

En nuestro país, en la Patria de Simón Bolívar y Hugo Chávez, su pensamiento y obra siguen siendo una guía para superar las dificultades que la crisis capitalista impone. Por ejemplo, ante la crisis sanitaria por la pandemia, el sistema de salud que no solo se basa en una infraestructura, sino en la formación de personal médico con vocación humanista y no mercantilista, ha sido clave para enfrentar la situación de emergencia. Adán Chávez.

Hubo un tiempo, que duró aproximadamente cuarenta años, en el que el Pueblo venezolano fue engañado, traicionado, hambreado y sometido por la oligarquía nacional, bajo el tutelaje de los Estados Unidos de Norteamérica. Ese país desmoralizado y entregado a los intereses foráneos, empobrecido, fue el que encontró Chávez cuando asumió la Presidencia de la República. Y, para no entrar en detalles, ya que me solicitan una respuesta breve, podemos decir, que desde que tomó posesión hasta su partida física, el Comandante dedicó cada momento a saldar la deuda social con su Pueblo, a mejorar sus condiciones de vida, a garantizar sus derechos expoliados durante los gobiernos puntofijistas, a abrirle los caminos de la felicidad que le habían sido negados.

Ese fue, si pudiéramos resumirlo en unas pocas palabras, la gran misión de Chávez en estas tierras. Y, del mismo modo, con la misma intensidad y pasión, el Pueblo le ha retribuido todo ese amor.

Si hay que responder entonces en pocas líneas, qué significa Chávez para nuestro Pueblo, decimos: un sentimiento, una pasión, un torrente de amor infinito; pero también, nuestro Pueblo mayoritariamente asume que Chávez es un proyecto de libertad y soberanía.

Desde su perspectiva como Presidente del Instituto de Altos Estudios del Pensamiento del Comandante Hugo Chávez, ¿Sus propuestas y acciones continúan siendo vertientes para avanzar en la superación del estado actual del país? ¿Cómo explicar el legado de Hugo Chávez al mundo de hoy?

El mundo de hoy, marcado por una crisis generalizada del capitalismo, por las arremetidas cada vez mayores e intensificadas de los poderosos imperios contra los países más empobrecidos y susceptibles, por la arrogancia de los EEUU y sus aliados, tratando de sostener su poder hegemónico y unipolar, y golpeado aún más por la pandemia y la emergencia sanitaria mundial que está dejando el nuevo coronavirus; está viviendo realmente, aunque muchos lo pongan en duda, momentos cruciales para la humanidad.

Las naciones que han decidido ser libres, tomar el camino de la autodeterminación, la defensa de su soberanía, han tenido que enfrentar los ataques permanentes del imperialismo. Venezuela es quizá, hoy día, el más claro ejemplo de ello. Pero también vimos lo que hicieron en Bolivia, que gracias a ese heroico Pueblo ha recobrado su proyecto de democracia y justicia social; y lo que han hecho en otras latitudes y continentes. El capitalismo se ha convertido en un monstruo voraz.

¿Cuál fue la gran inquietud, la constante preocupación de Chávez ante esa visión del mundo? Esto lo dijo el Comandante en el año 2012: “la humanidad se está enfrentando a la amenaza cierta de la guerra permanente”. Lo afirmó, dadas todas las tendencias del capital financiero mundial, la acumulación de ganancias de las cúpulas industriales militares, las astronómicas sumas de dinero del negocio de la guerra. Y es así, esa es la tendencia, en virtud de la crisis.

Y Chávez entonces lo advierte, y hace un llamado a construir alianzas, alianzas estratégicas entre países, entre pueblos, para enfrentar la guerra y trabajar por la paz, y a su vez, crear condiciones de cooperación, de ayuda mutua, integralmente, en lo económico, político, social, cultural.

En nuestro país, en la Patria de Simón Bolívar y Hugo Chávez, su pensamiento y obra siguen siendo una guía para superar las dificultades que la crisis capitalista impone. Por ejemplo, ante la crisis sanitaria por la pandemia, el sistema de salud que no solo se basa en una infraestructura, sino en la formación de personal médico con vocación humanista y no mercantilista, ha sido clave para enfrentar la situación de emergencia.

También ha sido determinante la política exterior que el Comandante impulsó y que sigue vigente, el establecimiento de relaciones de amistad y solidaridad con países no alineados con el imperialismo estadounidense y sus aliados. Me refiero a las relaciones con Rusia, China, Irán, por ejemplo, que han cooperado sustancialmente en estos tiempos difíciles para nuestro Pueblo.

Allí está, sin duda, latente, su legado, siempre para el bien de la población. No solo en materia de salud, también en materia energética y de alimentación, estas alianzas promovidas por Chávez nos muestran hoy, en momentos de mucha complejidad, que es posible superar los escollos mediante la unidad y los lazos de hermandad.

Estoy convencido de que uno de los principales legados de nuestro Comandante Eterno se centra allí, en el conjunto de alianzas estratégicas, plataformas de unidad, políticas de integración, que no solamente han permitido el intercambio económico, comercial y cultural, sino que ha venido construyendo estrechos vínculos de solidaridad entre los Pueblos.