ONU: informe de DDHH confirma aumento de masacres en Colombia
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos en Colombia, por medio de una rueda de prensa virtual, indicó que en 2021 tuvieron reportes sobre 100 casos de masacres.
El 3 de marzo de 2022, la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia, publicó un informe donde constata el sensible incremento en las masacres registradas en el país en 2021, con un total de 78. Cifra que fue eclipsada con un aumento de la violencia en general, que resultó en el asesinato de 100 defensores de derechos humanos.
Juliette de Rivero, representante de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos en Colombia, por medio de una rueda de prensa virtual, indicó que en 2021 tuvieron reportes sobre 100 casos de posibles masacres, de las cuales han podido verificar 78. La ONU documentó en el informe del año pasado que en 2020 se habían producido 76 masacres con 292 asesinados, el doble de homicidios múltiples que en 2019.
El resultado de la organización internacional anteriormente citada, es reflejo de lo que aún sigue sucediendo en las zonas sin el control efectivo del Estado colombiano, tal y como lo demuestra la más reciente masacre del 2 de marzo en Maicao, la número 20 en lo que va de 2021.
El suceso ocurrió luego de que sujetos armados entraron a una vivienda en el barrio Pastrana, en el municipio de Maicao, en La Guajira, donde asesinaron a tres personas. Evidencia gráfica en las redes muestran como uno de los sicarios dispara a corta distancia contra uno de los presentes, identificados como miembros de la etnia wayuú, y luego huye en una camioneta.
En el múltiple homicidio perdieron la vida Alex Chasin, Bernardo Zambrano y Aristóbulo Zambrano. Este último fue llevado de urgencias a la clínica Asocabildos, pero pese a la labor de los médicos, falleció por las múltiples heridas en su cuerpo.
Asimismo, la ONU había emitido su posición frente a los asesinatos de líderes sociales en Colombia, cuyas cifras también se encuentran en franco aumento. En el informe del relator especial de Naciones Unidas se describe que las zonas en donde más se matan a los líderes son las rurales, lo que está provocando un vacío de liderazgo en esos puntos del país y aumentando los índices de impunidad.
Según el estudio de la Comisión Colombiana de Juristas citado por la ONU, entre la firma del Acuerdo de Paz y finales de julio de 2018, “del total de las personas defensoras asesinadas 23% son dignatarios/as de las Juntas de Acción Comunal (incluyendo cuatro líderes afrodescendientes), 20% líderes y lideresas comunales, 20% líderes y lideresas étnicos (12% indígenas y 9% afrodescendientes), 5% defensores de los derechos de las víctimas, 11% líderes y lideresas campesinos, 2% reclamantes de tierra y 2% abogados/as defensores de Derechos Humanos”.
Según cifras de Indepaz, tras la firma del acuerdo de paz en 2016, han sido asesinados 1.311 líderes y defensores de Derechos Humanos. Dentro de esa sumatoria forman parte los 145 líderes sociales asesinados durante el 2021 en el Cauca.
Además de las dantescas cifras de asesinatos selectivos, el país suramericano contabiliza más de 80 masacres en el 2021, tendencia que no parece disminuir ante la gestión del gobierno del derechista Iván Duque que tantas licencias le ha otorgado al paramilitarismo y el narcotráfico.
La Alta Consejería para los Derechos Humanos asegura que en esas zonas hay alto riesgo por la convergencia de presencia de Grupos Armados Organizados (GAO), el ELN, GAO Residual, “Clan del golfo”, “Los Pelusos” y “Los Caparrapos”; y 21 Grupos de Delincuencia Organizada (GDO) que se disputan el control de economías ilícitas en torno a la cadena de narcotráfico, la explotación ilícita de yacimientos mineros, recursos naturales y el despojo de tierras.