Exiliados y asesinados: los artistas víctimas del franquismo

La dictadura del franquismo marcó un hito no solo en España, sino en el mundo entero, debido a las desgarradoras y horribles heridas que dejó en las personas, tanto en sus memorias como en el vacío que quedó tras la desaparición, muerte y tortura de la gente que no llegó a contar su historia, debido a que fueron silenciadas por la mano de un terrible dictador.

En este extenso período fueron millones los afectados, desde políticos, intelectuales, artistas y toda clase de profesionales que se vieron obligados a tomar decisiones radicales para sobrevivir o morir por sus ideales contrarios al orden imperante, aquel que no admitía nada que estuviese fuera de sus creencias.

A excepción de aquellos que se aferran a la memoria histórica como si fuese un cuento de hadas o una utopía donde el gobierno velaba por el bienestar de los ciudadanos, el franquismo realmente es sinónimo de miedo y de miseria; además propició la huida de aquellos que buscaron desesperadamente escapar de las atrocidades que se vivían a diario.

Aunque traten de romantizarlo, el régimen franquista quería controlar la vida de los ciudadanos, desde sus valores, costumbres, creencias, comportamientos y actividades. Como poseía la característica de autoritarismo, buscaba controlar todo el sistema social y se veía reflejado en el campo del arte, la escritura, de la producción cinematográfica, etcétera.

De esta forma, muchos artistas e intelectuales escaparon a Francia o América Latina, mientras que los más desafortunados fueron víctimas de asesinatos y fusilamientos.

Federico García Lorca

García Lorca fue uno de ellos, ya que durante la Guerra Civil dejó Madrid para irse a Granada, pero fue fusilado por los rebeldes antirrepublicanos. Su cuerpo sería lanzado en una fosa común y posteriormente, Franco prohibió sus obras hasta 1953.

Un informe de elaborado por la Policía del franquismo en 1965 reveló que Federico García Lorca fue asesinado en 1936 junto a otra persona. Asimismo, quedó expresado que el poeta fue asesinado por ser “socialista y masón”, a la vez que le atribuye “prácticas de homosexualismo”.

Pablo Picasso

El emblemático pintor denunció el horror de la guerra y manifestó su rabia tras la muerte de muchas víctimas inocentes en su lienzo monumental “Guernica”. Dicha obra representa el bombardeo de la ciudad del mismo nombre que ocurrió el 26 de abril de 1937.

A su manera dejó ver la barbarie del régimen y dio su grito antifranquista, por lo que ese cuadro fue utilizado como instrumento de propaganda. Supuestamente, el Embajador Nazi, Otto Abertz, le preguntó a Picasso en la exposición universal de París en 1937, delante del lienzo, si era él quien lo había hecho. A lo que le respondió que era de su autoría.

Antonio Machado

Machado fue uno de los pocos que logró cruzar la frontera con Francia en Portbou acompañado de María Zambrano, a comienzos de 1939. Sin embargo, murió un mes más tarde, pero su poesía continúa vigente en la actualidad, porque definía a la España de aquella época decadente.

En uno de sus últimos versos, en el lecho de su muerte, recordó las añoranzas de su niñez en la tierra que lo había visto nacer: “Estos días azules y este sol de la infancia…”, aferrándose a las memorias de un país que había sido azotado por un tirano sin escrúpulos.

María Zambrano

María fue una filosofía española, que estuvo comprometida con la democracia y no fue reconocida en su tierra hasta que regresó en 1984 luego de pasar por México, La Habana, Roma y París, huyendo de la sombra del franquismo.

Escribió unas solemnes palabras sobre sus vivencias como exiliada: “El exilio ha sido como mi patria, o como una dimensión de una patria desconocida pero que una vez que se conoce, es irrenunciable“. Sin embargo, al final sería honrada con el Premio Príncipe de Asturias y el Cervantes.

Muchas piezas se perdieron en el tiempo

Pese a que algunos lograron salvarse, tanto autores como sus obras, muchas importantes contribuciones se perdieron en el trajín de la destrucción, el olvido y el tiempo, ya que fueron silenciados para jamás expresarse a través de su arte que hubiese quedado revelado al resto del mundo.

Todas las dictaduras trazan cicatrices en las naciones, pero aún permanecen vigentes los terribles sucesos que padecieron aquellos que pensaran distinto, incluyendo mujeres y homosexuales, los cuales padecieron de represiones que han sido evidenciadas con el tiempo.