Zelenski vs Holoborodko

Vasil Petrovych Holoborodko, es el nombre del maestro que personifica Volodimir Zelenski en la serie donde por primera vez se hizo presidente de Ucrania. Para algunos, ni en la fantasía más excéntrica de este actor presidente, la ficción iba a trocar en realidad y una mañana cualquiera, este mismo hombre se levantaría como uno de los presidentes más populares de la historia de su país.

La industria de contenidos

A pesar de ello, ya Hollywood haciendo lo que sabe hacer, nos había acostumbrado a esa idea feroz de creer que todo lo que sueñas puede convertirse en realidad. Desde los zapatos Rojos de Dorothy hasta The Truman Show, esta poderosa industria de la imagen, creadora incansable de peligrosos contenidos kitsch, provocadores y alienantes junto con las redes sociales; bordaron sobre el imaginario colectivo una imagen dicotómica entre el héroe de occidente y el enemigo comunista.

Por lo general, cuando hablamos de intercambios entre las expresiones artísticas, solemos hallar a la mayoría de ellos entre el teatro y el cine, o la pintura y la fotografía. Sin embargo, el surgimiento de este préstamo entre la ficción y las plataformas comunicacionales y redes sociales, nos señala un signo inequívoco de profundos cambios en la manera en la que nos relacionamos y cómo estamos construyendo sentido desde lo político.

Twitter, Tik tok

La espectacularización de la política en nuestros días adquiere un cariz perturbador. La gran perdedora en todo esto es la verdad y con ella lo que somos como generación. Hemos visto alzar frente a nuestros ojos masacres irreales viralizadas, retweets de ataques a mujeres por manos oprobiosas de hombres autodefinidos como superiores.

Los memes y Tik Tok en carrera feroz, acuden desde una impronta absolutamente superficial, a contar con una sola imagen o en 14 segundos lo que ocurre a cientos de personas a kilómetros de distancia.

Los niños y jóvenes que miran sus teléfonos y computadoras reconstruyen admirados imágenes violentas que los destornillan de risa, en fin, un pandemonio multicolor se ha apropiado de nuestro lenguaje y no pretende por ahora retirarse.

La guerra en Ucrania, se ha convertido en una especie de pecera donde con carácter obligatorio deben ir los políticos democráticos y portadores de paz. En fin, estamos presenciando sin saberlo un cambio de época que debemos atender.
Los medios de comunicación y las redes sociales, son y seguirán siendo una poderosa herramienta para los discursos transformadores y un espacio para los que día a día escribimos y creamos contenidos que entregamos para poner nuestro granito de arena en pos de un mundo otro. Es una labor impostergable, esta de construir una sociedad cada día mas y mejor informada.

Las redes y medios de comunicación han demostrado lo útiles que son en la construcción de ciudanía y nuevos meta relatos, pero también han servido en lo menudo para rescatar los elementos regionales y los micro relatos.
El uso de estas, en la guerra de Ucrania, también ha servido para demostrar la capacidad que tienen estas plataformas para construir contenido inmediato y global. En muchos casos son las mismas personas que desde sus dispositivos logran captar momentos noticiosos de alta relevancia.

Las redes sociales además pueden ayudar a medir un sinfín de cosas relacionadas con lo público y lo privado.

Durante estos últimos años, la crisis sanitaria traída por el Covid 19, ha hecho dar un salto cualitativo a lo que entendemos como comunicación, aún debemos seguir esperando cambios rotundos para bien y para mal, en lo próximo y en lo lejano de nuestra existencia.