Petro desmontó mentiras de los poderes fácticos de Colombia

Gustavo Petro ganó las elecciones de Colombia, llevando a la izquierda por primera vez al poder en ese país, y adelantó que a partir del 7 de agosto comenzará un gobierno para la vida.

A pesar de que casi todas las encuestas le daban por ganador, Petro se impuso a la maquinaria propagandística de la derecha, escoltada por la big data y los grandes conglomerados de la información que recibieron, con visible disgusto, el triunfo del hoy presidente electo de Colombia.

Petro dio un primer discurso que desmontó varias de las mentiras posicionadas desde los laboratorios de los poderes fácticos de Colombia, Latinoamérica y el mundo.

Gobierno de la vida y no de la venganza

“Los perdonamos”, fue una frase contundente en el discurso de Gustavo Petro, refiriéndose a los más de 60 años de conflicto armado entre la insurgencia heredera de Gaitán, y las fuerzas conservadoras de la oligarquía colombiana.

“No es un cambio para vengarnos, para construir más odios, no es un cambio para profundizar el sectarismo en la sociedad colombiana. El cambio consiste precisamente en dejar el odio atrás, en dejar los sectarismos atrás”, aseguró el presidente electo de Colombia.

Petro reconoció y tendió su mano a los electores que votaron por Rodolfo Hernández. Igualmente manifestó que está consciente de que existirá una fuerte oposición a su gobierno, pero insiste en la unión de todos los colombianos para poder abrir oportunidades a todos.

“No vamos a utilizar el poder en función de destruir al oponente. Los perdonamos. La oposición que tendremos bajo los liderazgos que quieran sea el de Uribe, el de Federico, sea el de Rodolfo, el de todos juntos, será siempre bienvenida en el Palacio de Nariño“, destacó Petro.

El gobierno de la vida es una de las premisas centrales del discurso de Gustavo Petro, y marca sus propósitos de justicia social y justicia ambiental establecidas en el plan de gobierno propuesto por el Pacto Histórico, como oferta electoral.

Justicia Social y gran acuerdo nacional

Un gran acuerdo nacional se asoma en el horizonte de Colombia. Esto podría llevar a una nueva Carta Magna, que incluya, sin ningún lugar a dudas, el reconocimiento de derechos fundamentales.

Petro apunta a la concreción de acuerdos regionales vinculantes, relacionados con nuevas formas de convivencia y paz.

“El gran acuerdo nacional tiene que ser entre 50 millones, tiene que comenzar a construirse a partir del diálogo regional vinculante. Lo que se decida regionalmente para acabar los conflictos violentos, para construir la prosperidad regional se vuelve norma, se vuelve obligatorio, se cumple”, asevera Petro.

Estos acuerdos regionales podrían servir como puntos de partida para un nuevo pacto social; que incluya derechos de sectores excluidos por las élites. Igualmente para un nuevo régimen de seguridad social, laboral; y un modelo económico colaborativo.

“Los derechos fundamentales que no pueden ser más letra muerta, sino que tienen que ser la vida cotidiana, la existencia real, que se pueda palpar, que se pueda vivir todos los días. Una Constitución viva en la plenitud de los derechos de la gente. Un acuerdo nacional, para construir los máximos consensos que nos permitan las reformas que hagan que la vida de la familia pueda ser una vida mejor”, explica el mandatario electo.

Capitalismo “no porque lo adoremos”

Petro afirmó que su gobierno impulsará el desarrollo del capitalismo, y justificó por qué su gobierno de izquierda, se ha puesto esta meta extraña para los más ortodoxos.

“Nosotros vamos a desarrollar el capitalismo en Colombia, no porque lo adoremos, sino porque tenemos primero que superar la premodernidad en Colombia, el feudalismo, los nuevos esclavismos, superar las mentalidades atávicas ligadas a ese mundo de siervos, que tenían como contraparte los señores esclavistas, tenemos que construir una democracia”, destaca Petro.

El nuevo presidente de Colombia insinúa una transición comedida hacia otros procesos, y asegura que no habrá expropiaciones, pues su gobierno respetará la propiedad privada e impulsará modelos de propiedad colaborativos con la mirada puesta en crear verdadera productividad para Colombia.

“Un pluralismo económico, superar las viejas esclavitudes, poder tener una tierra que se llene de alimentos cultivados. Tener un espacio para las comunidades indígenas, para que se desarrolle su autonomía, tener una economía popular, que se pueda fortalecer a través de la conectividad, a través de la educación, a través del crédito barato. De ahí saldrán formas del capitalismo ojalá democrático, ojalá productivo, ojalá no especulador”.

Gobierno para los jóvenes y las mujeres

Las mujeres y los jóvenes fueron protagonistas del triunfo de Gustavo Petro, y sobre esto hizo énfasis el nuevo mandatario; quien no vaciló en prometer reivindicaciones para estos sectores de la sociedad colombiana.

“Una marea juvenil decidió hoy tomarse las urnas, una marea femenina decidió tomarse las urnas. El acuerdo nacional, por tanto, tiene que ver con reformas que necesitan y han gritado las juventudes y las mujeres de Colombia”.

El acceso a la educación superior es un punto de honor para los votantes de Petro, en su mayoría jóvenes, para quienes el acceso a las universidades ha sido reducido por sus altos costos.