Los Barones del azúcar
El 10 de octubre de 1868 se proclamó el régimen colonial de España en Cuba, un régimen que teñiría la economía cubana de dolor. Economía basada en el cultivo de caña de azúcar y tabaco. Tierra con unas condiciones más que óptimas para ese tipo de cultivo.
Así que el problema de la mano de obra en Cuba, llevó a la oligarquía colonial española a recurrir al tráfico de esclavos, que eran llevados a tierras cubanas desde África. Era la única vía para garantizar el aumento de la fuerza de trabajo de manera inmediata.
Los Barones del azúcar fueron los encargados de teñir la “próspera” economía cubana de sufrimiento. El tráfico de esclavos por parte de estos Barones fue llevado a cabo en periodo de prohibición, y cabe no olvidar que la esclavitud estaba prohibida. Pero sin duda, todo valía para la “prosperidad” del pueblo cubano, ¿o en realidad la prosperidad de los Barones del azúcar?
El que España traficase con esclavos era un secreto a voces, algo que supuso para los negreros un enorme esfuerzo, ya que tenían que ser capaces de evitar que los barcos llenos de esclavos fueran interceptados por la flota inglesa.
Las condiciones de “trabajo” en las plantaciones de los esclavos eran terroríficas. La esperanza de vida de estos no superaba los 15 años en el desarrollo de las tareas en las plantaciones. Y no hay que olvidar los suicidios que respondían a la única vía de escape ante una situación totalmente insoportable para cualquier ser humano.
Muchas de las grandes fortunas españolas de hoy en día están manchadas de el robo de la libertad a muchos seres humanos. Gran parte de la burguesía de España debe su estatus a los esclavos llevados desde África a Cuba para “trabajar” en las plantaciones. Personajes como Joan Mas Roig, tatarabuelo de Arturo Mas, deben sus fortunas a los esclavos llevados a Cuba.
No olvidar, y por supuesto, dar luz a la procedencia de algunas fortunas, que costaron tanto sufrimiento y vulneración de libertades es un ejercicio sano que evita repetir episodios horribles de la historia.