En la Casa de vacas del Retiro madrileño.
El panorama cultural de esta muestra anual, por lo que respecta a los ámbitos correspondientes a la Pintura y a la Escultura, va, afortunadamente, “in crescendo”.
Cierto y verdad es que ya en anteriores ediciones hemos constatado un aumento tanto en la creatividad de los artistas como en el interés de los mismos por explorar nuevos territorios y en definitiva por ampliar los márgenes de la expresión, lo que sin duda constituye la esencia misma de un creador.
Todo ello conduce, como no puede ser de otra manera, a una evidente mejora en el resultado final, la calidad de las obras. Y es por ello que este año, ante la cantidad de buenos productos para la degustación de los mejores “gourmets”, que sois los que conformáis la base de nuestros seguidores, os ofrezco en sesión continua esta crónica con dos apartados bien diferenciados, el correspondiente al de Pintura y el no menos importante de Escultura.
Y encima, con una mayor representación femenina.
Disfrutad.
Pepa Miranda
Esencia
Óleo/lienzo
Juan Núñez
Un día cualquiera
Acrílico/tabla
Esta acuarela es la obra que más encantó a Isabel
Magdalena España
Tres amigas
Acuarela/papel
Ana Gutiérrez
Decadencia otoñal
Óleo/lienzo
Pilar Navamuel
La inspiración o cuando las musas hablan
Óleo/lino belga
Con un fondo de la obra sobre un bastidor interior de unos dos-tres centímetros, esta obra adquiría una increíble sensación de profundidad (sobre todo en la parte de la ventana)
Pilar Sagarra Moor
El mar como reflejo del alma
Mixta sobre metacrilato/lienzo
La obra ganadora:
Alejandro Martínez García
Ser XV
Óleo/papel
El segundo finalista (el primero es de escultura, ya lo veréis en el siguiente artículo):
Isidoro Moreno López
Refugio de montaña V
Óleo/lienzo
Y ahora os sorprendo con la que más nos gustó de todo el certamen, la fantástica realización de Agustín Pontesta Icuza, que como él mismo diría, es un explorador de caminos interiores, un buscador de lo desconocido, y esta obra suya resulta una tabla trabajada y horadada de tal manera que las grietas que se vislumbran sobre un soporte de unos tres centímetros forman parte del paisaje, parecen hendiduras naturales que un águila en su vuelo tal parece lo vería de ese modo, al igual que al ser humano que se adivina en el centro de la composición y que podéis apreciar si os esforzáis un poquito y que luego os detallo o al toro del risco en la parte superior.
Nosotros le hubiésemos dado el premio.
Agustín Pontesta Icuza
El vuelo de un ave
Sobre Rocas Blancas
El viento susurra
Mixta/madera fragmentada y agujereada sobre un bastidor
El señor que os decía:
Beatriz Arteaga Pitzembauer
Pescadores
Óleo, acrílico y tinta/lienzo
José Carlos Espinel
Rio
Mixta/tabla entelada
Aracely Alarcón
Monasterio de El Escorial
Óleo/lienzo
David Calderón
Estudio de Paolozzi VII
Óleo/lienzo
Cristóbal Olmedo Aranda
La duda
Mixta/tabla
Coro López-Izquierdo
Un grafiti llamado evocación
Óleo, acrílico y collage/lienzo
Y ahora este gigantesco hipopótamo, que resalta aun mas su tremendo volumen, al estar recortada su figura sobre un soporte posterior mas hundido; como veis, en esta edición son varios los artistas que han recurrido a este artificio para dar más relieve y realce a sus figuras; podríamos casi llamarlo el certamen del bastidor.
Muy logrado (el hipopótamo).
Guiomar Álvarez de Toledo
Hipopótamo grafitero
Óleo/tabla entelada
Pero…¿Qué hace aquí un Caravaggio? Al acercarnos comprobamos que se trataba de un actual Francisco Escalera
Francisco Escalera
Desde el puente de los descalzos. Venecia.
Mixta/lienzo
Socios manriqueños, todo llega…
Mikel Pinto Muñoz
Tan callando
Óleo/lienzo
Juan Saturio
Paisaje bucólico
Acuarela/papel adherido a tabla
Juan Manuel López-Reina
Mar en tempestad
Mixta/ tabla
De esta siguiente composición, nos encantó sobremanera el afortunado hallazgo del trampantojo de la llave dentro del trampantojo del cuadro, en el interior a su vez del trampantojo que entraña cualquier lienzo, si lo pensáis por el mero hecho de intentar plasmar en dos dimensiones aquello que tiene tres. Y ahora está el trampantojo de moda, os prevengo sobre la crónica que os espera sobre la muestra al respecto que acaban de instalar en el Thyssen.
Lástima por otra parte de lo conseguido de este cuadro como dibujante por el artista y por la exuberancia y el acierto en la composición, pero a nuestro modo de ver no alcanzado ese nivel como pintor en lo referido a la calidad de los materiales. A nuestro juicio, todo tiene el mismo reflejo metálico; da igual que sea la tela del paraguas, las correas de las sandalias, el cuero de la cartera o la madera de la silla.
Aunque vaya en su descargo que al ser pintado sobre madera, casi ocurre lo mismo que al aplicarlo sobre el cobre; el óleo como bien sabéis adquiere casi sin querer en esto caso un brillo adicional especial.
Lo sentimos, no nos agrada dar caña, pero creemos que las cosas son como son…
Ricardo Renedo
Rastrillo III
Óleo/tabla
JM Beranardo
Torres
Óleo/lienzo
Fernando Devesa
Cádiz desde la Torre del Reloj
Óleo/lino montado sobre bastidor y tabla
Joaquín Besoy
Naranco de Bulnes (Picos de Europa)
Óleo/lienzo
Luis Bascuñana
Retrato veneciano
Óleo/tabla
Muy acertada y estimable vista lluviosa de la Gran Vía de Madrid
Cajal
Agua y metal
Óleo/tabla
Juan Manuel López-Reina
Baño nocturno
Mixta/tabla
Susana García Bravo
Danza oriental
Óleo/tabla entelada
Nos despedimos con el inconfundible estilo del ganador de otro año, Javier Ortas, con el enorme merito de que tiene el haber logrado algo de lo más difícil hoy día, ser hasta cierto punto original y sobre todo, reconocible.
Javier Ortas
Aves migratorias
Óleo/lienzo
Salud y trabajo.
