Bolivia: intento de golpe de Estado y contragolpe ciudadano
Bolivia vuelve al tope de la agenda latinoamericana por un nuevo intento de golpe de Estado, esta vez contra Luis Arce Catacora. Los ciudadanos van por un contragolpe en favor de la democracia y del gobierno legítimamente electo en 2020.
El golpismo vuelve a tomar fuerza en Bolivia. El capítulo de 2019, que dejó casi 40 muertos y hundió a ese país en una pesadilla neoliberal, nunca se cerró del todo. Hoy son los mismos actores los que llaman a un paro, y la ciudadanía responde con un contragolpe sereno pero contundente. En esta oportunidad, la excusa ha sido un censo de población y vivienda.
El polémico censo
El censo es una herramienta de carácter técnico, utilizada en cualquier país del mundo para planificar mejor las políticas públicas y medir con mayor precisión el cumplimiento de metas. Un ejemplo válido sería el de la agenda 2030 de las Naciones Unidas.
Por ello, la ONU, la CEPAL y la CELADE, avalaron el Censo de Población y Vivienda de Bolivia, pautado en un primer momento para finales de 2022.
En Bolivia, el censo ha sido la justificación para dos paros, a pesar de que fue reprogramado en cuanto comenzaron las presiones desde Santa Cruz, departamento gobernado por el actor golpista más reconocido: Luis Fernando Camacho.
Camacho, el Comité pro Santa Cruz y otros actores políticos de la derecha, comenzaron objetando el censo porque no incluía la categoría “mestizos”. Luego, forzaron desde las instancias autonómicas de Santa Cruz su suspensión.
Finalmente, Luis Arce anunció la suspensión del Censo para el año 2024. Ahora, el gobernador de Santa Cruz quiere que se adelante para poder solicitar recursos con el nuevo conteo poblacional, en lo que luce más como excusa política y no como una petición de carácter técnico.
Contragolpe ciudadano
El contragolpe ciudadano ha consistido en no acatar los llamados a paro emitidos desde Santa Cruz y desde la voz de Luis Fernando Camacho. Dichos paros piden que se adelante el censo para el 2023, luego del rechazo al de 2022.
Seguir con la vida normal ha sido el signo de quienes rechazan el paro. Se trata de una clara mayoría de la población, aun en la propia Santa Cruz, segunda ciudad más importante de Bolivia y epicentro de la actividad industrial y comercial del país.
Un estudio Delphi de la Fundación Friedrich Ebert Stitfung (FES), reveló que el 39,4% de los ciudadanos considera que los movimientos contra el censo tienen como único objetivo la desestabilización.
Por su parte, la Central Obrera Boliviana anuncia movilizaciones para esta semana ante lo que consideran un paro ilegal e inconstitucional.
¿Por qué usaron el censo?
La excusa del censo es absurda. No obstante, la derecha boliviana no tiene muchas opciones, pues la economía boliviana y el nivel de vida en ese país es igual o mejor que en la época de Evo Morales.
La inflación de Bolivia es de 1,8 %, una de las más bajas de América Latina, y a pesar de la pandemia y de las políticas desastrosas de Jeanine Añez, presidenta de facto después del golpe a Evo Morales, Bolivia recobró la senda del crecimiento.
Por otra parte, la figura de Luis Arce Catacora refrescó la imagen de la Revolución Democrática que dio origen al Estado Plurinacional de Bolivia.
Arce es considerado como un líder que ofrece mayores certezas, por ser el artífice del milagro económico boliviano y por sus características mucho más “urbanas” que las de su antecesor, Evo Morales.
48 horas para terminar
La Federación de Campesinos de Santa Cruz le dio 48 horas a Camacho y a los grupos de derecha que impulsan el paro para que terminen esta medida de fuerza.
“Ya han perjudicado al pueblo y a los más humildes”, resaltó Franklin Vargas, representante de la Federación.
El gobierno dialoga
El gobierno de Luis Arce y el MAS, abrieron espacio para dialogar con Camacho y todas las alcaldías y gobernaciones del territorio boliviano. Sin embargo, Camacho se ha retirado del diálogo e insiste en la agenda de protestas violentas.
La ministra María Nela Prada, recordó que la intención del gobierno de Luis Arce es retomar la estabilidad del país a través del diálogo, y ha manifestado su voluntad de adelantar el censo unos meses antes. Por el momento, no ha recibido respuesta por parte de quienes plantean inconformidad con respecto al censo.
El saldo mortal
Julio Pablo Taborga falleció en Puerto Quijarro, en medio de las protestas convocadas por Luis Fernando Camacho.
El reporte forense indica que Taborga falleció por traumatismo cráneo-encefálico cerrado, provocado por un golpe en la cabeza.
“Mi esposo estaba ahí y ellos empezaron a atacarlo… Los del Comité Civico dijeron que ellos iban a bloquear pacíficamente, pero ellos llegaron con dinamita”, relata la esposa del primer fallecido en este episodio de golpe contra la democracia boliviana.