¿Cordón sanitario a la extrema derecha?
En 1932 Hitler lideraba el partido nazi alemán. Sus resultados aumentaban elección tras elección. Tensionaba la calle y la política para llevar a una situación extrema que solo le pudiera beneficiar. Hasta entonces su discurso anisemita no dejaba adivinar una mentalidad genocida. No era el antisemitismo una novedad de la época ni una idea original de los nazis.
Se presentaba como un hombre de paz que solo quería estabilidad y prosperidad para Alemania. En esa época, en una sociedad cansada y derrotada después de la Primera Guerra Mundial, un discurso belicista no sería bien recibido. Hitler era un radical, un racista y un golpista fracasado que estaba dispuesto a conseguir el poder de manera legal.
Por su insistencia y cabezonería en no pactar con nadie consiguió ganar las elecciones y formar gobierno. Tras la muerte Hindenburg se autoproclamó Fürher y una vez allí empezó a modelar el estado alemán hasta ajustarlo a su visión. Ilegalizó partidos, encarceló opositores, hasta que solo quedó el partido nacionalsocialista.
En 1938 consiguió la anexión de Austria y a través del acuerdo de Munich se anexionó también los territorios de influencia alemana de los sudetes checoslovacos. En 1939 entraró en Praga. Inglaterra y Francia no hicieron nada para impedirlo, la obsesión era evitar una guerra que Hitler deseaba.
El 1 de septiembre de 1939 Alemania invadió Polonia. La excusa fueron unas falsas agresiones por parte del ejército polaco. Alemania solo se defendía. El victimismo era una de las mayores armas de propaganda nazi.
Empezó la Segunda Guerra Mundial y con ello un genocidio racial e ideológico. La invasión de la Unión Soviética tenía una consigna, la aniquilación del bolchevismo. Los soviéticos no eran soldados, eran criminales y había que ejecutarlos.
El resto es una historia muy conocida.
Si estuviéramos en 1932 y tuviéramos la visión de saber que haría Hitler ¿qué deberíamos hacer? ¿ignorarlo? ¿educarlo? ¿convencerlo? ¿debatir con él?
El fascismo y el nazismo son tóxicos, infectan el debate en el que participan. ¿cómo frenarlos? ¿Cómo impedir que consigan el poder y que con el aniquilen a sus oponentes? ¿Cómo evitar que inoculen sus ideas racistas? Nadie hubiera imaginado el holocausto en 1932.
¿Tenemos claro que pasaría si VOX, un partido a la derecha de los franquistas del PP y su marca blanca (o naranja) Cs, llegara al poder? ¿O como mínimo entrara en el gobierno? ¿O llegara a acuerdos de legislatura de un gobierno y tuviera la llave para gobernar?
>>VOX, fascismo y capitalismo del Siglo XXI<<
“Europa no lo permitiría”, dicen algunos. ¿Perdón? ¿Qué haría Europa? ¿Sancionar a España? ¿Cómo reaccionaría la derecha española ante una Europa intervencionista? Pues ignorándola, como si el franquismo no hubiera vivido tranquilo aislado del resto de Europa, tanto como para que el único dictador fascista de inicios de siglo que acabara muriendo en la cama fuera español.
¿Cómo frenar a Hitler en 1932?
¿Cómo frenar a VOX en 2019?