¿Es real la caída de Ciudadanos que señalan las últimas encuestas?
A raíz de la cercanía del pleno de investidura –Pedro Sánchez tiene menos de tres semanas para conseguir una mayoría e investirse presidente- los politólogos, sociólogos, periodistas y una gran parte de la sociedad ya hacen cavilaciones sobre si habrá investidura o se repetirán las elecciones.
A tenor de eso, ya se han podido ver los resultados de algunas encuestas, sobre estimación de voto, en los medios de comunicación. Y aunque los resultados no son idénticos, el partido que dirige Albert Rivera sale perdiendo.
Encuestas y sondeos: resultados
En los datos que presenta la encuesta realizada por Sigma Dos para El Mundo, Vox y C’s caerían mientras el bipartidismo saldría reforzado. El PSOE sube 3.9 puntos en intención de voto; el PP subiría 2.7 puntos; Vox bajaría 2.3 puntos, de 10.3% al 8% y C’s bajaría más de dos puntos.
Según esta encuesta, el 70% de los votantes de Ciudadanos, quiere que la formación facilite la investidura de Pedro Sánchez. Los datos que aporta esta encuesta dicen que pasaría de ser la tercera fuerza en el Congreso de los Diputados a ser cuarta fuerza, en favor de Unidas Podemos.
Con estos datos, el bloque de la derecha caería 2.4 puntos, del 42.9% al 40.5%
El sondeo que NC Report ha realizado para La Razón muestra que si hoy hubiera elecciones, las ganaría el PSOE mejorando su resultado en 1.8 puntos. Pasaría a tener entre siete y nueve escaños más de los que obtuvo en abril.
El PP mejoraría 3.5 puntos, llegando a obtener entre 11 y 14 escaños más de los que tiene. Este sondeo concluye que el PP sale reforzado a costa de los votos de Vox y C’s. Parte de los votos de este último han vuelto al PSOE, quien ha recuperado el lugar que C’s asumió cuando en el 2015 irrumpió en las instituciones.
Las razones de la caída de C’s
Primarias. Aunque sea algo que el partido da por zanjado, las sospechas y quejas habidas entorno a las primarias de la formación naranja no se han olvidado. Algo que le puede estar pasando factura.
Vox. La aparición de Vox ha hecho que antiguos votantes del PP y también los votantes de C’s perdidos en la abstención, vuelvan a las urnas. Pedir el voto útil para hacer frente al “peligro Vox” ha sido un arma de doble filo y C’s ha sido tan despistado que se ha cortado.
Cataluña. Albert Rivera supo aprovechar el impulso de la mal llamada “crisis catalana“. Pasó de ser el partido que izaba la bandera de ser el más antiindependentista, a no hacer nada más que perder votos. Daba la sensación que se había olvidado de Cataluña y entonces apareció Vox, quien también supo aprovechar el tirón que daba el antiindependentismo catalán -dos de sus diputados son abogados de la acusación-. Acabaron de invisibilizar a Rivera, lo que contribuyó al desinfle de C’s.
Salida de votos. Para parchear la salida de votos la dirección del partido decidió incorporar a exaltos cargos de otras formaciones en sus filas. En algunos casos parece que salió perjudicado, con Silvia Clemente -ex presidenta de las Cortes de Castilla y León con el PP– por ejemplo. No parece que la investigación abierta por presuntas irregularidades en la concesión de subvenciones a la empresa de su pareja, haya beneficiado al partido.
PSOE. El partido naranja ha impuesto un veto al PSOE, dándole protagonismo a Casado y ayudándole a recuperar poder territorial. La decisión de C’s a ser el partido bisagra y centrarse en competir con el PP para conseguir el liderazgo de la derecha, ha beneficiado al PP y ha perjudicado a C’s.
El Centro. Posicionarse en el centro la convirtió en la formación que más posibilidades tenía de aumentar voto. El problema de estar en el centro es tener dos lados que defender. Hay que tener en cuenta que los votantes del centro son más indecisos y así, una vez pasada la etapa de indignación del 15M, el votante socialista está regresando a su esencia.
¿Se aproximan las encuestas a los reultados?
Los sociólogos afirman que cada vez es más complicado, ya que los votantes tardan más en decidirse, pero no mienten en las encuestas. Confiando en los datos aportados por las encuestas, todo apunta a que C’s ha perdido el músculo electoral que tenía en los anteriores comicios.
El problema empezó cuando tuvo que tomar partido y decidirse. Algunas personas empezaron a ver una faceta de Albert Rivera que hasta entonces no habían visto. Una persona antipática que siempre hablaba con suficiencia. Su arrogancia lo llevó a relacionarse con personajes no muy bien vistos como Emmanuel Macrón y George Soros.
La incorporación en sus filas de excandidatos de otras organizaciones generó malestar interno. Ha flirteado con todos sin importarle, al parecer, el perfil mayoritario de sus votantes de derecha provinientes del PP.
Rivera tiene ahora a sus patrocinadores molestos. Los mismos que lo auparon y ahora no vacilarán en dejarlo caer si este no cede a sus intereses de pactar con el PSOE y evitar nuevas elecciones.