The news is by your side.

Coronavirus: la conclusión del miedo europeo

No es nada nuevo decir una y otra vez que el coronavirus se podría haber parado antes, y que podríamos haber hecho un mucho mejor trabajo del que hemos hecho, poniendo de ejemplo a países como Corea del Sur o China, sin embargo, lo que conocemos como “Occidente” está sufriendo (y sufrirá aún más) un varapalo que no nos veíamos venir por ningún lado.

O al menos, los medios no nos dejaban verlo, mientras “el virus chino” roza los 200 000 infectos en EEUU, y deja el panorama español temblando, con 100 000 infectados y de unos medios que brillan por su ausencia.

En este terremoto de incertidumbre, miedo y caos, estamos empezando a ver los frágiles cimientos de nuestra sociedad, una sociedad regida por el consumo y que ha optado por esperar lo inevitable, por no parar la producción a tiempo y salvar vidas, esperando algún milagro, o más bien, que las acciones del IBEX-35 no cayesen.

Sin embargo, lo que estamos viviendo ahora, es una prueba de fuego para la continuación de la vida como lo creemos, superestructuras como la UE están tambaleando debido al egoísmo asfixiante que significa tener un fondo común que hay que racionar.

La impasible Alemania, juez y verdugo de la mayoría de decisiones, mantiene esa frialdad de acero tan suya, negando ayudas a nuestro gobierno (del PSOE-UP), y al italiano por lo tanto, no es cuestión de ideología, es cuestión de egoísmo y de realidad, el cual está dividiendo en dos partes actualmente a la UE, Portugal, Italia y España, contra los denominados “países del norte”, enfrentando humanidad contra egoísmo.

Todo este escenario deja una Europa llena de miedo, dónde lo que se supone que se comprendían como valores “europeos” o simplemente humanitarios, ahora son defendidos por aquellas naciones que fueron o las últimas en liberarse del fascismo como Portugal o España o naciones gobernadas por la ultraderecha actualmente como Italia, todo esto acompañado del ascenso de Viktor Orban, que ha conseguido anexionarse todos los posibles poderes gracias al coronavirus, ignorando así a la oposición.

Bien es cierto que Orban aún no ha tomado ninguna medida drástica por ahora, sólo el tiempo nos podrá decir si las intenciones de esta medida son para paliar al coronavirus o para servir a los intereses de las clases altas.

Y parece que la UE se tambalea por el coronavirus, pero tenemos que hacernos la pregunta, ¿Sobrevivirá la UE a la pandemia, tal y como la conocemos?

elestado.net no tiene por qué compartir la totalidad del contenido de los artículos que se publican en su sección de opinión.