Ya el pueblo habló, el que lo hizo votando y también absteniéndose. Cualquier análisis integrado debe tomar en cuenta ambos comportamientos. Por supuesto, y la variable externa del bloqueo, la presión y amenaza del gobierno de EEUU y todo el sabotaje interno que nos ha sometido a penurias.
El hecho de que se diga e insista que el PSUV tiene 6 millones de inscritos y no se alcance esa cantidad mínima de votos, eso debe llamar la atención y debe ser objeto de análisis profundo. Tapar el sol con un dedo, levantar banderas de triunfalismo y decir que aquí no ha pasado nada, no es una buena conseja.
Ahora lo importante es que miremos hacia adelante y ojalá esta próxima Asamblea Nacional se convierta en el centro del debate político de los grandes problemas que existen en el país y de las más sentidas necesidades del pueblo.
Además, que la Asamblea sea un escenario para el reencuentro entre venezolanas y venezolanos, más allá de nuestras diferencias políticas, religiosas ideológicas, culturales, es mi modesta opinión.
Así lo manifestó G, ex embajador venezolano en Uruguay, politólogo y columnista del Correo del Orinoco a Federico Ruiz Tirado, a través de un llamado telefónico.