Lasso ignora a la comunidad internacional y mantiene cautivo a Jorge Glas

 “Jorge Glas fue la primera víctima de persecución política de Lenin Moreno”, afirma la analista Sonia Vera, en un contundente texto donde hace recuento de la historia de traición que rodea la privación de libertad a Jorge Glas.

El ex vicepresidente tiene casi 5 años preso. Con pocas garantías, y con condenas sin asidero, quien fuera despojado del cargo para el cual lo había elegido la mayoría de ecuatorianos, sigue en Latacunga cada vez con menores posibilidades de salir ileso.

Organismos internaciones como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos tienen años exigiendo mejores condiciones para Glas, y en general para la población carcelaria que sobrevive a una crisis que ya ha dejado más de 200 muertos en hechos dantescos de violencia.

Pero Guillermo Lasso hace caso omiso. Al igual que Lenin Moreno no hay exhorto que induzca a ninguna revisión, y Jorge Glas sigue preso, y en peligro.

Las primeras medidas de la CIDH

A finales de 2019, luego de que por meses lo solicitaran sus defensores, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos atendió el caso de Jorge Glas, y visitó Latacunga para verificar las condiciones del ex vicepresidente preso.

Según lo observado por la CIDH, Glas estaría siendo objeto de intimidaciones, hostigamiento y amenazas en el Centro de Rehabilitación Social de Cotopaxi (cárcel de Latacunga), y dictó medidas cautelares para proteger a este preso político.

En la Resolución 69/2019, la CIDH instruye al estado ecuatoriano que “adopte las medidas necesarias para proteger la vida e integridad física de Jorge Glas Espinel, particularmente valorando e implementando aquellas más apropiadas a sus circunstancias personales”.

No se trata de un preso con historial criminal alguno, ni con cualidades de liderazgo negativo que le permitan convivir con ciertos entornos, esto lo reconoce la CIDH. y en función de ello, reclama mayores garantías para quien no se le ha concedido ninguna medida constitucional, como la del habeas corpus.

Jorge Glas, ha culminado estudios de 4to nivel dentro de la Cárcel, y sobrelleva su situación con dignidad. Durante la pandemia, Glas prescindió de tratos preferenciales, y pasó su convalecencia por Covid-19, dentro del centro penitenciario, a pesar de su frágil estado de salud previo a esa enfermedad.

700 días y nada se cumple

“700 días de emitidas las medidas cautelares. La vida de Jorge Glas se apaga cada día”, manifiesta la Asambleísta Nacional Sofía Espín.

De igual forma, un grupo de eurodiputados liderado por Manu Pineda, denunció que a Jorge Glas no se le han concedido los beneficios penitenciarios que le corresponden por haber cumplido más del 40% de la condena.

Jorge Glas fue detenido preventivamente y jamás salió. Su equipo de defensa ha solicitado se le unifiquen las condenas para poder computar el cumplimiento y dicha petición ha sido desestimada, por estas arbitrariedades, los eurodiputados se han hecho eco de los llamados de la izquierda ecuatoriana.

La Comisión de Europdiputados está conformada por Manu Pineda y Sira Rego de España, Leila Chabi de Francia, Sandre Pereira de Portugal, y Clare Daily y Mark Wallace de Irlanda.

Entre sus primeras acciones, están la girar comunicaciones a las máximas autoridades de Ecuador incluyendo la Fiscalía General y al presidente Guillermo Lasso, exigiendo el cumplimiento de las medidas dictadas por la CIDH y el respeto a la Declaración Universal de Derechos Humanos.

Este grupo se dirigió también el Alto Representante de Asuntos Exteriores de la UR, Josep Borrel, solicitando su intervención en los hechos arbitrarios que mantienen a Jorge Glas privado de su libertad.

La CIDH vuelve a reunirse con Jorge Glas

2 años después de emitida su primera resolución, la CIDH retorna al penal de Latacunga, para verificar el estado de Jorge Glas, y para corroborar la situación carcelaria del Ecuador.

Sin que aún se haya emitido informe, la CIDH atiende al llamado que realizan lo defensores de Jorge Glas, que en razón de los fuertes motines que se produjeron en 2021, temen por la integridad física y la vida del ex vicepresidente.

Lasso hasta el momento, no responde a ninguno de los exhortos, a pesar que en el 2018 el mismo hizo llamados públicos a respetar los derechos de Jorge Glas.

El Grupo de Puebla se une al clamor de la comunidad internacional

El Grupo de Puebla se une en esta ocasión al llamado de la OEA. En un comunicado publico, los gobiernos progresistas latinoamericanos se adhieren a la petición de la CIDH realizada en 2019.

“El ex vicepresidente Jorge Glas tiene derecho de gozar los beneficios penitenciarios, que los ha requerido desde diciembre de 2020, en razón de que la ley ecuatoriana garantiza, a quienes han cumplido el 40% de la pena, obtener su libertad, mucho más, cuando dicha privación de libertad se cumple en uno de los sistemas penitenciarios más violentos e inseguros del mundo”. Reza el comunicado.

Pero la presión internacional parece no importarle a Guillermo Lasso, quien evade leyes y mandatos a conveniencia.