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Terror en las relaciones modernas: el Ghosting

Con la relevancia que adquirieron las redes sociales, el Ghosting ha aumentado exponencialmente, pero ¿de qué se trata?.

El Ghosting es una práctica que, pese a no ser nueva, su popularidad ha aumentado exponencialmente en los últimos meses, todo a raíz de la interacción masiva de los internautas y la necesidad de mantenerse confinados por el contexto pandemia, la cual impulsó las plataformas de mensajería y videollamadas para fortalecer la comunicación a pesar de las fronteras físicas.

Partiendo de esa idea, este término anglosajón se puede traducir como “hacerse el fantasma“, aunque también es una combinación de “Ghost” que es fantasma y se le añade el “ing” que también forma parte del “texting” que significa enviar mensajes de texto.

Así que hace referencia a cuando una persona decide esfumarse de repente sin dar explicaciones de una relación amorosa, afectiva, familiar o de cualquier tipo, cortando las vías de comunicación en algunas ocasiones.

Pero hay una característica que es emblemática de este tipo de conducta, y es que dicha persona se va de la vida de otra sin dejar rastro, ya sea bloqueándola, borrando las cuentas o, sencillamente, dejando de responder a sus mensajes y llamadas.

Según un estudio del Journal of Social and Personal Relationship, un cuarto de las personas afirman haber sido víctimas del Ghosting. Y aunque el término se originó a principios de la década de 2000, en los años siguientes los medios informaron de un aumento de su empleo, atribuido al uso creciente de redes sociales y aplicaciones de citas en línea.

Algunos expertos explican que esta práctica implica “una desaparición sin explicación cuando ya se había establecido una vinculación emocional, mental y/o sexual“. Si ésta ya se había materializado, se produce “por pura comodidad narcisista de no dar la cara y por cobardía de no querer enfrentar el momento de dejar a esa otra persona“.

 

El origen del Ghosting

La historia que se esconde tras el nacimiento del término es curiosa, ya que el The New York Times contó que la actriz Charlize Theron se había enterado de que su novio, el actor Sean Penn, le había sido infiel y ella terminó la relación de pareja con él de esta manera.

Simplemente, dejó de verle, cortó todo tipo de comunicación con él y no volvió a responder a sus llamadas de teléfono. Ese mismo año, el diccionario Webster eligió “Ghosting” como la palabra del año. Sin embargo, a partir de la pandemia se viralizó y ahora se usa para definir con frecuencia.

Pero poco se habla sobre los grandes inconvenientes que conlleva esta práctica, pues no solo implica un daño emocional, sino también que tiende a ser adictivo, pues, el “fantasma” que la ejecuta, utiliza a su víctima como suministro u objeto de deseo, donde poder canalizar toda su manipulación, consecuencia de una personalidad inmadura y carente de empatía.

Tipos de Ghosting

Hay unos que son más radicales, porque arrancan la raíz y se van sin dar ningún tipo de explicación. Por ello es uno de los más complicados de gestionar para la víctima ya que puede llegar a pasar meses pensando en qué pasó o echándose la culpa.

También, existen otros más lentos, en el que al principio hay un gran interés por parte de esa persona pero paulatinamente va mermando hasta que finalmente desaparece por completo sin explicación alguna.

Por otro lado, se han diagnosticado algunas razones por las cuales se hace Ghosting como:

  • Al sentirse inseguro sobre la relación que ha mantenido hasta ahora.
  • Por haberse enfadado con algún comentario o acción realizada por el otro.
  • Por estar aburrido e ir perdiendo el interés en la relación progresivamente.
  • Porque tiene miedo a sentirse enamorado y adquirir un mayor compromiso.
  • Al sentir que se encuentra en una relación tóxica que irá empeorando con el pasar de los días.
  • Si llega a conocer a otra persona que le genere más interés.

Por último, pero no menos importante, es casi que esencial y un factor clave estar atento a las banderas rojas que te arrojan las personas, porque cuando alguien te hace Ghosting no lo hace repentinamente.

Al principio, van a irse detectando algunas conductas extrañas, incoherentes o inusuales que pueden estar vinculadas al abandono, la poca atención, ausencia, la indiferencia y esas son suficientes para ser grandes señales de alarma.