El PSOE: un freno a la izquierda en España
El PSOE se comprometió en acuerdos dentro de la coalición de Unidas Podemos. Hoy esta alianza puede convertirse en un freno a la izquierda.
En política los errores se pagan con la pérdida sustancial de espacio vital, el llamado giro de la política internacional de Pedro Sánchez y el PSOE ante el problema del Sahara Occidental, pudiera ser un ejemplo de ello.
Como es bien sabido, la historia democrática española está llena de coaliciones y encuentros. En el caso del gobierno de Pedro Sánchez, la coalición llamada Unidas Podemos, músculo político que lo llevó al poder, estuvo lleno de una serie de acuerdos sobre temas vitales para el país.
Sin embargo, la actuación maniquea en los últimos meses del PSOE; muy por el contrario han dado al traste con estos asuntos. Esto podemos verlo claramente con el tema del Sahara Occidental.
La izquierda española siempre apoyando las luchas necesarias, importantes, ha estado de la mano de un pueblo sufriente que ha tenido que movilizarse fuera de su espacio natural para subsistir.
Pero muy por el contrario, las declaraciones y la visita a Marruecos del presidente del gobierno miran en otra dirección.
Y en este punto es importante decir que no sería la primera vez que el PSOE abandona la lucha saharahui. La actuación de Felipe González hace ya casi 50 años, es de antología.
La geopolítica
La guerra entre Rusia y Ucrania ha transformado sensiblemente la geopolítica y con ella sus lógicas. Pedro Sánchez no puede quedarse fuera de esta nueva visión, de esta nueva imagen del mundo que se pretende hacer desde el poder.
El desplazamiento dentro de los bloques de poder a nivel mundial, sus intereses políticos y económicos, son hoy día un elemento decisor fundamental en el tablero político europeo.
La dependencia energética como correlato y la relación histórica que ha tenido la economía española y el gas surtido por Argelia, enemigo acérrimo de Marruecos, ha generado un desequilibrio que podemos asumir como una razón posible para el giro del presidente Sánchez. Sin embargo, estas diferencias visibles alejan a los representantes o a los miembros de la coalición de gobierno.
Tal es el caso de Podemos, partido desde donde los morados han demostrado una posición contraria a la establecida por el presidente de gobierno. Inclusive las últimas declaraciones de Yolanda Díaz ante este movimiento en solitario de Sánchez, hacen notar o hacen visible la fragmentación de la coalición.
Este episodio geoestratégico, atravesado por las ambigüedades salidas desde la Moncloa pudieran desde ya avizorar futuras reconfiguraciones de la izquierda española.
Se fragmenta la coalición
Esto se traduciría en posibles nuevas coaliciones, repensadas, revisadas al calor de estas consideradas tradiciones por los compañeros de la misma acera.
Una de las grandes fortalezas que tiene la izquierda mundial, es su posición a la hora de formular, de implementar la política internacional. Esta, vista desde la izquierda, es una política solidaria con los pueblos oprimidos, es una política que busca la igualdad.
Las declaraciones de Sánchez, van en una dirección contraria y esto obviamente fragmenta su peso político y como decíamos líneas arriba, los errores en política se pagan con la pérdida de espacio vital.
La venideras elecciones en la nación española darían cuenta del estado del tejido político que actualmente conforma la izquierda. Esto, dicho sea de paso, se puede traducir en el plano de la realidad, no sólo en la cantidad de diputados o escaños o el porcentaje que cada partido va a tener en ese espacio decisor; sino también y mirando un poco más adelante, las próximas elecciones presidenciales.