Dejando a un lado la competición que parece haber en redes sociales como Twitter sobre quién es más merecedor de la “medalla” al mejor luchador contra el sistema capitalista, hablemos de personas como Greta Thunberg.
Sobre estas líneas voy a tratar el mediático caso de Greta Thunberg, la activista contra el cambio climático de 16 años. De todos es sabido que Greta está diagnosticada de Síndrome de Asperger y, por desgracia y como suele suceder, por ahí comienzan los ataques.
>El Síndrome de Asperger, el síndrome invisible<<
No se puede negar el marketing que existe en torno a ella, de la intencionalidad de algunos de desviar la atención del verdadero problema. Pero tampoco se puede obviar la firme convicción que posee Greta de que el planeta debe ser salvado. ¿Acaso no está en peligro? ¿No merece ser salvado?
Es cierto que el hecho de que consumamos carne no nos convierte en responsables de la destrucción del planeta. El planeta se está muriendo porque el sistema capitalista es un sistema destructivo. Admitida la culpabilidad del sistema, sería interesante admitir otro tipo de culpabilidad es en este caso.
El odio que se ha vertido continuamente sobre Greta en redes es, cuanto menos, significativo de la sociedad apática en la que vivimos. Se ha calificado a la joven de demoníaca, se ha comparado imágenes suyas con otras de la propaganda nazi. Sus tics molestan y son objeto de burlas, incluso se le ha llamado enferma.
It is long beyond the time when @TwitterSupport should have removed the account of @gemmaod1
Here she targets 16 year old Greta Thunberg as a Nazi child. There are no circumstances where freedom of speech can be invoked as a defence in defaming and cruelly targeting kids. pic.twitter.com/VOcMsYNBhm— John O’Brennan (@JohnOBrennan2) April 27, 2019
Pues bien todo esto que se ha vertido en redes, es con lo que los jóvenes con Síndrome de Asperger se encuentran en su día a día. Desprecios, burlas y descalificaciones. ¿Y si nos paramos a pensar en qué siente Greta Thunberg cuando lee todo eso? ¿Por qué ese odio hacia su persona?
Esta sociedad sigue siendo terriblemente cruel con las personas con Síndrome de Asperger. Sigue molestando que no sean como las personas neurotípicas, sigue siendo un síndrome invisible. No, las personas con Asperger no son enfermos, la que está enferma es la sociedad.