Evo Morales es uno de los pocos referentes de izquierdas que quedan en América Latina. Aunque el nuevo milenio comenzó girando a la izquierda, con Hugo Chávez en Venezuela, Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil y Néstor Kirchner en Argentina.
En la actualidad, la situación es muy diferente, Lula da Silva se encuentra en la cárcel; Mauricio Macri gobierna en Argentina -Kirchner falleció- y solo se mantiene la situación en Venezuela, ya que el presidente es Nicolás Maduro -sucesor de Chávez, quién falleció el 5 de marzo de 2013-.
Evo Morales, en cambio, se sigue manteniendo como presidente de Bolivia.
Evo Morales y sus logros para Bolivia
El presidente Evo Morales fue el primer indígena en la historia de Bolivia que consiguió convertirse en presidente del país, el 22 de enero del año 2006. Lleva más de trece años dirigiendo Bolivia y serán otros cinco años los que gobierne si el próximo diciembre sale reelegido.
Desde que Evo Morales consiguiera la presidencia, ha obtenido diversos logros como reducir la pobreza de un 60% de la población al actual porcentaje de 35%. Consiguiendo así que Bolivia goce de estabilidad política y económica.
Los tres puntos fuertes de Evo Morales
- Crecimiento económico e incluyente: la economía bolivariana crece un 4,9% de media al año, según últimos datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Respecto al producto interior bruto -el PIB- en 2018 fue el país sudamericano en el que más aumentó, un 4,2%. Distintos expertos en materias económicas, consideran que Bolivia ha conseguido construir un crecimiento inclusivo, lo que ha permitido mejorar el acceso a distintas oportunidades, como por ejemplo en salud y educación. Los mejores datos en educación se consiguieron con la tasa de analfabetismo, que bajó de un 13,3% a un 2,4% el año pasado. Gracias a programas como “Yo Sí Puedo“. En cuanto a el déficit fiscal, el año pasado alcanzó el 8,1%, el más alto de Sudamérica.
- El Estado y los indígenas: en Bolivia, el 62% de la población era indígena, aún así, el Estado los tenía olvidados. Con la llegada de Evo, consiguieron ser integrados en en la institucionalidad. Así quedó recogido en la Constitución que aprobó en 2009, donde se cambió el nombre de República de Bolivia a Estado Plurinacional de Bolivia. La nueva reforma posibilita a los pueblos indígenas convertirse en territorios con autonomía, de manera subordinada a la Constitución. A esto, hay que sumarle otras medidas como una ley contra el racismo, el aumento de la inversión en educación y en salud para los sectores más vulnerables y una reorganización política -reserva de escaños para promover la presencia de los pueblos originarios en las instituciones-.
- Estabilidad política: la aprobación -con un gran apoyo popular- de la nueva Carta Magna, trajo años de mayor estabilidad política que los anteriores. Ya que la primera etapa de Evo Morales no fue muy tranquilo. Supuso un gran salto respecto a la inclusión social, que el nuevo presidente facilitara la incorporación de sectores indígenas, campesinos y trabajadores de clase media baja a espacios de poder político. Centrarse en las materias primas, trajo lo conocido como “el boom“, esto, promovió el crecimiento económico dándole al país estabilidad social y política.
Evo Morales y el pueblo boliviano
Evo Morales, es una figura que siempre se ha mostrado cercana y empática hacia el pueblo al que representa. Nació en una familia aymara de pastores de llamas y comenzó su activismo como sindicalista cocalero, después dio centró su carrera en la política. Una historia de superación en un país donde subir en la pirámide social aún resulta toda una proeza para un indígena.
Gracias a las políticas nacionalistas, estatistas e indigenistas, Bolivia ha obtenido un crecimiento sin precedentes, ha reducido la pobreza, mejorado sus infraestructuras construyendo carreteras, disfrutado de estabilidad social y política y ha potenciado la participación de los indígenas, de los jóvenes y de las mujeres.
Los que se muestran críticos con Evo Morales, critican y cuestionan que se vaya a mantener la economía y la dependencia del gas, también han criticado las medidas contra el sector privado y denuncian que al querer mantenerse en el poder hasta el 2025, puede poner en riesgo la democracia.
Esas críticas no pueden hacer sombra a los logros que hoy día resultan tan obvios y que demuestran que las políticas aplicadas por el gobierno que dirige Evo Morales son políticas de izquierdas. Y eso es lo que “se juega” Bolivia, seguir con un gobierno de izquierdas con políticas de izquierdas por y para el pueblo, o elegir un gobierno de derechas y dar pasos atrás en los beneficios sociales que el pueblo ha conseguido.