Hace unos días, coincidí con un grupo de personas de diversas culturas e ideologías. Estuvimos hablando sobre muchos temas, entre ellos el feminismo. Escuché atentamente cómo contaban que algunas mujeres pertenecientes al movimiento feminista se sentían incomprendidas por sus hermanas.
No es la primera vez que escucho un comentario así. Me gustaría decir que sí, pero no, no lo es…
Me contaron que una mujer, la cual es de etnia gitana, no podía asistir a una manifestación, ya que tenía que quedarse con sus hijos. A lo que una hermana le respondió “¿y tu marido, qué?“.
>>Me llaman feminazi por reclamar mis derechos<<
Fue en ese momento, cuando mi cabeza empezó a formular preguntas. ¿Es coherente “juzgar” a una hermana sin tener en cuenta su cultura? ¿Podemos reivindicar los mismos derechos sin tener en cuenta la situación de cada país? ¿Estamos siendo poco comprensivas con las hermanas que aún estando bajo el yugo del patriarcado, están más oprimidas por pertenecer a otro colectivo más oprimido aún?
Supongo que para responder a estas preguntas, primero deberíamos ver el recorrido que ha tenido la mujer en la historia.
Históricamente, el rol de la mujer en las diferentes sociedades que han existido, ha sido relegado a la invisibilidad. La propia historia ha sido contada sin tenernos en cuenta. Desde la prehistoria hombres y mujeres hemos tenido un rol cultural particular. Recorriendo un camino lleno de obstáculos, para conseguir el ser madre y nuestra participación en la sociedad. Considerándonos incapaces social y políticamente, dotándonos durante mucho tiempo de los mismos derechos que a los niños.
>>Una crítica marxista al feminismo<<
Y en ese recorrido, encontramos la primera “ola feminista“. A finales del siglo XIX, el objetivo del feminismo era “la igualdad formal entre mujeres y hombres: derecho a voto, acceso a la propiedad privada”. Este movimiento concebía el machismo como ataques a su individualidad y no como un problema social de base.
Más adelante, a principios del siglo XX -entre 1960 y 1990- en plenas guerras mundiales, surgieron varias corrientes en el feminismo, englobados en las corrientes filosóficas -igualdad /diferencia-. A finales de los 90, se dio la última, llegando hasta hoy día, surgieron diferentes identidades de género.
Podríamos resumir nuestro rol en el sometimiento, la explotación moral y en el dominio absoluto.
Pero este recorrido no ha sido el mismo para todas, hemos estado sometidas al pensamiento de cada cultura, el camino ha variado en base a las necesidades y objetivos que han marcado las diferentes sociedades. Encontrándonos hoy en día con demasiados frentes abiertos para llegar a todos de una manera efectiva. Esa puede ser una razón de que existan diferentes tipos de feminismo.
- Feminismo de igualdad. Corriente feminista más primitiva. Parte de la base de que tanto mujeres como hombres, somos seres humanos y como tales, debemos estar en igualdad de condiciones. Acepta la discriminación positiva.
- Feminismo de la diferencia. Tiene como objetivo el desarrollo del feminismo como movimiento social, defendiendo los valores femeninos, opuestos a los masculinos.
- Transfeminismo. Critica que el género se divida en mujeres y hombres, defendiendo la existencia de 31 tipos diferentes de identidades sexuales. Tienen como objetivo principal la libertad sexual de cada individuo.
- Ecofeminismo. Consideran que el ecologismo y el feminismo defienden unos objetivos comunes, por lo que deberían trabajar conjuntamente para acabar con el patriarcado.
- Feminismo radical. Defiende como origen del patriarcado a las instituciones. Considera que el lesbianismo es una manera de que la mujer consiga plena libertad sexual.
Podríamos nombrar más tipos de feminismo. Pero seguirían pareciéndome igual de ineficaces. ¿No existe un tipo de feminismo que cubra todas las necesidades? Quiero decir, entiendo que la lucha de las mujeres sea “diferente” dependiendo de la situación y de las necesidades de cada cultura o sociedad. Entiendo también que cada rama que salga del feminismo luche por causas diferentes a las de las demás, pero el árbol siempre será el mismo, ¿no?
>>Hermanas: “Quién no se mueve no siente las cadenas”<<
Diferentes situaciones culturales, diferentes ideologías políticas y sociales, diversos derechos a defender, enemigos desde varios flancos –machismo, racismo, fascismo…-. Llevan a veces a centrarse en objetivos que con el tiempo deberían adaptarse a las nuevas realidades.
Hoy en día el movimiento feminista está diversificado, por ende, los objetivos deberían aclimatarse a las nuevas necesidades que aunque no sean “nuestras” luchas. No podemos permitir que haya personas que se sientan invisibles a nuestro lado. Porque a fin de cuentas, sabiendo quien es el enemigo, ¿no debería el feminismo ser un movimiento antiracista? ¿Antifascista? ¿Anticapitalista?
Respondiendo a la pregunta que da título a este artículo: uno. Solo concibo un tipo de feminismo, por lo menos efectivo. Sé que el feminismo es adaptable a la época y a las necesidades de la sociedad, porque toda la discriminación que sufrimos, todo tipo de colectivos, tiene un mismo enemigo, aunque este tenga muchos brazos.
Veo el feminismo como una muñeca matrioshka, una misma base -la primera muñeca- sobre la que ir poniendo más objetivos -las demás muñecas-, formando una sola muñeca -el feminismo- más fuerte y completa.