Ecuador ha sido uno de los países más afectados por la selectiva persecución mediática en contra de la línea política de la izquierda, y en especial en contra el expresidente Rafael Correa, sus exfuncionarios y partidarios del gobierno de la Revolución Ciudadana que gobernó Ecuador durante la década 2007-2017.
El portal digital Alternativa recogió en un extenso reportaje de las prácticas periodísticas que utilizan a ciertas figuras de la prensa a favor la línea gubernamental.
El gobierno de Lenin Moreno, según un informe de inteligencia, ha señalado que hay grupos interesados en desinformar con el propósito “de agravar el sentimiento de desconfianza hacia las autoridades ecuatorianas y causar conmoción social”. Dicho informe, fue filtrado por periodistas quienes al difundirlo exclamaron que les había “caído del cielo”.
El primer medio digital en difundir tal información fue “Código Vidrio”, dirigido por el periodista Arturo Torres, un declarado anticorreísta. Posteriormente hizo lo mismo el medio “La Posta” así como otros supuestos periodistas independientes.
No es casualidad que los correístas fueran objeto de señalamientos cuando en el referido informe no revela ningún nombre donde arroje luces de quien generó los bulos, pero aun así, los morenistas muy diligentemente hicieron tales acusaciones. En este sentido cabe preguntarse ¿por qué? y, ¿Para qué?
Casi inmediatamente a la circulación del vídeo difundido por Código Vidrio, Torres anunciaba que “trolls correístas” trataban de hacerle caer a su página web. Posteriormente, cuando presuntamente habían logrado tumbar su portal, “periodistas amigos” lo volvieron a subir en sus espacios de redes sociales. Janet Hinostroza, Anderson Boscán, Luis Vivanco, José Hernández, Martin Pallares, Carlos Vera, Tania Tinoco, y hasta ”Plan V” secundaron las declaraciones de Torres.
Los mismos periodistas que encumbren y atizan desde siempre a la derecha ecuatoriana y ahora hacen lo mismo al gobierno de Lenin Moreno, aunque a veces lo critiquen cuando no actúa en función de sus intereses. Si Moreno se hubiera mantenido con políticas de izquierda o profundizado medidas alterativas, estaría siendo atacado sin tregua por los grandes medios ecuatorianos.
La derecha posee periodistas asalariados los cuales son fáciles de ubicar. Por ejemplo, cuando las élites envían un mensaje para Twitter, postean al mismo tiempo a sus periodistas para que los repliquen. Asimismo, cuando sus periodistas son atacados están listos para defenderlos.
El ataque de los periodistas supuestamente “independientes” también se dirigió directamente contra activistas y periodistas correístas con nombres y apellidos, entre ellos, Jacobo García, Alexis Moncayo y a medios de comunicación como Pichincha Universal, entre otros. Esto negaron ser los creadores y difusores de los “fake news”.
El mismo informe de inteligencia señala que más del 80% de los bulos venían del extranjero, especialmente de México y Venezuela.
Arturo Torres es un periodista identificado con el gobierno de Moreno y un acérrimo anticorreísta. Con sus publicaciones ha reforzado su ataque contra todo elemento relacionado con el expresidente Rafael Correa y sus líneas de pensamiento.
A continuación, se muestran algunas evidencias gráficas de publicaciones realizadas con el fin de atacar al correísmo:
Como la cantidad de las evidencias hace complicado ponerlas todas en la misma publicación, ofrecemos todo el contenido para que cualquiera lo pueda descargar.
Para hacerse con la investigación completa, haga click aquí: Ecuador-prensa.