El referéndum revocatorio, la historia perpetua de la oposición venezolana
El segundo intento de referendum revocatorio presidencial en Venezuela es contra Nicolás Maduro, y lo intenta una oposición tan dividida como desprestigiada.
Nicolás Maduro sigue siendo presidente de Venezuela, la tentativa de un referéndum revocatorio despeja cualquier duda, por una cosa muy sencilla, no se puede revocar a quien no detenta el cargo.
Después de que la oposición venezolana desechó el camino electoral, ahora asiste a elecciones e invoca derechos como el del referéndum revocatorio presidencial, para poner nuevamente en duda, la legitimidad de Nicolás Maduro y del chavismo.
El referéndum revocatorio fue una figura innovadora que Venezuela incluyó en la Constitución de 1999, en aquel entonces, los derechos políticos no comprendían ninguna consulta relacionada con los cargos de elección popular.
Pero Hugo Chávez defendió el derecho de la ciudadanía a pronunciarse sobre la gestión de sus gobernantes, y el referéndum revocatorio no solo es una forma de control sobre la presidencia sino para todos los cargos de elección, como alcaldes, y gobernadores.
El primer intento contra un presidente fue precisamente contra el propio Chávez, en 2004. De este examen, el entonces presidente salió eximido con 59% de la votación, el resto es historia.
Breve historia del revocatorio
Ecuador y Bolivia también lo tienen, pero Venezuela fue primero. El referéndum popular venezolano contiene varios tipos de consulta, entre esas el referéndum revocatorio presidencial.
Cuando la oposición venezolana liderada, en ese momento, por la organización Súmate y la iglesia católica promovieron el primer revocatorio, el procedimiento tuvo que armarse desde cero.
No obstante, la derecha venezolana consiguió las firmas necesarias para convocar a referéndum, Chávez aceptó el reto, sin mostrarse complaciente, pero tampoco derrotado, llamó a sus simpatizantes a reunirse en el Comando de Campaña Maisanta, y la alternativa del “NO” a la salida de Chávez triunfó.
La jornada electoral del 15 de agosto de 2004 duro mucho más de lo previsto, los votantes llegaron a pasar hasta más de 10 horas en cola. El Centro Carter fue uno de los principales observadores de aquel referéndum donde 5,8 millones de venezolanos votaron a favor de mantener a Hugo Chávez como presidente de la República.
Los pasos para el revocatorio
Para revocar el mandato del presidente se requieren igual o más votos que con los cuales le ha sido elegido, la intención es resguardar la democracia, y si la mayoría ya no le quiere, no pueden haber dudas.
La convocatoria se logra con las manifestaciones de voluntad de un mínimo 20% del padrón electoral. Las firmas, son la forma hasta el momento escogida, y en esta ocasión serán recolectadas el 26 de enero, en una jornada de 12 horas.
Se trata de 4,5 millones de firmas para el caso de Nicolás Maduro, ya que el Registro Electoral de Venezuela esta compuesto por más de 20 millones de electores.
De resultar exitosa la convocatoria, el referéndum revocatorio tiene lugar, y Maduro debe medirse en las urnas contra sí mismo, tal y como lo hizo Chávez.
En esta oportunidad, la oposición tendría que reunir más de los 6,2 millones de votos, con los cuales resultó electo Nicolás Maduro, en 2018.
¿Qué sucede sí?
Si Nicolás Maduro es revocado como presidente de Venezuela quedan abiertos dos escenarios, de acuerdo a lo previsto en la Constitución de ese país.
En una primera instancia asume el mandato temporalmente la Vicepresidencia de la República, si quedan dos años o menos para finalizar el periodo, lo hará hasta culminar ese periodo presidencial que finaliza en 2024.
Si el revocatorio se concreta a mediados de 2022, la vicepresidencia asume pero solo hasta que se realicen nuevas elecciones, dentro de los 30 días consecutivos a la revocatoria de mandato realizada mediante referéndum popular.
Las posibilidades reales
No es sencillo por varias razones. Además de los severos requisitos que imponen la Constitución y el Consejo Nacional Electoral, está también una oposición que no actúa en unidad y cohesión para conseguir un objetivo como el de revocar a Nicolás Maduro.
El triunfalismo que dejó la elección de Barinas se desvaneció rápidamente. Por otra parte, la oposición sigue sin conseguir reunirse alrededor de un liderazgo sólido imprescindible para lograr la convocatoria a referéndum revocatorio.
Con los requisitos impuestos por el poder electoral, la oposición tendría que echar a andar una maquinaria capaz de conseguir 5 firmas por minuto, en cada uno de los 1200 centros autorizados para el próximo 26 de enero de 2022.
Y nada garantiza que después de revocado Nicolás Maduro sea la derecha la que alcance el poder, si no sabe organizar sus fuerzas.