Ecuador: las 3 cosas que más añoran de Rafael Correa
Seguridad Laboral, Seguridad personal, estabilidad económica y democracia, son esas cosas que añoran los ecuatorianos de la década de Correa.
“Con Correa estábamos mejor”, es una consigna que no toca exclusivamente a los correístas, o a la izquierda. La mayoría social del Ecuador alberga los mejores recuerdos de estabilidad política y social adquiridos en la década en que gobernó Correa y el proyecto Alianza País.
De hecho, Ecuador era un ejemplo de la izquierda que era capaz de generar cifras impresionantes de bienestar social, había incluso, los que pretendían desligar a Ecuador del “mal ejemplo” de Cuba o Venezuela, donde la polarización colocaba en incertidumbre las condiciones económicas y sociales de la población.
Pero desde la traición de Lenin Moreno, y su subordinación al FMI y a la banca, todo cambió. Los indicadores comenzaron a tornarse negativos, las cifras de empleo descendieron, la seguridad personal, la salud pública, y la estabilidad laboral y económica desaparecieron.
Ecuador se endeudó nuevamente, y su aparato público se redujo perjudicando a la población.
Seguridad personal
Es un hecho incuestionable hoy en día. Guayaquil, la segunda ciudad más importante del Ecuador, es una de las 50 ciudades más peligrosas del mundo.
La percepción de inseguridad en Quito, la capital del Ecuador, es del 80%. Los ecuatorianos han sido azotados por delitos como la extorsión, el sicariato, el robo a mano armada y otros hechos de violencia que roban la paz de la mayoría.
En 2011, en pleno gobierno de Rafael Correa, la percepción de inseguridad en todo el territorio era de un 50%, era una cifra importante, pero incomparable con los indicadores que el gobierno de Guillermo Lasso pretende silenciar.
En lo que va de 2022, 162 personas han muerto en hechos de violencia, esto según lo informado por el diario El Universo, medio aliado de la banca en el Ecuador.
Por otra parte, la crisis carcelaria dejó más de 300 fallecidos en 2021. Durante el gobierno de Rafael Correa, el porcentaje de hacinamiento carcelario era del 0,24%, como resultado de un abordaje integral de la gestión carcelaria.
Actualmente, la OEA, a través de la Comisión Interamericana de DDHH, hace fuertes llamados de atención al gobierno de Guillermo Lasso, por la falta de atención a la población privada de libertad, hacinada en niveles del 30%.
Seguridad laboral
El desempleo es una de las realidades que más pesan en la población del Ecuador. Con una tasa de desempleo del 6%, los ecuatorianos sufren dificultades que se consideraban olvidadas durante el gobierno de Rafael Correa.
Según datos del Banco Mundial, en el 2014, el Ecuador tenía una tasa de desempleo del 2,4%. Un nivel muy bajo, y uno de los mejores indicadores a nivel latinoamericano.
Por otra parte, el Producto Interno Bruto del Ecuador llegó a 101 mil millones de dólares, para descender actualmente a 98 mil millones. Si bien el cambio no es drástico, las condiciones de vida de la población revelan otra situación.
Los ecuatorianos vuelven a migrar. Cerca de 400 mil migrantes fueron devueltos desde la frontera de los EEUU.
El alto precio de los combustibles, el alza de los precios en el transporte y los alimentos, coloca en una situación complicada a los ecuatorianos que prefieren ahora, salir de su país.
En el gobierno de Rafael Correa, los ecuatorianos retornaron, y existían políticas como el Fondo Cucayo, y el programa Bienvenidos a Casa, dirigidos a todos lo que retornaron, principalmente, desde España.
Igualmente, la privatización del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, es otra de las políticas de Guillermo Lasso, que generan incertidumbre en la población trabajadora del Ecuador.
Estabilidad económica y democracia
Es cierto, las condiciones económicas en el mundo eran diferentes, no había pandemia, ni una guerra de repercusiones globales, pero no todo se concentraba en beneficiar solo a las elites.
El PIB ecuatoriano era alto y el endeudamiento manejable. El Banco Mundial afirma que Ecuador era un país de ingreso mediano o alto, y los índices de pobreza llegaron a su punto más bajo entre 2016 y 2017.
Durante el gobierno de Guillermo Lasso, el nivel de pobreza supera el 30%, y el deterioro de la calidad de vida se acelera con las consecuencias económicas de la pandemia, y el fracaso aparente de las políticas neoliberales del Partido CREO.
Las leyes que Guillermo Lasso impulsa, tienen como objetivo superar el endeudamiento que Lenin Moreno creó para llevar a niveles difíciles de manejar, y nada frena la caída económica del Ecuador.
No obstante, lo que más añoran los ecuatorianos de Rafael Correa, es la calidad democrática de un gobierno que permitió el control ciudadano, y que no quiso acaparar el poder, al punto de permitir que la alternabilidad, le abriera paso a la traición y a la debacle de la Revolución Ciudadana.