Lasso: ¿Por qué ignorar el clamor de tu pueblo?
El paro nacional emerge de las contradicciones que se vienen dando en Ecuador, producto de las políticas neoliberales del banquero Guillermo Lasso.
Nos encontramos en el décimo sexto día de paro nacional. Las movilizaciones han sido lideradas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE). Miles de manifestantes han salido a las calles a nivel nacional a protestar por las condiciones sociales que vivimos en el país.
Durante estos últimos cinco años sufrimos una crisis e inestabilidad social. El desempleo y la pobreza ha aumentado. Según el INEC solo dos de cada 10 personas tienen un empleo adecuado.
Me pregunto: ¿Sentirán indignación los POLÍTICOS que tenemos y en primer lugar el que funge como presidente Guillermo Lasso, si solo el 30% de los ecuatorianos sobrevive con menos de 2 dólares? ¿Quién puede vivir así?
La desigualdad social sigue siendo el mayor problema en este país, ¿Qué sucede con esas familias que no tienen ni para comer?, ¿Qué pasa con esos ciudadanos que no consiguen trabajo durante años y solo acceden a oficios temporales?, ¿Qué decir de aquellas niñas, niños, jóvenes que no pueden acceder a la salud, educación y techo digno?
Marchar es reivindicar nuestros derechos. Cientos de familias valientes vienen de otras provincias a Quito. Permanecen horas sin comer, con frío y cansancio. La solidaridad de los hermanos ecuatorianos que colaboran con alimentos, medicina, ropa y cobijas, es lo único que los acompaña.
La firme esperanza es tener mejores días para todos. María, una mujer de aproximadamente 45 años, del pueblo de Chibuelo perteneciente a la provincia de Tungurahua mientras caminaba con su bebé en la espalda me dijo: “No solo luchamos por nuestros derechos, sino por el de nuestros hijos, por ustedes y sus hijos también”. Gran lección de unión y solidaridad que nuestros hermanos indígenas nos enseñan.
Las instituciones públicas y sus servicios están desprestigiados, caotizados, deslegitimados como estrategia para privatizarlos. ¿Acaso Lasso quiere privatizar el Ecuador?
Para sacar una cita en el Registro Civil hay que esperar cinco meses y más, lo que antes se hacía en tres horas, “no hay especies dicen”.
Y en la Agencia Nacional de Tránsito (ANT), el mismo escenario. Multas por doquier sin sentido alguno; los agentes metropolitanos se pasaban en las calles coimando abiertamente.
Y si alguien necesita atenderse en algún hospital público, pues hay que esperar nueve meses y más. La salud y sus servicios a merced de corruptelas.
Y para que nos les quede duda, el precio de la canasta básica hasta mayo 2022 según el INEC, está en $735, 15. sin trabajo y sin ingresos cómo se puede subsistir.
Si hacemos un análisis corto, antes del paro estábamos sumidos en una violencia social sin precedentes, robos y muertos a diario. Los mismos medios de comunicación tradicionales lo evidenciaban.
Hace un año y más con varios compañeros periodistas y académicos publicamos un libro que recogía varios criterios sobre, “el peor presidente de la historia”, refiriéndonos a Lenin Moreno; en el que advertíamos que la continuación de ese modelo neoliberal era Lasso; y no nos equivocamos.
Hoy por hoy no tenemos paz, quien podría tener con tanta pobreza, corrupción, violencia, desempleo, injusticia e inequidad social.
¡La indiferencia conduce al abismo al Ecuador!