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La campaña viral: ¡Todas a la playa!

Igualdad lanzó una campaña que no tardó en viralizarse y que motiva a todas las mujeres a abrazar la diversidad de su cuerpo.

El Ministerio de Igualdad vuelve a ser el centro de atención debido a su más reciente campaña, la cual comparte el lema de El verano es nuestro”. En ella defiende la diversidad de los cuerpos en las playas, reflejando una situación que enfrentan las mujeres que no cumplen con los cánones “apropiados o válidos” según la sociedad española.

En la campaña, que desató una reacción viral, muestra una imagen en la playa de cinco mujeres de distintas razas, diferentes tallas y alguna mastectomía, con la premisa de “todos los cuerpos son válidos y tenemos derecho a disfrutar de la vida como somos, sin culpa ni vergüenza. El verano es para todas“, ha escrito la ministra Irene Montero.

Ah, que esto dio pie a críticas y burlas es otra cosa. Ha llegado a ser tendencia con el hastag “Gracias, Irene” en Twitter, llenando la plataforma con diferentes comentarios —algunos machismos rancios, otros no tanto— que ciertamente dieron en el clavo: ponerlo en el tema de conversación porque es una situación frecuente en la vida de las personas.

Y no solo en España, sino en todo el mundo, la cuestión es que las sociedades tienden a variar bastante y algunas son más recurrentes que otras, pero en la mayoría permanecen bien arraigadas esta clase de respuestas.

Los cánones y estereotipos ideales

La Directora del Instituto de las Mujeres, Antonia Morillas, ha denunciado que existen múltiples discriminaciones corporales que están “atravesadas por los estereotipos de género“, y también que “se proyectan expectativas corporales en las mujeres que no solo influyen en nuestra autoestima, sino que niegan derechos y condicionan la manera de estar y disfrutar el espacio público“.

Afirmación que es completamente cierta, ya que diariamente el testimonio de muchas mujeres es compartido y coinciden en que reciben señalamientos sobre su fisionomía. Porque muchas son llamadas “gordas” de una manera despectiva, y son objeto de burlas en público porque no tienen cuerpos normativos o socialmente aceptados.

No se trata de que las gordas vayan a la playa con la nueva campaña de Montero, sino que esta es una acción comunicacional que incentiva la igualdad, la no discriminación, y así hacer ver que la diversidad no es algo malo. En definitiva, que todas las féminas puedan irse de vacaciones porque se sienten seguras de sí mismas.

Todos los cuerpos son válidos, así que debemos fomentar la ruptura de los estereotipos y reivindicar la diversidad de una forma en que las personas comprendan que no pueden opinar sobre el cuerpo ajeno. Tu cuerpo es tuyo para respetarlo, amarlo y aceptarlo.

Otra perspectiva de los mensajes que han sido enviados en las últimas horas son de aquellos usuarios que reprochan el “malgasto de fondos públicos en campañas absurdas como esas”. Por supuesto, porque el tema de la igualdad e inclusión les parece algo banal. De hecho, muchos de ellos tienen posturas inclinadas a eliminar este Ministerio.

Asimismo, las instituciones deben dedicar una parte de su presupuesto para difundir ideas de una forma creativa, que sea empática y conecte con los ciudadanos, para que así pueda haber esa motivación a mejorar la sociedad, atendiendo a la propuesta que sea planteada.

Y por supuesto, eso se resuelve con ejemplos como este, que se ve expuesto ante discusiones de medios de comunicación, otros políticos, menciones en la prensa extranjera y hasta por los mismos españoles. De ellos, algunos más “conservadores”, desaprobaron la manera en cómo se presentó.

A ver, si revisamos la historia, los triunfos históricos para beneficio de grupos sociales necesitaron de luchas, reivindicaciones, cambiar el status-quo, romper lo establecido, ser rebeldes y han sido caracterizados por inspirar una “revolución”. Algo que siempre fue y es criticado, tachado de innecesario y así otras denominaciones más.

Pero es parte del ciclo de las sociedades, que siempre persiguen el bienestar de todos sus miembros y la cohesión entre sus intereses para alcanzarlos. Así que no es la primera, ni será la última vez que vean campañas del Ministerio de Igualdad que les provoque arcadas y los haga responder cosas machistas, retrógradas, etc.

Es así como el mensaje está calando en todas las mujeres. Una sensación de aceptación colectiva se está moviendo con el objetivo de visibilizar los cuerpos diversos, comprender que existe el body positive, entender que no tenemos que amoldarnos a las expectativas de otros individuos y que todas las mujeres puedan usar un bikini sin sentirse juzgadas.

¡A la playa, amigas!