Wall-E: Un mensaje esperanzador
A pesar de su antigüedad, el mensaje que nos deja Wall-E continúa siendo de impacto: hay esperanza y se puede luchar.
Pixar nos ha dado verdaderas joyas del cine animado, las cuales deben analizarse más allá de las sencillas interacciones que vemos entre los personajes y las armoniosas paletas de colores. Por supuesto, no podemos omitir las bandas sonoras complementarias. Pero, en este artículo nos concentraremos en uno muy particular que, a pesar de haber salido hace tiempo, sigue con una premisa vigente: Wall-E.
No lo voy a negar, recuerdo haber visto la película cuando era pequeña y no me resultaba muy llamativa. Quizás porque los protagonistas (los robots Wall-E y Eva) no hablaban, ya que estaban limitados en cuanto a lenguaje y solo contaban con algunos sonidos medianamente distinguibles.
Puede ser también por el hecho de que no me gustaba la ciencia ficción, hasta que fui creciendo y pude comprender el mensaje que te extiende esta cinta, que es fundamental para las nuevas generaciones en formación.
Ahora bien, Wall-E se convirtió en una de las películas más exitosas de Pixar y en una de las cintas animadas más recordadas de los últimos tiempos, superando a la franquicia de Toy Story.
Lo cierto es que la historia de este robot que compacta basura, provocó un gran impacto en los espectadores. Con él surgirían importantes ideas con el objetivo de concienciar sobre el medioambiente y nuestra relación con el mismo.
Fue estrenada el 27 de junio de 2008 y se llevó el premio a la mejor película de animación en los Óscar de 2009. Además, ha sido reseñada como un mensaje de alerta hacia la humanidad y una invitación a preocuparnos por la salud de nuestro planeta.
Hay esperanza, pero ¿qué debemos hacer?
Es un escenario bastante distópico el que nos muestra: rascacielos de basura, ninguna señal de vida, escombros, etc. Sin embargo, en medio de todo ello vemos a Wall-E, el pequeño robot que se encarga de recoger y compactar la basura que encuentra.
Pero en esa primera parte no nos comentan explícitamente qué sucedió en la tierra, hasta que poco a poco te presentan los hechos contundentes: los humanos se vieron forzados a abandonarla porque era imposible habitar en ella debido a la contaminación.
A su vez, nos muestra de una forma cruda y realista los posibles graves efectos del cambio climático y el calentamiento global que se calculaban para la fecha. En 2008, las diferentes sociedades todavía no tenían mayor responsabilidad y conciencia sobre las consecuencias de sus actos.
Por otro lado, están las personas que viven en una especie de nave que transita por el espacio exterior, las cuales tienen sobrepeso. No se pueden levantar de sus sillas, aprietan botones para todos sus requerimientos, se dirigen a otros sin ningún contacto físico y han olvidado todos la historia y valores de la humanidad.
También se encuentran dominados por la tecnología, dependiendo completamente de ella hasta el punto de tener máquinas encargadas para todo tipo de tarea.
Wall-E, EVA y la planta
Cuando ambos robots tienen su primera interacción, inician la travesía al tratar de preservar la vida de una pequeña planta que encuentran en la Tierra. Esta representa la esperanza de recuperar el planeta, ya que a pesar de todos los años que transcurrieron, se puede pensar en esa oportunidad. En la escena final de la película, el capitán de la nave enseña esa planta.
Esto nos insta a reflexionar sobre la sostenibilidad de nuestros ecosistemas. También debemos incluir la importancia de la difusión de valores y proyectos que estén enfocados a dar soluciones en beneficio de todas las personas, para que puedan gozar de un ambiente adecuado y que permita su desarrollo integral.
Es por ello que, estos personajes nos ponen de manifiesto el impacto que tiene la preservación de la vida y la conservación de los recursos. También la utilización de los mismos que sean renovables, ya que es necesario el balance entre los valores humanos, el uso de la tecnología y nuestra acción, para contener el cambio climático, la contaminación y el agotamiento de los recursos disponibles.