Creando más líderes democráticos

Existen buenos y malos líderes. Basta con echarle un vistazo a la historia, para elaborar una pequeña clasificación entre las diferentes personalidades que tuvieron impacto en las masas. Desde Lenin hasta Franco, hay una variedad que es necesario conocer para definirnos a nosotros mismos. En esta ocasión, hablamos del lado democrático.

El liderazgo democrático

Ahora, el liderazgo democrático, que es la contraparte del autoritario, también es conocido por muchas organizaciones como “participativo”, porque es un estilo que permite crear mayor compromiso.

Este compromiso es el que asumen las personas con la estructura a la que pertenecen y dan forma, las cuales pueden ser empresas, gobiernos, instituciones, etcétera. Tienen un mayor protagonismo y se centran en potenciarlos para obtener un óptimo desarrollo tanto personal como profesional.

Incluye la toma de decisiones, delegación de autoridad, utilización de retroalimentación como un medio para dirigir y corregir errores, comunicación multidireccional, y más. Y estos son elementos que fácilmente podemos distinguir en figuras como John F. Kennedy, Martin Luther King o Harold Wilson, entre otros.

La democracia se basa en el consentimiento de las personas para que otros los represente, y por consiguiente, lidere.

Pero antes de continuar, podemos señalar que la palabra democracia significa “gobierno del pueblo”. Para ello debemos remontarnos a la Antigua Grecia, cuando empezaron a manifestarse los primeros atisbos de gobiernos democráticos.

Y sí, nada comparado con los que tenemos ahora, que incluyen sistemas paritarios, equitativos e inclusivos.

Por otro lado, algunos insisten en que el liderazgo democrático implica conocer la opinión de todos los miembros del equipo antes de tomar una decisión. Esto es similar a votar sobre las políticas que deseas que tu gobierno promulgue.

Un aspecto muy curioso, es que como tiene estrecha relación con la palabra gobierno, esta también puede entretejerse, ya que proviene de la palabra griega “kubernao” que significa “pilotar un barco” o “capitán de un barco”.

Es decir, donde hay un capitán (líder) que comanda en un barco (país, empresa, institución, etc) y que necesita de una tripulación para llegar a destino (miembros, colaboradores, participantes).

Esencia del demócrata

Muy bien suelen decir que para vivir en democracia, entendida en diversos ámbitos de la sociedad, se necesitan formar demócratas. Al mismo tiempo, es importante promover el respeto, la comunicación y tener presente que los equipos son fundamentales para lograr objetivos.

Asimismo, la innovación, la tecnología y la globalización, nos han expuesto a numerosos retos que debemos vencer de manera rápida y eficaz. Ello implica la suma de todas las inteligencias —el líder y sus colaboradores—, para dar respuesta a las situaciones en el menor tiempo posible.

Por supuesto, conlleva que los líderes se esfuercen en fomentar y motivar a los integrantes. Obviamente, para que participen y aporten soluciones a los diferentes desafíos, así como también se entienda que las perspectivas son escuchadas, tomadas en cuenta sin juicio, y que las respuestas serán emitidas de la mejor forma.

De esta manera, los colaboradores pueden empaparse en la misión y visión del equipo, ocuparse de varias tareas y responsabilidades de manera simultánea. De esta manera, se pueden aumentar los niveles de productividad porque existe la motivación de que son valorados.

Por supuesto, para llevar a cabo este proceso, es imprescindible que haya madurez y conocimientos base, tanto en los contextos como en los temas que se manejen.

Rasgos de los líderes democráticos 

Si bien este estilo de liderazgo debería ser puesto en práctica por la mayoría de los políticos en ejercicio de funciones públicas, esto no es una “regla” táctica. Así que podemos señalar algunos rasgos que te ayudarán a saber si encajas en este estilo.

• Los líderes democráticos motivan y empoderan a su equipo, para que tengan una mayor autonomía y capacidad de decisión.
• Reconocen en privado o en público, todas y cada una de las aportaciones que realizan los miembros del equipo.
• Implementan la comunicación bidireccional, del líder al colaborador y del colaborador al líder. La información es compartida entre los diferentes colaboradores y se articula de manera de que llegue a todos los receptores.
• Fomenta la comunicación asertiva entre los diferentes integrantes del equipo, estando muy presente cuando se den determinados conflictos, para que puedan gestionarse de manera rápida y eficiente.
• Este líder consigue innovar, porque los miembros de su equipo tienen la libertad de exponer diferentes puntos de vista que ayudan a mejorar cualquier aspecto que se esté discutiendo.