Intelectuales con Yolanda Díaz
Como ya hicimos anteriormente, vamos a hablar un poco de los integrantes del nuevo equipo que darán forma al proyecto de Yolanda Díaz, Sumar. Eso sí, los conoceremos poco a poco.
Siguiendo con la tarea que nos hemos trazado desde El Estado.net, a saber, la de ir conociendo a cada uno de los 35 compañeros de fórmula de la vicepresidenta Yolanda Díaz, en esta entrega nos dedicaremos a recorrer algunos ángulos de la vida del escritor Bernardo Atxaga y la activista Yayo Herrero.
Bernardo Atxaga, a Cultura
De Bernardo Atxaga debemos decir que tiene 70 años y será responsable del área de Cultura.
La mirada acuciosa del escritor, permite entender desde la poesía y las letras, ideas y razones importantes que pudieran pasarse como desapercibidas por el ojo del político. Escribir, y sobre todo desde donde se asoma Atxaga, nos regala un viaje a través de la sentimentalidad convertida en sentencia.
Para este escritor, comprometido con la España ávida de saber sobre el conflicto con ETA, sus reflexiones han tocado en tres libros: El hombre solo (1994), Esos cielos (1996) y El hijo del acordeonista (2003).
Sin embargo, para Bernardo Atxaga, este bautismo de fuego ya acabó y esto le ha permitido andar por otros derroteros.
“A veces la realidad, como pasa ahora con Ucrania, es una avalancha y no puedes evitarla. Si uno se escapa de ella no es escritor. Pero una vez que el problema desaparece, me siento liberado. No tengo que escribir más de ese asunto”, dice Bernardo.
Asegura que “estoy más cómodo narrando desde el más allá que desde el más acá. Jamás escribí tan sosegado, tranquilo y divertido”.
Su pluma y pensamiento, serán parte de esa luz que ha decidido entregar a España la gallega Yolanda Díaz.
Yayo Herrero para Bienestar y Derechos Sociales
Por su parte, Yayo Herrero es una mujer de 57 años venida de las filas de la educación y el ecofeminismo. Será la responsable del área de Bienestar y Derechos Sociales.
Sus trabajos investigativos han buscado desandar la trama destructiva del capitalismo. En este sentido, ha expresado que “el gran reto es generar diferentes formas comunitarias en unas culturas absolutamente individuales”.
En su libro Los cinco elementos, nos habla claramente de la relación del ser humano con la naturaleza, y lo torpe que esta es en ocasiones.
Ante esta realidad plantea “creo que tenemos un problema claro de analfabetismo ecológico. Además, curiosamente a veces, cuanto más especializada está la persona, cuanto más profunda es la formación, más profundo es también ese analfabetismo. Se trata de un analfabetismo que, fundamentalmente, nos hace incapaces de comprender sobre qué pilares descansa la vida: la de los seres humanos y la vida en general. Así, nos convierte en personas absolutamente ciegas a la hora de percibir los cambios y los deterioros que se producen y que nos ponen en riesgo”.
Con estas palabras, Herrero nos brinda un boceto de lo que serán objetivos concretos de su lucha.