Las protestas en el Perú de hoy

En el Perú, las protestas no han cesado, y parece que no van a cesar de la noche a la mañana. Además, están adquiriendo un papel fundamental, pues no hay que olvidar que está en juego el futuro del país.

Cientos de manifestantes se han volcado en las calles con un objetivo común: el retorno del presidente Pedro Castillo. Esto como punto fundamental, pues también exigen la convocatoria a una constituyente y la visibilización de las contradicciones que guarda dentro de sí la actual Constitución fujimorista.

Los medios y la gente

Desde hace meses, los medios de comunicación han colocado como centro de gravedad al presidente de la república peruana. Eso sí, desde una perspectiva negativa, racista y violenta.

Esto ha sido presenciado por todo el país. Sin embargo, sus ciudadanos, que están acostumbrados al escenario inestable de este territorio, no acompañan en su totalidad el ataque brutal y sostenido de los medios conservadores.

Lo primero que debe sacarse en claro es que, el objetivo de los grandes medios, no ha dado sus frutos dentro de los movimientos campesinos indígenas y el magisterio.

Es por ello que, este tejido orgánico construido desde y por la base social peruana sin ningún tipo de mediación de carácter crematístico, ha logrado generar un movimiento popular surgido principalmente desde las regiones periféricas. Estas han conseguido hacer voltear la vista del globo.

Lo geográfico

Es importante mostrar que la mayoría de estas movilizaciones, protestas, cortes de ruta, incendio de neumáticos, enfrentamientos contra la policía y lamentables pérdidas humanas, no responden a un carácter improvisado.

Como puede apreciarse, estas movilizaciones y protestas, que como dato curioso vamos a encontrar en la mayoría de los casos fuera de la capital, están moviéndose de manera orgánica y agrupándose hacía el centro del poder político.

Estas columnas de personas deben caminar durante varios días para alcanzar su objetivo. Es necesario recordar que Castillo gana con el voto regional, no con el de Lima. Es por ello que los focos de violencia están diseminados por todo el mapa peruano.

Otro dato interesante con relación a la arquitectura social del Perú, es que a pesar de poseer un sistema político convulso y volátil, su base económica posee una mayor estabilidad.

Esto le ha permitido desarrollar y madurar agrupaciones populares muy organizadas y con un alto nivel de comunicación y ensamble.

Es por ello que las protestas están representadas por la clase trabajadora, y poseen esa fuerza aglutinadora que ha permitido mantener presencia dentro de la agenda nacional y regional.

La inestabilidad como protagonista

A pesar del gran número de mociones de censura, las sufridas por el Gobierno de Pedro Castillo, que han de las más prolijas, no han tenido el efecto debilitante que hubiesen querido tener. No solo por parte de los medios, sino también por los sectores poderosos de las élites del país.

Los próximos días serán muy importantes para el destino político del Perú y su pueblo. La actual presidenta por sucesión, Dina Boluarte, deberá jugar un papel que bien pudiera ir en su contra.

Aún debe esperarse por un mayor asentamiento en todo lo que ocurre. Sin embargo, las movilizaciones seguirán siendo foco fundamental del camino a definir. Al fin y al cabo, el destino del país seguirá estando en manos de su pueblo.