La semana pasada el gobierno de España le deslizó a Leopoldo López la idea de que se fugase a la nación ibérica, con su ayuda. El político preso venezolano no se lo pensó dos veces y así lo hizo.
El presidente de Venezuela Nicolás Maduro, en respuesta, expulsó al embajador de España en Venezuela, y el ejecutivo de Pedro Sánchez reaccionó avisando que no elegiría un sustituto, y de paso, recordando que no considera a Maduro como el presidente de la nación suramericana, pese a que el mismo ha sido reconocido por la oposición en el diálogo que han mantenido para celebrar las próximas elecciones legislativas.
Si la propia derecha de Venezuela ha reconocido a Nicolás Maduro, sorprende que el gobierno progresista español no. La Responsable de América Latina del PCE, fuerza política que forma parte del ejecutivo del presidente Sánchez, Marta Martín explica que “Venezuela está sufriendo una gran presión y un fuerte chantaje diplomático. En esa estrategia de Estados Unidos está sumida de una forma secundaria la Unión Europea“.
Las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre son totalmente legales y se celebran en cumplimiento de la Constitución de la República Bolivariana. Venezuela es un país soberano y como tal España y el resto de países miembros deben respetar su soberanía y la legitimidad de las leyes e instituciones del país. Marta Martín.
Eso explica que “parte del Gobierno de España sigue esta línea estratégica, como estado miembro de la UE, por eso desde el PCE debemos seguir trabajando para cambiar esa postura“, asevera.
De hecho, va a suceder en estas elecciones un hecho que no acontecía en la actualidad venezolana desde el año 2015, todos los partidos de la oposición venezolana, incluso Primero Justicia (fundado por Leopoldo López) y Voluntad Popular (en el que militan Leopoldo López y Juan Guaidó) van a participar.
Cuesta, por tanto, entender la oposición de España a respaldar la contienda electoral, más cuando el presidente Nicolás Maduro ha invitado a Observadores Internacionales de la propia Unión Europea, “tiene que ver con lo que me refería anteriormente. Entiendo que la postura adoptada por parte del Gobierno de España es la de mantener la posición que de momento ha expresado la UE“, asevera Marta Martín.
Para la dirigente del espacio de Unidas Podemos, “las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre son totalmente legales y se celebran en cumplimiento de la Constitución de la República Bolivariana. Venezuela es un país soberano y como tal España y el resto de países miembros deben respetar su soberanía y la legitimidad de las leyes e instituciones del país“.
Sostener la postura de España con respecto a la nación suramericana supone un “acoso” que “perjudica gravemente al pueblo venezolano“, según el análisis de Marta Martín, quién profundiza en que “mantener una postura negacionista acerca de unos comicios que se celebrarán dentro de los cauces democráticos y de acuerdo a las leyes electorales del país no es una decisión acertada“.
La política sostiene que “hay que seguir exigiendo a la Unión Europea y a Estados Unidos el cese de su deshonesta política de acoso al gobierno venezolano. Hay que seguir trabajando para reconducir las relaciones entre España y Venezuela. La Unión Europea y sus estados miembros, como España, deberían tener su propia política exterior y dejar de someterse a la política exterior criminal de Estados Unidos“.