Monarquía o República: el dilema de los españoles
Alrededor del 40% de los españoles consideran que la restauración de la monarquía tras la muerte de Franco fue un hecho negativo para España.
El pasado 14 de abril se cumplieron 90 años de la proclamación de la Segunda República, cuya vigencia se extendió hasta el 1 de julio de 1939 con la finalización de la Guerra Civil y la victoria de los sublevados.
Aquellos que se habían alzado a través de un golpe de Estado contra el legítimo Gobierno de España unos años antes, el 18 de julio de 1936, e instauraron después una dictadura.
No obstante, durante los últimos años, el debate que sigue vivo entorno a los eventos históricos ocurridos en el país, llegándose a plantear cual hubiese sido el mejor sistema de gobierno.
Los éxitos y fracasos de aquella experiencia permanecen vigentes, como sobre la posibilidad de que España se pudiera convertir en una República y dejara de ser la monarquía parlamentaria bajo la Constitución de 1978.
En la actualidad, esa opinión se divide entre los mismos ciudadanos, quienes quieren sistema republicano o aquellos que defienden mantener la monarquía.
A raíz de esta opinión, desde hace varios años, ha crecido un sentimiento en contra de la institución debido, principalmente, a escándalos financieros en los que se ha visto involucrado el rey Juan Carlos I, padre del actual monarca.
Por ende, se habla de una sociedad en conflicto por el sistema de Gobierno.
El impacto que los escándalos han tenido en la monarquía española llevaron al rey emérito a abandonar el país y a autoexiliarse en los Emiratos Árabes Unidos.
Pero su salida de España parece no ser suficiente para una importante parte de los ciudadanos, que desea poner fin completamente al sistema monárquico.
Una encuesta elaborada por un grupo de medios independientes reveló que un 40,9% de los españoles apoyaría la abolición de la monarquía en el país. Sin embargo, llevar a cabo el deseo de una parte de la población no es sencillo. A su vez, es importante recordar que Juan Carlos I fue designado por el dictador Franco.
Por tanto, asumió un importante papel como líder de la transición democrática en el país tras la muerte de dicho personaje. Además, para dar fin a la monarquía en el país mediterráneo, también haría falta cambiar la Constitución.
Lo cual sería un proceso sumamente delicado tomando en consideración la separación entre los mismos partidos y la falta de consenso entre las fuerzas políticas.
De ahí que no es una sorpresa para nadie que Sánchez, junto al PSOE y el PP, quienes protagonizan el bipartidismo español, hayan frenado las expectativas sobre la confección incluso de una ley sobre la Corona.
Una demanda desde hace tiempo de formaciones como Podemos o Más País.
Lo que dicen las encuestas
El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), no pregunta a los españoles su opinión sobre la monarquía desde abril de 2015, un año después de la abdicación de Juan Carlos I como consecuencia de los sucesivos escándalos en los que se vio envuelto.
Antes –a partir de 1994– había pedido en quince ocasiones a los encuestados que calificaran del 1 al 10 la confianza que tenían en la Corona. Esta fue descendiendo desde el notable inicial hasta el suspenso de las últimas cuatro ocasiones, con un mínimo del 3,68 en 2013.
Por ello, el gabinete demoscópico Sináptica realizó una amplia encuesta online, según la cual el rechazo de la población hacia la monarquía se ha acentuado durante la pandemia y casi el 52% de los ciudadanos dicen preferir que España sea una república.
Aún son más (el 58,2%) los que creen necesaria la celebración de un referéndum para decidir la forma de Estado. Ese sentimiento se acentúa entre los jóvenes, pero es transversal entre sexos, franjas de edad y ubicación.
La falta de confianza en la Jefatura del Estado queda también patente cuando se pregunta a los encuestados, si la restauración de la monarquía tras el franquismo fue algo positivo o negativo para España.
En el presente, alrededor del 40% de los españoles consideran que la restauración de la monarquía tras la muerte de Franco fue un hecho negativo para España.
De esta manera, deja un panorama bastante turbulento ante los políticos que decidan postularse a presidir La Moncloa.
Entre las que más destacan está Yolanda Díaz, pese a no haber oficializado su candidatura todavía, ya que es encabeza la lista de líderes con la mejor valoración en las encuestas.
La vicepresidenta tiene un importante reto, como lo es promover la implementación del sistema republicano plenamente democrático.
Y se tomen en cuenta factores como la igualdad y equidad entre los ciudadanos, independientemente del género, cambiar el estamento, dando prioridad a una agenda inclusiva.