La rebelión de los señoros contra Yolanda Díaz
José Bono y Rodríguez Ibarra han arremetido contra Yolanda Díaz, sin fundamentos y con poca moral para señalar. Sin embargo muchos reconocen los avances desde su llegada.
Para nadie es un secreto que la política mejor valorada es Yolanda Díaz, quien comienza a ocupar cada vez más espacios debido a su conexión con la sociedad civil. Así como ha generado gran apoyo y un buen recibimiento de numerosos líderes del escenario político español, surgieron algunas voces de “señoros” que arremeten en su contra.
También resulta importante destacar que es sin fundamento, puesto que las figuras de José Bono, exministro de Defensa y Juan Carlos Rodríguez Ibarra, expresidente de la Junta de Extremadura, están implicadas en actos de corrupción.
En el caso del exministro de Defensa, hay varias acusaciones en su contra que lo relacionan con escándalos urbanísticos como el de Seseña y el de Estepona. José Bono estuvo al tanto de la trama urbanística que alcanzó los 12 millones de euros. Mientras que Rodríguez Ibarra estuvo acusado de calumnias e injurias o desacato en medio del “caso Filesa“.
Todo esto les ha restado credibilidad al momento de hacer señalamientos y formular un discurso sin fundamento que tiene como objetivo desacreditar el ascenso de la Vicepresidenta. Al mismo tiempo en que estos dos políticos, ambos miembros del PSOE, forman parte de la historia grisácea y decadente de la España atada bajo el yugo de la Constitución del 78.
Es decir, va en contra de todo avance progresista que realice la cúpula gubernamental e intentaron obstaculizar el Gobierno de coalición que actualmente se encuentra en ejercicio de las funciones.
El presentador del programa en el que fue entrevistado Bono, le preguntó directamente sobre las declaraciones sobre Díaz y contestó que “le preocupa más que Pablo Iglesias porque sabe y que por eso es peligrosa”.
Además, afirmó su punto de vista similar al de Rodríguez Ibarra: “Díaz tiene, política y electoralmente, mucho peligro porque es una mujer que se expresa de una manera amable, incluso yo le diría dulce, y además lo hace muy bien“.
Una opinión bastante machista que empezó a ser discutida, y por supuesto, reprochada, considerando que se refería a una política con excelente potencial que tiene un estilo de liderazgo distinto.
No incide en esa categoría negativa de “feroz“, porque es mucho más democrática, auténtica y vela por un principio tan esencial como el consenso que es algo que realmente necesita el país debido a su nivel de polarización.
Por otro lado, Bono no dijo lo mismo de Pablo Iglesias con las siguientes declaraciones: “dejó la Vicepresidencia del Gobierno para parar a la derecha y se fue a Madrid. El desastre no pudo ser más grande”.
Aunque el fundador de Podemos fue una pieza importante para la escalada de la Ministra de Trabajo, no se les puede comparar debido a las diferencias a grandes rasgos en sus personalidades y maneras de gestionar las situaciones.
En segundo lugar, están las palabras de Juan Carlos Rodríguez Ibarra que fueron compartidas esta semana en El Objetivo con Ana Pastor. Si bien Ibarra fue una de las voces socialistas más críticas, reiteró que nunca pactarían “con los comunistas“, porque siempre les va mal.
Además, hizo hincapié en que la figura de Yolanda Díaz es una “comunista declarada“, de la cual se deben cuidar.
Oltra y Errejón se suman a la discusión
Tales argumentos carentes de base parecieron desagradar lo suficiente como para que Mónica Oltra aportara su perspectiva sobre la misma.
La líder de Compromís rompió el silencio con sus palabras tajantes hacia Ibarra: “Parece que el señor Iglesias y que la vicepresidenta Díaz es “esta”. No sé si realmente tengo ganas de comentar esta manera tan despectiva de hablar de este “señoro”, porque si él puede llamar “esta” a la vicepresidenta Díaz, yo al expresidente de la Junta de Extremadura le puedo llamar señoro”.
Oltra, que actualmente funge como Vicepresidenta de la Comunidad Valenciana, destacó que lo expuesto por Ibarra es una manera de menospreciar los logros y atributos de la Ministra.
Por tanto, las tacha de patriarcales, innecesarias y machistas. Asimismo, no hay otra manera de describirlas, ya que en primera instancia se puede notar el resentimiento y la inseguridad en ellas.
Dentro del debate que iniciaron las anteriores críticas, también entró Íñigo Errejón quien aprovechó el escenario para apuntar que las condiciones económicas actuales han retomado una mejoría debido a la participación e ideas de Díaz.
El Diputado recordó al Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que su elección se debió a la promesa de derogar la reforma laboral.
Pero lo más sorprendente fue cuando enfatizó que pese a las discrepancias públicas que existen entre los partidos, se está de acuerdo con que la Ministra de Trabajo ha hecho una buena tarea durante estos meses.