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Desafíos de Yolanda Díaz con el Frente Amplio en Galicia y Andalucía

El "efecto Díaz" no se detiene, pero para construir su Frente Amplio en el panorama nacional necesitará conquistar territorios claves como Andalucía y Galicia, pese a los desafíos que existen.

La Vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, ha empezado a movilizar a distintos sectores de la sociedad española.

Su nuevo “proyecto de país” va dirigido a toda la población, en el que “serán necesarias todas las manos, todas las mentes y todos los corazones“.

De ahí que, la idea de forjar un Frente Amplio, una plataforma alternativa a la izquierda del PSOE que esté unida y fortalecida, ha resucitado después de tanta fragmentación.

En la perspectiva del Ministro de Consumo, Alberto Garzón, el objetivo debe ser “aglutinar” para que esta iniciativa que lidera Díaz pueda concretarse de cara a las próximas elecciones.

Puesto que ante la división y la polarización cada vez se ha hecho más difícil lograr consensos, al igual que tomar decisiones en el contexto gubernamental.

Por otro lado, el Coordinador Federal de IU subrayó la necesidad de incorporar a “otra mucha gente” que quizá todavía no está involucrada en “la redefinición” de un espacio político a la izquierda del PSOE.

Así que no solo puede enfocarse en estrechar lazos con Izquierda Unida, Podemos o los comunes, sino que además sea capaz de atraer a amplios sectores de dicho espectro, superando a la derecha.

No obstante, para conseguir tal propósito, es importante que pueda expandir su efecto en territorios como Andalucía y Galicia, donde el electorado es mucho más fuerte.

El escenario en Galicia, la cuna de Díaz

Para el año 2012, cada formación política competía en la escena por su propia cuenta, de manera separada.

Pero la actual Vicepresidenta utilizó relevantes aristas como la del liderazgo compartido y creó la AGE. Unificando los sectores afines a su ideología y consiguiendo un excelente éxito electoral.

Si bien esto marcó una pauta para los partidos que la conformaban, ellos solo se enfocaban en lo que representaba según los números de las urnas y no tomaron en serio el proyecto como Yolanda Díaz lo hacía.

Esto por supuesto condujo a numerosas luchas internas que a largo plazo derrumbaron todo su esfuerzo.

En el presente, la situación de la izquierda gallega ha visto como surgen direcciones políticas renovadas, por una vez todas las más relevantes (Anova, Podemos, EU) pueden apostar por la confluencia creyendo en ella y sin miedo.

Según declaraciones de militantes locales, las confluencias siguen su camino y en muchos lugares no hay ningún tipo de tensión a pesar de ser concejales de distinta procedencia política.

Las confluencias locales trabajan desde lo local, cada una con su filosofía, su método de trabajo y su nombre (Ferrol en Común, Compostela Aberta, Marea Atlántica, Marea de Vigo, etc) y en general hay entendimiento interno.

No obstante, no hay movilización de parte de la ciudadanía porque fueron espectadores de todas las confrontaciones entre los políticos, así que faltará una idea clara y concisa que los haga conectar otra vez.

Así que es imprescindible hablar de una estrategia de enganche, que capte la atención y el sentir del electorado gallego.

A uno de los entrevistados para la realización de esta investigación se le pidió que nos indicara, desde su óptica como ciudadano con tendencia a la izquierda: ¿por cuáles movimientos debería apostar Yolanda Díaz para alcanzar la unidad?

A lo que apuntó que en Galicia realmente no “hacen falta grandes liderazgos, al menos no en esta fase“, pero sí señaló que es fundamental seguir trabajando para construir poco a poco un proyecto sólido.

De ahí que no se debería entorpecer el proceso ejerciendo presiones con fines electorales o propagandas de los medios de comunicación que pueden desbaratar los avances.

Además, destacó la idea de construir una “confianza mutua” que pueda fortalecer los vínculos.

Pero, la definición de coaliciones no tiene porqué distorsionar la imagen de los partidos, que “pueden y deben tener su espacio y ser respetados en cualquier plataforma unitaria“.

Andalucía, otra arena esencial para Díaz

En el pasado, se constató la fragmentación y la desmovilización del bloque a raíz de la crisis económica del 2008, en la que hubo un repunte de izquierda transformadora y la socialdemocracia que representa el PSOE.

A su vez, este período estuvo lleno de polémicas del gobierno local de la Izquierda Unida y el PSOE, el mismo que actualmente ha tenido un desgaste enorme.

De la misma forma, a nivel de izquierda parlamentaria, hay dos fuerzas políticas que se han separado, Unidas Podemos y Adelante Andalucía, de tipo sindicales y también engloba algunos sectores independentistas.

Aunque la situación de una posible reconciliación es “bastante lejana“, pero sí puede ser viable y materializarse a largo plazo.

Según declaraciones de ciudadanos de dicha entidadno se debería descartar que esto suceda en algún momento“.

Por último, también se encuentra la figura de Teresa Rodríguez, una de las líderes de la izquierda de Andalucía que podría sumarse al Frente Amplio de Yolanda Díaz. Aprovechando dicha plataforma y reformulando la idea de la unidad, beneficiándose y afianzando más su imagen.