Xiomara Castro, la esperanza de un nuevo rumbo para Honduras
Xiomara Castro se convirtió el pasado 28 de noviembre en la primera presidenta que gobernará en la historia de Honduras, además de ser la mandataria más votada.
Desde suelo centroamericano, Honduras vivió el pasado 28 de noviembre una jornada de elecciones presidenciales. Tras el triunfo de Xiomara Castro con el Partido LIBRE, llega a su fin un país gobernado por un sistema de derecha junto a Juan Orlando Hernández.
Para el 2022 una nueva puerta se asoma en América Latina y el Caribe, en búsqueda de retomar alianzas que permitan el bienestar interno y externo en las naciones.
¿Un nuevo camino para Honduras?
Los altos índices de pobreza, la migración masiva, el narcotráfico y la violencia que reina en el país, son tan solo algunas de las realidades con la que deberá enfrentarse Xiomara Castro al asumir la presidencia.
Medios de comunicación dentro y fuera de la región han etiquetado a Xiomara Castro bajo la figura de ser la esposa de Manuel Zelaya. Sin embargo su militancia política va mas allá.
En 2006 renunció a la figura de primera dama, asumiendo responsabilidades con la llamada “Red Solidaria“, un proceso que tras el trabajo conjunto con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y otros organismos internacionales se logró la reducción de la pobreza en el país.
Xiomara Castro se convirtió el pasado 28 de noviembre en la primera presidenta que gobernará en la historia de Honduras, además de ser la mandataria más votada.
El pueblo de Honduras se mantiene en expectativa con el triunfo de Castro, con una ceremonia de juramentación el próximo 27 de enero, donde asumirá de manera formal las riendas del país, en reemplazo de Juan Orlando Hernández.
Sin embargo, a la nueva administración que regirá en Honduras, le espera un complicado escenario con el cual Xiomara Castro ha estado familiarizada tras su trabajo político junto al pueblo.
Tras el derrocamiento de Manuel Zelaya, Xiomara Castro se convirtió en una de las figuras más trascendentales de la oposición en Honduras.
Bajo el gobierno de Juan Orlando Hernández aumentó la persecución y asesinato a líderes políticos. El exilio se convirtió en una de las herramientas de huida para muchos comunicadores que se encontraban ejerciendo sus funciones bajo amenazas del Estado.
Persecución estatal
Uno de los casos que tuvo mayor repercusión para el pueblo de Honduras fue el asesinato de la líder indígena Berta Cáceres, perpetrado el 3 de marzo de 2016. Este crimen representa una de las masacres más atroces ejecutada por los sectores de derecha en Honduras.
Poco se habla en los medios del asesinato de Berta Cáceres y la persecución a sectores opositores en Honduras, cabe destacar que los desaparecidos de las comunidades garífunas tampoco serían un tema de interés para el presidente Juan Orlando Hernández. Pocas fueron las investigaciones publicadas por las autoridades del país.
Un antes y un después en Honduras
Previo a la llegada de Juan Orlando Hernández al poder, el activismo de Xiomara Castro significó un pilar importante para la estabilidad en el país. Bajo un esquema de atención inmediata, los índices de pobreza se redujeron durante el segundo y tercer año del gobierno de Manuel Zelaya.
A través de la “Red Solidaria“, Xiomara Castro destacó como líder política en Honduras, liderazgo que conserva hasta la actualidad y que la llevó a la victoria presidencial el pasado mes de noviembre.
Xiomara Castro ha considerado sus labores como un trabajo honesto en pro del bienestar de los hondureños y hondureñas.
Bajo estos principios, la nueva mandataria deberá seguir la batalla contra el narcotráfico y la delincuencia que reina en Honduras. La nación es una de las más peligrosas en América Latina tras las altas cifras de violencia que se registran día tras día.
Asimismo, los temas migratorios han estado en la palestra sobre el entorno socio político en Honduras.
Miles de ciudadanos y ciudadanas continúan saliendo del país tras la persecución estatal, la falta de empleos y oportunidades, además de los altos números de pobreza.
Muchos de los migrantes, realizan largos trayectos en su mayoría rumbo a México y Estados Unidos buscando una mejor calidad de vida.
En el plano comunicacional, el triunfo de Xiomara Castro representa un alivio para este gremio. Durante los últimos 10 años, han sido asesinados más de 89 comunicadores y periodistas.
Otro de los factores con los que deberá lidiar esta nueva administración es con el tráfico de drogas y el crimen organizado, donde las fuerzas de seguridad estatales han sido cómplices de estos delitos.
Un nuevo rumbo por la integración
El desprendimiento del antiguo gobierno en Honduras ha sido otro de los factores por los que Xiomara Castro apostará bajo su gobierno. Tras obtener la victoria presidencial un ¡Venceremos! salió durante su discurso, donde el mensaje de la unión de los pueblos latinoamericanos salió a relucir.
Con Xiomara Castro como presidenta de Honduras, el país se encamina a regresar a los mecanismos de integración latinoamericana. Los estatutos del Partido LIBRE en Honduras así lo certifican.
Las miradas a esta nación continúan marcadas. Con Xiomara Castro parece abrirse una de las primeras puertas de una nueva unión para los pueblos latinoamericanos y caribeños.