Yolanda Díaz y Andalucía “los ruidos y los silencios de la calle”
En un ejercicio de elegancia y estrategia política, Yolanda Díaz ha decidido hacer pública su posición ante los acontecimientos ocurridos en Andalucía y la tolda morada.
En un ejercicio de elegancia y estrategia política, Yolanda Díaz ha decidido hacer pública su posición ante los acontecimientos ocurridos en Andalucía y la tolda morada.
Ese desmarcaje está obviamente cimbrado por sus futuros planes luego de concluida la contienda andaluza.
Son dos cosas importantes de sopesar, el posible triunfo de su candidata, para eso están ya trabajando; y el cercano proceso de escuchas.
A claras luces, esta escisión también podría responder a ese importante elemento propio de los procesos electorales, que es la imagen de quien porta la responsabilidad de ser candidato.
Hasta ahora, muy bien manejada por sus asesores, la figura de Díaz podría resumirse en pocas palabras como incluyente, sólida y con perspectiva de futuro.
Los espasmos producidos dentro de la coalición, plataforma electoral de Díaz, a consecuencia de un problema con la puntualidad y la disciplina, no deben ser traspolados al resto de los partidos de izquierdas y mucho menos a sus abanderados.
La candidata
“Por Andalucía, con ilusión y a por todas” sería como definían la decisión de apoyar colectivamente a la politóloga y candidata por las izquierdas, Inmaculada Nieto; quien también hará las veces de co legionaria con el proyecto de Díaz.
Las escuchas
El próximo proceso de escuchas es el horizonte de sentido de la vicepresidenta y ministra del trabajo y economía social, Yolanda Díaz.
Es por ello, que es tarea indispensable podar y alinear todos los niveles de poder en conjunción con el programa de gobierno a desarrollar por la facción roja.
Los partidos
Izquierda Unida, Más País, Equo, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz; harán las veces de andamiaje para poder intentar hacer llegar a la candidata Inmaculada Nieto al poder en las elecciones andaluzas.
Estás agrupaciones deberán luchar contra la visión fragmentaria que reflejan desde sí al universo electoral.
La estrategia
Durante los procesos eleccionarios, en la mayoría de los casos, son más importantes las promesas de futuro que los resultados de la gestión implementada.
Si bien es cierto que tener cosas que mostrar desde la gestión de lo publico, es fundamental para lograr sumar y mantener el voto dentro de las estructuras partidistas, lo es más, saber crear un discurso atrayente, potable, y hoy en día inclusivo.
Estas son las premisas que han de servir de guía para los venideros comicios. El trabajo de Yolanda Díaz, ha sido hasta ahora el de cristalizar estos principios.
La finalidad, retornar y retomar las fortalezas desarrolladas por la izquierda y su proyecto en un país como España, con una profunda cultura pensada y vivida por las formaciones izquierdistas que creen en los cambios posibles.
Esta posición política, viene acompañada de elementos subjetivos indispensables para poder transformar lo dado.
La idea fuerza de re centralizar al sujeto como motorizador del cambio, reforzar las alianzas creadas entre el poder instituido y la gente organizada, apalancar el cambio indiscutible del concepto de trabajo en España y crear un puente con las nuevas generaciones, en fin, escuchar los silencios y los ruidos de la calle; son tareas irrenunciables de una izquierda que busque no solo permanecer en el escenario político sino también crear otro mundo posible.
Las elecciones en Andalucía, harán las veces de un parteaguas si se vislumbra la ascensión de la extrema derecha populista como posibilidad terrible.
Qué hacer
Es importante retomar la senda de lo recorrido, mirar los logros y errores vividos por la izquierda y tomar de ellos lo necesario para seguir adelante con las ideas y los hechos. Hacerlo desde lo ecológico, femenino, campesino, obrero, en fin hacerlo.