5 primeras decisiones de Gustavo Petro que rompen con lo establecido

Gustavo Petro ha tomado sus primeras decisiones demostrando asertividad y claridad estratégica.

Su acercamiento a Venezuela, el manejo cauteloso de sus relaciones con los EEUU, así como otras decisiones de alto impacto en el escenario interno, revelan que definitivamente viene dispuesto, bajo su propio criterio, a romper con lo establecido.

A pesar de sus diferencias con Nicolás Maduro, Petro le reconoce como presidente de Venezuela, cambiando de esta forma la política exterior de Colombia en el contexto latinoamericano. Al mismo tiempo, calificó a Juan Guaidó, ficha del gobierno norteamericano, como “inexistente”. Con esto se refiere a la representación del estado venezolano.

Regresa la embajada colombiana a Venezuela

Desde julio de 2022, las relaciones entre Colombia y Venezuela comenzaron progresivamente a restituirse.

El primer acuerdo bilateral incluía como uno de sus principales puntos, el nombramiento de embajadores en Bogotá y Caracas. Esta es una decisión que deja atrás el reconocimiento al “gobierno interino” de Juan Guaidó. Por lo tanto, habla alto y claro sobre quién es el verdadero jefe de dicho país a los ojos de Colombia.

Félix Plasencia, excanciller venezolano, recibió el beneplácito del estado colombiano para convertirse en el máximo representante diplomático de Venezuela ante Colombia. Por Colombia, Armando Benedetti será el embajador en Venezuela, y con estos nombramientos se formaliza el restablecimiento de relaciones entre ambos Estados.

EEUU reaccionó manifestando su respeto a la restauración de las relaciones entre Colombia y Venezuela, una acción que desvirtúa el curso divisionista que tal territorio incentivó hasta llevarla a los puntos más altos de conflictividad. Sirva como ejemplo el episodio del traslado de “ayuda humanitaria” hacia Venezuela a principios de 2019.

Cambio de autoridades militares y nueva doctrina de seguridad

Sin irse por las ramas, Gustavo Petro plantea un cambio en la doctrina de Seguridad de Colombia.

“Nuestra nueva cúpula de fuerza pública. Pasar a la estrategia de la seguridad humana donde cuidar la vida, los derechos y las libertades de las gentes sea lo fundamental”, afirma Gustavo Petro.

Con esta declaración acompañó el nombramiento de Herder Fernán Giraldo Bonilla como nuevo comandante de las Fuerzas Armadas, reemplazando a Luis Fernando Navarro. En el ejército colombiano fue nombrado Luis Mauricio Ospina Gutiérrez, en reemplazo de Eduardo Zapateiro.

Petro mantiene una línea de cero tolerancia a las violaciones de los DDHH y de promoción de la paz. Por ello anunció el retorno de los diálogos de paz en La Habana.

En respuesta a sus acciones, el ejército de Liberación Nacional (ELN) confirmó la entrega de algunos prisioneros de guerra.

Lo que la mediática internacional considera ambicioso, significa el cumplimiento real de las promesas de campaña que hizo Gustavo Petro, y el ejercicio del poder en función de las expectativas sembradas en la mayoría colombiana.

Como una muestra de ello, el presidente de Colombia tuvo un gesto significativo con las tropas del ejército. Se fue a comer con ellos, en lugar de aceptar el trato preferencial que le correspondería como jefe de Estado, para verificar personalmente cómo son tratados los soldados colombianos. El balance fue, aparentemente, bastante negativo.

Juan Guaidó no existe y Monómeros retorna a manos de Venezuela

Las polémicas declaraciones de Gustavo Petro sobre Juan Guaidó coparon la agenda. “El presidente inexistente” es el calificativo que le otorga Petro a Guaidó.

“Es como la metáfora de la caverna de Platón. Miren como estas sombras se mueven, pero son reales e inexistentes”, señaló Petro a la revista Semana cuando se le preguntó por Juan Guaidó.

La otra parte de este relato es que, el máximo dirigente colombiano, devolvió el control de la empresa productora de fertilizantes Monómeros a Venezuela.

Monómeros fue llevada a la quiebra por los directivos nombrados por el “gobierno interino” de Juan Guaidó. Debido a ello, en Venezuela se inició una investigación por parte de la Contraloría General, dirigida a depurar responsabilidades en lo que se considera un grave daño al patrimonio de ese país.

Relaciones con la República Saharaui

Petro se ha cargado más de 20 años de una política exterior que separaba a Colombia de la República Saharaui. En el 2001, el entonces presidente Andrés Pastrana, rompió relaciones y esa decisión fue sostenida por los gobiernos que le siguieron. El hoy presidente del país latinoamericano, retomó la política de Belisario Betancour, presidente en 1985, por la cual se restablecen las relaciones con el citado territorio.

Nuevo ministerio de Igualdad

Recientemente, la vicepresidenta Francia Márquez anunció que el proyecto de creación del ministerio de Igualdad será introducido en el Congreso de Colombia.

“Asumir el desafío más grande que tiene Colombia: la desigualdad es el objetivo del nuevo Ministerio”, sentenció Márquez.