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“Que se vayan todos”: el hartazgo popular en Perú

La destitución de Pedro Castillo como presidente del Perú y la juramentación de Dina Boluarte, están muy lejos de poner fin a la crisis política en el país.

Finalmente, Pedro Castillo fue destituido. La vacancia estaba anunciada desde que asumió la presidencia, y en este caso la derecha cumplió su objetivo. No obstante, la petición de la mayoría es “que se vayan todos”, no solo el expresidente del Perú.

Castillo ahora está preso. Mientras tanto, la vicepresidenta Dina Boluarte asumió su cargo asegurando que las elecciones no serán pronto.

El presidente se ha ido pero el Congreso seguirá allí, hecho que motiva protestas en las calles. Movilizaciones de las que se habla poco o nada en los medios.

Tres mociones de vacancia fueron las que se presentaron contra Castillo, y cuatro mociones de censura se concretaron contra miembros de su gabinete, continuando una especie de método parlamentario de obstaculización de gobierno, basado en premisas de la Constitución legada por Alberto Fujimori.

La torpeza

Pedro Castillo anunció que disolvía el gabinete, y además de señalarle de golpista, varios le acusaron de haber cometido un acto de torpeza.

La vacancia era inminente y en la votación a favor de la salida de Pedro Castillo estaba incluida casi toda la bancada de Perú Libre. Los congresistas Janet Rivas, Jaime Quito y Margot Palacios fueron los únicos que se desmarcaron de la jugada golpista implementada desde el parlamento.

Varios analistas coinciden en señalar que Castillo no debió anunciar la disolución del Congreso, y que ello de alguna manera facilitó la concreción del golpe. Sin embargo, hay líderes de base que opinan lo contrario.

“Si negociaba lo iba a rechazar el pueblo. Para nosotros, Pedro Castillo y Aníbal Torres se han ido por la puerta grande”, destaca Marino Flores, líder de las Rondas Campesinas, quien fue entrevistado por el periodista peruano César Robles.

Que se vayan todos

Como se ha dicho, la crisis no termina con la salida de Pedro Castillo. Los peruanos quieren el cierre del Congreso y la apertura de un proceso constituyente, o al menos, una reforma lo suficientemente profunda como para terminar con años de inestabilidad política y que aporten reglas del juego distintas.

“Que se vayan todos”, es la expresión del hartazgo popular en el Perú. Pedro Castillo contaba con mucho menos apoyo que cuando comenzó, pero el Congreso tiene aún más rechazo.

Las movilizaciones son en todo el país, no sólo en Lima. En Arequipa y Ayacucho se registran acciones de calle en donde incluso se expresa apoyo a Pedro Castillo.

“Dina Boluarte no nos representa”, reitera Marino Flores, pidiendo además la solidaridad de movimientos sociales en todo el continente.

La reacción de EEUU

Por su parte, la agencia EFE informó que un portavoz de la administración Biden ha manifestado que los EEUU celebra la designación de Dina Boluarte como nueva mandataria del Perú.

Igualmente lo hizo el recién electo presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva. Este expresó sus buenos deseos para la nueva presidenta.

No obstante, la reacción de Lula no fue bien recibida por algunos líderes sociales de izquierda del Perú, y lamentan que el presidente electo del Brasil acepte lo que consideran un mandato ilegítimo.