El radar: 10 discos recomendables de rock y metal publicados en junio
Como cada inicio de mes, repasamos los álbumes más destacados de rock y metal publicados justamente en el que acaba de finalizar.
Se ha terminado junio, un mes que ha sido bastante prolífico y variado en lanzamientos musicales. Hablamos en relación a todos los estilos relacionados con el rock y el metal, pues del pop ya hay suficiente información porque de él ya se encargan muchos otros.
No voy a negar que ha sido muy difícil elegir solamente diez álbumes destacados para la ocasión. Pero bueno, la sección es así y no queda otra que analizar meticulosamente lo que vamos a plasmar. De todas maneras, al final del artículo habrá un apartado en el que podréis encontrar diez álbumes más que se han quedado en el tintero, aunque solamente serán mencionados.
Sin más rodeos, vamos con lo que ha dado de sí el mes de junio. ¡Comenzamos!
Helloween – Helloween (Nuclear Blast)
El nuevo álbum de Helloween ha generado muchísima expectación desde que se supo su fecha de publicación. Sobre todo por el hecho de los sonados regresos de Kai Hansen y Michael Kiske, nombres ilustres en la historia de la banda. Además, no han reemplazado a nadie, es decir, se han sumado a la alineación del combo alemán, por lo que hablamos de un total de siete integrantes.
La espera ha merecido la pena, ya que este álbum homónimo es lo mejor del grupo en mucho tiempo. Los adelantos “Skyfall” y “Fear of the Fallen” mostraban gran parte de las nuevas ideas y su calidad. El resto de la obra está a un nivel superlativo. Power metal de muchos quilates con toques de heavy metal clásico que se distribuyen en algo más de una hora de música.
Podría parecer un trabajo un tanto largo, pero el material es tan bueno que está más que justificado. La suma de los nuevos integrantes ha sido clave. Hay algo de nostalgia, sí, pero la implicación ha sido máxima y ha dado sus frutos.
Composiciones destacadas: “Out for the Glory”, “Fear of the Fallen”, “Best Time” y “Skyfall“.
Amenra – De Doorn (Relapse Records)
Amenra es, sin lugar a dudas, uno de los grandes nombres del sludge metal de corte atmosférico. Se formaron a finales de la década de los 90, y en sus primeros pasos participaron en un split en 2004 y lanzaron varios epés (principalmente Mass I y Mass II) en los que se podía vislumbrar el talento de sus músicos.
Después de ello, llegó el primer larga duración titulado como Mass III en 2005. Desde aquel entonces hasta ahora, la discografía de los belgas es absolutamente brillante. Este nuevo trabajo abandona la serie “Mass” para titularse De Doorn, y en él vuelven a dejar claro que forman parte de la realeza del sludge.
Hay ingredientes que proceden del post-hardcore y del dark ambient, pero el sello característico de su música sigue intacto. Cinco piezas, casi todas ellas rondando o superando los diez minutos, con guitarras densas y tensas, alaridos de desesperación y una base rítmica muy contundente.
Composiciones destacadas: “Ogentroost”, “De Evenmens” y “Het Gloren”.
Azure – Of Brine and Angel’s Beaks (Autoeditado)
Azure es una banda de reciente creación de la zona de Brighton (Inglaterra). Se formaron hace apenas seis años y con este Of Brine and Angel’s Beaks nos entregan su segundo álbum de estudio. La música de este quinteto es sumamente ecléctica, aunque su base musical radica en un rock progresivo preciosista, con pinceladas de art rock, metal progresivo, pop e incluso power metal, aunque de forma puntual.
La propuesta es lo suficientemente diversa como para no parecerse excesivamente a la de ninguna otra banda, lo que les otorga un sello personal importante, a pesar de sus influencias. Los textos abordan temas de fantasía, lo que les confiere un carácter épico entre capas de instrumentos y estructuras bastante complejas. Habrá que estar atentos a los movimientos de Azure, ya que con este segundo álbum han dado buena muestra de lo que pueden llegar a hacer.
Composiciones destacadas: “Ameotoko I – The Curse“, “Outrun God”, “Mercy” y “A Sailor Will Learn”.
Atvm – Famine, Putrid and Fucking Endless (Autoeditado)
Caos organizado. Así podríamos definir brevemente el álbum debut de estos británicos. Debut en largo, se entiende, ya que previamente probaron suerte con algún que otro epé. Famine, Putrid and Fucking Endless es una exhibición musical sobre cómo se puede hacer death metal técnico con calidez y de manera muy humana, sin exagerar el virtuosismo.
Además, el sonido es sumamente creíble, pues no estamos ante un artefacto sobreproducido, algo que suele ser habitual en los últimos tiempos. Además del vehículo principal en forma de death metal, hay algo de thrash, de metal progresivo y de secciones que podrían estar cerca del jazz, aunque sea por ciertos guiños.
Los riffs de guitarra son extraordinarios, la base rítmica es notable y deja mucha huella, mientras que las voces guturales tienen profundidad. Todas las composiciones son variadas, con un toque imprevisible, haciendo que el disco sea un gran viaje musical. Un magnífico descubrimiento.
Composiciones destacadas: “Sanguinary Floating Orb“, ” Ⲁⲛⲋ-ⲟⲩ Ⲙⲁⲧⲟⲩ”, “Vagh Nakh” y “Squeal in Torment”.
Crowne – Kings in the North (Frontiers Records)
Crowne es un grupo de reciente creación, aunque sus integrantes son músicos experimentados en el campo del hard rock melódico. Ellos son el vocalista Alexander Strandell (Art of Nation), el guitarrista y teclista Jona Tee (H.e.a.t.), el bajista John Levén (Europe) y el batería Christian Lundqvist (The Poodles).
Todo ese bagaje musical que llevan a sus espaldas se nota desde el primer hasta el último tema. En efecto, nos entregan un trabajo en el que las melodías sobresalen por todos lados, pero en el que todos los aspectos de la producción están exquisitamente cuidados.
Hay enormes cortes basados en riffs efectivos, líneas vocales muy pegadizas, base rítmica sólida y teclados que cumplen la función de ensalzar y dar cuerpo a los mismos. “Sharoline” y “Mad World” son grandes ejemplos de lo que expongo. No sabemos si se va a tratar de un proyecto puntual o bien tendrá cierta continuidad. Esperemos que sea lo segundo porque su música lo merece.
Composiciones destacadas: “Perceval”, “Sharoline”, “Mad World” y “Set Me Free”.
Pharaoh – The Powers That Be (Cruz del Sur Music)
Nueve años han pasado desde lo último publicado por los estadounidenses Pharaoh. Mientras tanto, Chris Black y Matt Johnsen han ocupado parte del tiempo en seguir con la carrera de Dawnbringer.
La espera ha terminado con la llegada de The Power That Be, álbum de power metal americano con tintes de speed metal y algo de progresivo. Es una propuesta algo similar a la de sus anteriores trabajos, pero hay ciertas variaciones interesantes.
La producción es muy real y orgánica. Las composiciones están muy bien construidas y están acompañadas de buenas líneas vocales a cargo de Tim Aymar. Black, que aquí solamente toca la batería, aporta aplomo y buen hacer, mientras que Johnsen luce un estilo más preciosista con su guitarra. El bajo de Chris Kerns está bastante presente, se deja notar y crea dibujos bien marcados. La espera valió la pena y no sería de extrañar que fuese uno de los álbumes del año en su estilo.
Composiciones destacadas: “The Powers That Be”, “Waiting to Drown”, “Lost in the Waves” y “I Can Hear Them”.
Siderean – Lost on Void’s Horizon (Edge Circle Productions)
Los primeros pasos de esta formación originaria de Eslovenia se dieron bajo el nombre de Teleport. Durante ese período fueron buscando su sonido por medio de diferentes epés. Han ido variando del thrash metal al death, pasando por un breve período en el que utilizaron elementos black.
A partir de 2020, y con cambios de formación incluidos, pasaron a llamarse Siderean. Lost on Void’s Horizon es su primer larga duración tras un corto epé en el que mostraban parte de su evolución musical. En la actualidad se ubican bajo los parámetros de un death metal técnico con inclinaciones progresivas, por lo que han optado por la vía más compleja y dinámica.
El álbum, de apenas cuarenta minutos de duración, se antojan suficientes para comprobar el buen hacer de sus músicos. Las seis composiciones, en su mayoría rondando o sobrepasando los siete minutos, son extraordinariamente fluidas, con diversos matices y con cambios de ritmo importantes.
Composiciones destacadas: “Eolith“, “Lost on Void’s Horizon” y “Sidereal Evolution”.
Terra Odium – Ne Plus Ultra (Frontiers)
Es bastante probable que el nombre de Terra Odium no le diga demasiado a muchos de los lectores. Otra cosa es si están al tanto de las noticias musicales en terrenos del rock y el metal. Sin embargo, si digo que está integrado por músicos como Øyvind Hægeland (Arcturus, Spiral Architect), Ole P. Fredriksen (Manitou), Steve DiGiorgio (Death, Testament, Soen), Asgeir Mickelson (Borknagar, Spiral Architect) y Jon Phipps, colaborador puntual en Amorphis o Angra, la cosa se pone más seria.
Pues bien, estos reputados músicos han creado esta banda de metal progresivo, fundada en Noruega, y han debutado con este Ne Plus Ultra. La calidad está fuera de toda duda. Las composiciones están estupendamente ejecutadas, la instrumentación es dinámica, variada y los músicos se prestan a diferentes e inteligentes cambios de ritmo. Todo ello con melodías bien cuidadas. Sobresale el cierre protagonizado por “The Clouded Morning”.
Composiciones destacadas: “Crawling”, “The Road Not Taken”, “The Torn” y “The Clouded Morning“.
King Buffalo – The Burden of Restlessness (Autoeditado)
Estupenda y prolífica banda estadounidense que, a pesar de su corta existencia, ha entregado un buen número de epés, algunos de ellos muy interesantes, y tres larga duración. El último de ellos es este The Burden of Restlessness, una obra de cuarenta minutos que cuenta con siete fabulosas composiciones. Sus ingredientes musicales son variados, ya que posee una columna vertebral que se deja nutrir por otros elementos.
Así, tenemos un álbum de rock progresivo fusionado con stoner y rock psicodélico. Además, hay sutiles pinceladas de space rock y krautrock. Si te dejas llevar por sus atmósferas, sus guitarras marcadas y sus puntuales arranques más saturados, ese bajo tan fluido y el estupendo y elegante golpeo de la batería, vas a disfrutar muchísimo del disco. Al ser corto e inspirado, el tiempo se pasa enseguida. Con unas pocas oportunidades, terminarás queriéndolo poner una y otra vez. Alterna momentos cristalinos con otros más polvorientos.
Composiciones destacadas: “Burning”, “Hebitation”, “Locusts” y “Grifter”.
Thy Catafalque – Vadak (Season of Mist)
Lo de Tamás Kátai es digno de estudio. El músico húngaro ha pasado a ser el único integrante detrás de Thy Catafalque a partir de 2011, momento en el que Juhász János abandonó lo que hasta ese momento fue un dúo.
Desde entonces, el músico húngaro no ha parado de publicar discos con mucho que decir de forma muy regular. De hecho, el que fuera su último trabajo hasta hace poco se publicó el pasado año. Vadak es su nueva criatura, donde una vez más vuelve a situar su música dentro del metal progresivo y el avant-garde metal, lo que significa que aquí no encontrarás, ni de lejos, estructuras convencionales.
Además, incorpora elementos del folk húngaro, así como un poco de electrónica y black metal. Todo esto, que podría ser un batiburrilo importante, está muy bien ordenado y cohesionado, algo habitual en toda su carrera. No he encontrado ningún punto flojo en el transcurso del disco y sí muy buena música, por lo que probablemente se convierta en uno de los discos del año.
Composiciones destacadas: “Szarvas”, “Köszöntsd a hajnalt”, “Móló” y “Vadak (Az átváltozás rítusai)“.
Otros diez discos interesantes publicados el pasado mes de junio:
- Beautiful Bedlam – Beautiful Bedlam
- Cerebral Rot – Excretion of Mortality
- Flotsam and Jetsam – Blood in the Water
- Fractal Universe – The Impassable Horizon
- Impious Throne – Scourge
- Mahr – Death Comes Adorned in the Sun
- Passéisme – Eminence
- Seputus – Phantom Indigo
- Wanderer – Liberation From A Brutalist Existence
- Warmoon Lord – Battlespells